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Una pista de skateboarding en la cima de un rascacielos en Dubai
00:32 - Fuente: CNN

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(CNN) – Hace poco más de 10 años, en octubre de 2013, un A320 de Wizz Air que llegaba desde Budapest fue noticia al convertirse en el primer vuelo comercial de pasajeros que aterrizó en el Aeropuerto Internacional Al Maktoum, también conocido como Dubai World Central (DWC).

Este aeropuerto totalmente nuevo, ubicado a unos 32 kilómetros al suroeste del centro de Dubai, fue diseñado para convertirse, en un futuro no muy lejano, en el más grande y concurrido del mundo. La visión era (y sigue siendo) la de un megacentro futurista que garantice que el rol del emirato como nodo importante de la economía global no se enfrente a problemas de capacidad en el corto plazo.

Aeropuertos de Dubai, la autoridad aeroportuaria que gestiona tanto el Aeropuerto Internacional de Dubai (DXB) como la nueva terminal, promete que cuando Al Maktoum International esté terminado, podrá atender a más de 160 millones de pasajeros al año, al mismo tiempo que 12 millones de toneladas de carga.

Para poner eso en perspectiva, se trata de casi 63 millones de viajeros más que los que atendió en 2022 el aeropuerto actual más transitado del mundo, el Hartsfield-Jackson Atlanta International, y casi 100 millones más que lo que circularon en el Aeropuerto Internacional de Dubai. No lo olvidemos, DXB ya es el aeropuerto más transitado del mundo fuera de EE.UU. y la principal puerta de entrada internacional de Dubai.

Sin embargo, una década y una pandemia después de ese vuelo inicial de pasajeros, y 13 años completos después de que abriera por primera vez para operaciones de carga, el aeropuerto más nuevo de Dubai todavía es un trabajo en progreso.

Por el momento, DWC tiene un papel como centro de mantenimiento, reparación y revisión de aeronaves (MRO, en el lenguaje de la industria). También alberga a varios operadores de carga aérea (incluido Emirates Cargo, la filial de carga de la aerolínea de bandera de los Emiratos Árabes Unidos) y gestiona aviones ejecutivos y algunos vuelos chárter.

Sin embargo, los servicios regulares de pasajeros se limitan a los prestados por un puñado de compañías de bajo costo que operan servicios principalmente a Europa del Este, Rusia y Asia Central.

Entonces, ¿qué ha estado pasando con esos ambiciosos planes? ¿Y cuándo podríamos ver una línea de tiempo o nuevos diseños?

Hace más de una década, Dubai anunció por primera vez sus planes de ampliar Al Maktoum International hasta convertirlo en el aeropuerto más grande del mundo.

“Aeropuerto del futuro”

El reciente Salón Aeronáutico de Dubai, celebrado en un recinto especialmente diseñado en el Aeropuerto Internacional Al Maktoum en 2023, ofreció algunas pistas interesantes sobre lo que se espera de DWC y algunas ideas sobre la estrategia a largo plazo de los aeropuertos de Dubai.

“Hemos priorizado la expansión y las inversiones en DXB para cumplir con los requisitos y planes de nuestros clientes (…) Esto continuará hasta que se absorba toda la capacidad posible”, dice a CNN Paul Griffiths, director ejecutivo de Aeropuertos de Dubai.

El plan es maximizar la capacidad actual mediante “la aplicación de tecnología innovadora y renovaciones para repensar el uso del espacio”, dice Griffiths, agregando otros 20 millones de pasajeros a la capacidad anual actual de DXB, de 100 millones de pasajeros.

“Esta expansión no solo permitirá el crecimiento a corto plazo, sino que también nos brindará tiempo adicional para elaborar estrategias para la expansión gradual de DWC. Nuestras previsiones de pasajeros para 2023 se sitúan en 86,8 millones, con proyecciones de 88,2 millones y 93,8 millones para 2024 y 2025, respectivamente”, añade.

Griffiths ha tenido cuidado de no confirmar un cronograma, pero en noviembre de 2023 dijo a la agencia de noticias AFP que cuando se alcance la capacidad “vamos a necesitar un nuevo aeropuerto (…) Eso tendrá que suceder en algún momento durante la década de 2030”.

“DWC es una perspectiva emocionante”, dijo Griffiths a CNN en enero de este año. “El futuro desarrollo de la fase 2 representa una oportunidad importante, que nos permite construir desde cero en alineación con los objetivos y planes de crecimiento más amplios de Dubai”.

Griffiths dijo a los periodistas en la exhibición aérea que ya se están produciendo diseños para el nuevo megaeropuerto, pero el enorme modelo a escala tridimensional exhibido en el evento, con sus seis pistas paralelas y tres terminales gigantes, ya quedó desactualizado desde hace algunos años.

Actualmente, Al Maktoum International solo gestiona un número limitado de vuelos comerciales de pasajeros.

Cambiando el modelo de negocios

Sin embargo, Griffiths ha insinuado a la revista Business Traveler sobre un enfoque modular intrigante para expandir gradualmente DWC en una línea de tiempo que podría llegar hasta la década de 2050. “No estamos planeando un aeropuerto que tenga terminales (…) Vamos a cambiar completamente el modelo de negocio de los aeropuertos, hacerlos mucho más íntimos y deshacernos de todos los procesos heredados a los que hemos tenido que someter a nuestros clientes durante demasiado tiempo”, dijo.

El aeropuerto será la pieza central de un plan mucho más amplio, llamado Dubai Sur, que prevé la creación de una ciudad completamente nueva en un tramo de desierto de 145 kilómetros cuadrados justo al sur de Dubai.

Todo este nuevo distrito, del que ya se están empezando a gestar algunas piezas, contará con ocho barrios, cada uno de ellos destinado a una industria o actividad específica, con una mezcla también de zonas residenciales y comerciales.

Con el aeropuerto en el centro de la acción, se formará una completa “aerotrópolis”. El Centro Aeroespacial Mohammed bin Rashid (MBR), que albergará el floreciente ecosistema industrial aeroespacial y de aviación de Dubai, incluido el recientemente anunciado centro de ingeniería de los Emiratos, valorado en US$ 950 millones, desempeñará un papel muy destacado en esta proyección.

Sin embargo, el verdadero punto de inflexión llegará el día en que el gigante local Emirates y su socio más pequeño, flyDubai, se trasladen al nuevo aeropuerto desde su actual sede en el Aeropuerto Internacional de Dubai. Este traslado ha estado sobre la mesa durante mucho tiempo, pero aún no se conoce una fecha para que suceda.

Según Nadine Itani, líder del programa de gestión del transporte aéreo de la Universidad de Surrey en Inglaterra, el cambio de Emirates a DWC es más que una reubicación.

“Es un realineamiento estratégico en respuesta a la dinámica cambiante del mercado mundial de viajes y comercio aéreo”, afirma la experta en aviación, quien señala que la apuesta de Dubai por DWC como futuro megacentro no es un movimiento aislado. Actualmente hay una carrera en la región para invertir en nuevas instalaciones aeroportuarias de gran escala y nadie quiere quedarse atrás.

Las compañías aéreas de bandera de la región no solo están interesadas en reclamar su parte de los flujos de viajes mundiales y posicionar sus capitales como centros del comercio internacional, sino también, cada vez más, en establecerse como destinos turísticos por derecho propio. Nuevos y brillantes aeropuertos respaldarán esta búsqueda.

“Ha habido un cambio notable en la combinación del tráfico entrante a Dubai con una disminución en los pasajeros de conexión y un aumento en los pasajeros de destino, junto con el aumento previsto en la actividad de transporte y logística, debido al papel de Dubai en los acuerdos comerciales planificados, como el Corredor Económico India-Oriente Medio-Europa”, dice Itani.

Inaugurado en 2014, el Aeropuerto Internacional Hamad, en el cercano Qatar, un competidor directo de Dubai en el mercado de conectividad de larga distancia, se está preparando para ampliar su capacidad a más de 60 millones de pasajeros anuales.

Esto se suma a otros proyectos de expansión aeroportuaria en la región: la apertura de un nuevo aeropuerto de US$ 1.800 millones en Muscat, Omán, en 2018; la nueva terminal de US$ 1.100 millones en Bahrein en 2021 y, más recientemente, en noviembre de 2023, la gran Terminal A de Abu Dabi, una instalación de 780.000 metros cuadrados con capacidad para albergar hasta 79 aviones simultáneamente.

En el extremo norte del Golfo, el Aeropuerto Internacional de Kuwait está construyendo una nueva terminal diseñada por el reconocido estudio de arquitectura británico Foster+Partners, que tendrá capacidad para atender inicialmente a 25 millones de pasajeros al año, con posibilidad de duplicarla hasta 50 millones en el futuro.

Y a menos de 30 kilómetros del centro de Dubai, el Aeropuerto Internacional de Sharjah, que alberga principalmente a la aerolínea de bajo costo Air Arabia, también está aumentando su capacidad a 20 millones de pasajeros al año.

Arabia Saudita también está preparando una expansión masiva de su aeropuerto como parte de su Visión 2030, que ha asignado US$ 100.000 millones para apuntalar la conectividad aérea del reino y convertirlo en uno de los principales destinos turísticos del mundo.

Además de una nueva aerolínea internacional, Riyadh Air, la capital saudita también recibirá un nuevo aeropuerto gigantesco. De hecho, el nuevo aeropuerto de seis pistas de Riad se construirá en el mismo lugar que el actual, reemplazándolo por completo. Tendrá capacidad para 185 millones de pasajeros al año, casi siete veces la cantidad que manejaba en 2022.

Cuando se trata de reclamar el primer puesto en la clasificación mundial de aeropuertos, hay más en juego que nunca.