(CNN) – Los investigadores que buscan respuestas sobre por qué algunos tipos de cáncer aumentan en los adultos más jóvenes dicen haber encontrado una pista interesante: una conexión con el envejecimiento biológico acelerado.
El envejecimiento es el principal riesgo para muchos tipos de cáncer, lo que significa que entre más se envejece, más probabilidades hay de que te diagnostiquen. Y cada vez más, los expertos reconocen que la edad va más allá que simplemente el número de velas en un pastel de cumpleaños. También es el desgaste del cuerpo, causado por el estilo de vida, el estrés y la genética, lo que a veces se denomina edad biológica de una persona.
“Todos sabemos que el cáncer es una enfermedad del envejecimiento. Sin embargo, está llegando a una población más joven. Entonces, si utilizamos el concepto bien desarrollado de envejecimiento biológico para aplicarlo a la generación más joven podemos explorar un área realmente intacta”, dijo el Dr. Yin Cao, profesor asociado de cirugía en la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis y autor principal de la nueva investigación, que se presentó el domingo en la conferencia anual de la Asociación Estadounidense de Investigación del Cáncer en San Diego.
Causas del envejecimiento biológico
Cao y su equipo examinaron los registros médicos de 148.724 personas de entre 37 y 54 años que participan en un gran banco de datos llamado UK Biobank.
Se enfocaron en nueve marcadores sanguíneos que se ha demostrado que se correlacionan con la edad biológica:
- Albúmina: una proteína producida por el hígado que disminuye con la edad.
- Creatinina: un producto de desecho en la sangre producido por la digestión de proteínas y la descomposición del tejido muscular; un cálculo de la función renal. Los niveles más bajos se correlacionan con una mayor longevidad.
- Glucosa: con la edad, el nivel de azúcar en sangre se mantiene alto durante más tiempo después de las comidas.
- Proteína C reactiva: producida por el hígado en respuesta a la inflamación; niveles relativamente más altos corresponden a un envejecimiento más rápido.
- Porcentaje de linfocitos: la concentración de estos glóbulos blancos relacionados con la función inmune tiende a disminuir con la edad.
- Volumen celular medio: una medida del tamaño promedio de los glóbulos rojos, que aumenta con la edad.
- Ancho de distribución de glóbulos rojos: la diferencia entre el tamaño de los glóbulos rojos más pequeños y más grandes de una persona, que tiende a aumentar con la edad.
- Fosfatasa alcalina: una enzima producida principalmente por el hígado y los huesos que tiende a aumentar con la edad.
- Recuento de glóbulos blancos: un número de glóbulos blancos superior al rango normal en la sangre puede corresponder con un mayor envejecimiento.
Estos nueve valores luego se conectaron a un algoritmo llamado PhenoAge que se utilizó para calcular la edad biológica de cada persona. Los investigadores determinaron el envejecimiento acelerado comparando las edades biológicas de las personas con sus edades cronológicas.
Luego revisaron los registros de cáncer para ver cuántos miembros del grupo fueron diagnosticados con cánceres tempranos, que los investigadores definieron como cánceres que aparecen antes de los 55 años. Se diagnosticaron casi 3.200 cánceres.
Los investigadores encontraron que las personas nacidas en 1965 o después tenían un 17% más de probabilidades de mostrar un envejecimiento acelerado que las nacidas entre 1950 y 1954.
¿Qué podría decirnos un envejecimiento más rápido sobre el riesgo de cáncer?
Después de ajustar los datos por factores que pensaban que podrían sesgar sus resultados, los investigadores encontraron que el envejecimiento acelerado se asociaba con un mayor riesgo de cáncer. Las asociaciones más fuertes se observaron con los cánceres de pulmón, estómago e intestino y de útero.
En comparación con las personas que tuvieron un menor envejecimiento rápido en la muestra del biobanco, aquellas que obtuvieron la puntuación más alta tenían el doble de riesgo de cáncer de pulmón de aparición temprana, más de un 60% más de riesgo de un tumor gastrointestinal y más de un 80% más de riesgo de cáncer uterino.
El estudio no fue diseñado para responder preguntas sobre por qué estos tipos de cáncer parecían tener los vínculos más fuertes con el envejecimiento acelerado, pero Ruiyi Tian, el estudiante graduado que dirigió la investigación, tiene algunas teorías.
Tian dijo que es posible que los pulmones sean más vulnerables al envejecimiento que otros tipos de tejidos porque el pulmón tiene una capacidad limitada para regenerarse. Los cánceres de estómago e intestino, dice, se han relacionado con la inflamación, que aumenta con el envejecimiento.
Cao dijo que la fortaleza de la investigación es que los investigadores vieron estas señales en una cantidad muy grande de personas, pero reconoce que el estudio también tiene limitaciones.
Por ejemplo, a las personas del estudio no se les dio seguimiento a lo largo del tiempo. Los resultados de los análisis de sangre fueron de una sola prueba, por lo que solo dieron una instantánea del riesgo, que puede cambiar. Idealmente, dijo, los investigadores podrían seguir al mismo grupo durante años, tomando muestras de sangre a lo largo del camino para obtener una trayectoria más precisa de su riesgo.
“El escenario ideal es que tendríamos múltiples recolecciones de sangre a lo largo de la vida, lo que no es factible ni siquiera en biobancos como el UK Biobank”, explicó Cao.
Cao dijo que la asociación también debería probarse en poblaciones más diversas, ya que también es necesario aclarar mejor los efectos de los factores sociales vinculados a la discriminación racial.
La Dra. Anne Blaes, que estudia el impacto del envejecimiento biológico en los sobrevivientes de cáncer en la Universidad de Minnesota, comentó que los resultados del estudio son interesantes porque podrían señalar una mejor manera de encontrar personas que tienen un mayor riesgo de contraer cáncer cuando todavía son jóvenes. En este momento, los adultos jóvenes que no tienen antecedentes familiares u otros factores de riesgo no se someten a pruebas periódicas para detectar la mayoría de los tipos de cáncer.
“Observamos cada vez más cánceres, especialmente cánceres gastrointestinales y cánceres de mama, en personas más jóvenes. Y si tuviéramos una forma de identificar quién tiene mayor riesgo de padecerlos, entonces realmente se puede imaginar que recomendaríamos las pruebas de detección en un momento diferente”, afirmó Blaes, profesora y directora de la División de Hematología y Oncología de la facultad de medicina de la UM, que no participó en la nueva investigación.
Blaes indicó que si se pueden encontrar personas que corren un mayor riesgo porque sus células envejecen más rápido, también se pueden abordar intervenciones en el estilo de vida: aspectos como la nutrición, el ejercicio y el sueño.
“Hay medicamentos que también parecen poder frenar el envejecimiento acelerado”, dijo Blaes, que prueba dos de ellos en sobrevivientes de cáncer. Los sobrevivientes de cáncer a menudo muestran un mayor envejecimiento biológico, tal vez debido a los efectos posteriores de tratamientos como la quimioterapia y la radiación.
Los medicamentos pertenecen a una clase llamada senolíticos, medicamentos que se cree que atacan y eliminan las células dañadas y envejecidas.
En este momento, se desconoce quién podría beneficiarse de estos medicamentos, pero las evaluaciones del envejecimiento acelerado como PhenoAge algún día podrían ayudar a los médicos a identificar a las personas que más los necesitan.
“Es muy interesante. No es el mejor momento para salir y recetar esos medicamentos a la gente, pero este es un trabajo realmente importante”, concluyó Blaes.