(CNN Español) – Este martes, miles de estudiantes, graduados, docentes y organizaciones políticas marcharon en la Ciudad de Buenos Aires en reclamo al recorte de financiamiento que el Gobierno nacional está aplicando a las universidades públicas.
Como parte de su política de déficit fiscal, la administración del presidente de Argentina Javier Milei decidió mantener el presupuesto que estaba asignado para las universidades públicas para el año 2023. Sin embargo, durante ese año, el país registró una inflación de casi 300%, lo que resulta en una pérdida adquisitiva real de alrededor del 65%.
Hasta el momento, el Gobierno solo anunció un incremento en el financiamiento para los gastos de funcionamiento, que simbolizan menos del 15% de los gastos universitarios.
La Universidad de Buenos Aires (UBA), que es la más grande de Argentina, no puede asegurar hasta cuándo podrá funcionar si no hay un aumento presupuestario. Incluso, ya hay sedes facultativas que se han quedado sin luz y que están limitando el acceso a la electricidad.
En este contexto, distintos actores de la comunidad educativa marcharon desde el Congreso de la Nación hasta la Casa de Gobierno bajo la consigna: “En defensa de la universidad pública argentina”.