(CNN) – La Policía del este de la India detuvo a tres hombres por la presunta violación en grupo de una turista extranjera y la agresión a su marido, mientras busca a otros cuatro sospechosos en un caso que pone de relieve la lucha que durante décadas ha librado el país para frenar la violencia sexual contra las mujeres.
La pareja, que viajaba en motocicleta desde el estado de Bengala Occidental al vecino Nepal, fue encontrada a última hora de este viernes por agentes de Policía que patrullaban, dijo Pitambar Singh Kherwar, superintendente de la Policía del distrito de Dumka, en el estado de Jharkhand.
Fueron trasladados al hospital, donde la mujer dijo al médico que había sido violada, añadió.
La Policía conoce la identidad de los sospechosos buscados y ha formado un equipo especial de investigación, dijo Kherwar. No está claro si los tres sospechosos detenidos tienen representación legal.
CNN no reveló el nombre de la víctima, de acuerdo con la ley india que impide nombrar a las víctimas de violencia sexual. La Policía no ha revelado los nombres ni las nacionalidades de la pareja.
Las detenciones se producen después de que una pareja de blogueros de viajes publicara este sábado en su cuenta de Instagram que les habían “clavado cuchillos en la garganta” durante un ataque en la India. La mujer había sido violada y llevada al hospital para una prueba de ADN, dijeron.
La pareja publica en español, y la mujer dice en su página de Instagram que es brasileña.
En su historia de Instagram, la mujer mostraba moratones en la cara y decía: “Así es como se me ve la cara, pero no es lo que más me duele. Pensé que iba a morir”.
En un post de seguimiento este domingo, la pareja agradeció a sus seguidores por su apoyo, diciendo que están bien y que “la Policía está haciendo todo lo posible para atrapar” a los sospechosos restantes.
CNN se ha puesto en contacto con la pareja para solicitar sus comentarios.
La Comisión Nacional de la Mujer de la India condenó la presunta agresión.
La presidenta de la NCW, Rekha Sharma, ha hablado con la víctima y le ha ofrecido toda la ayuda necesaria, según publicó la organización en la plataforma social X el sábado.
El ministro de Jharkhand, Mithilesh Kumar Thakur, calificó la presunta agresión de “incidente condenable”.
“Si se ha cometido un delito, no se perdonará a los culpables”, declaró este sábado.
India ha luchado durante años para abordar las altas tasas de violencia contra las mujeres, con una serie de casos de violación de alto perfil que involucran a visitantes extranjeros que atraen la atención internacional sobre el tema.
En 2018, una mujer británica fue presuntamente violada mientras caminaba hacia su hotel en el estado occidental de Goa, un popular destino turístico; dos años antes, una mujer estadounidense fue presuntamente drogada y violada por un grupo de hombres en su habitación de hotel de cinco estrellas en Nueva Delhi. Y en 2013, seis hombres fueron condenados a cadena perpetua por la violación en grupo de una turista suiza.
Según la Oficina Nacional de Registro de Delitos de India, en 2022 se registraron un total de 31.516 casos de violación, una media de 86 casos al día.
Y los expertos advierten de que el número de casos registrados son solo una pequeña fracción de lo que puede ser la cifra real, en un país profundamente patriarcal donde la vergüenza y el estigma rodean a las víctimas de violación y a sus familias.
Según las leyes vigentes en India, sigue sin ser delito que un hombre fuerce a su mujer a mantener relaciones sexuales o a realizar actos sexuales, siempre que ella sea mayor de 18 años.
Quizá el caso más infame de los últimos años en India fue la violación en grupo en 2012 de una estudiante de medicina que fue golpeada, torturada y abandonada a su suerte tras un brutal ataque en un autobús público en Nueva Delhi.
El caso y las protestas que siguieron en todo el país atrajeron la atención de los medios de comunicación internacionales e impulsaron a las autoridades a promulgar reformas legales. La ley sobre violación se modificó en 2013 para ampliar la definición del delito y establecer penas estrictas no solo para la violación, sino también para la agresión sexual, el voyeurismo y el acoso.
A pesar de estos cambios, los casos de violación siguen siendo frecuentes en el país, y las víctimas y sus defensores afirman que el gobierno sigue sin hacer lo suficiente para proteger a las mujeres y castigar a los agresores.