(CNN) – El gobierno del presidente de Estados Unidos Joe Biden impuso restricciones de visa al exsargento de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) Elor Azaria, “por su participación en una grave violación a los derechos humanos, concretamente por una ejecución extrajudicial en la Ribera Occidental”, anunció este miércoles el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Como resultado de la acción, a Azari y su familia inmediata se les impedirá el ingreso a Estados Unidos.
El Departamento de Estado “también está tomando medidas para imponer restricciones de visa a un grupo adicional de personas por haber estado involucrados o haber contribuido significativamente a socavar la paz, la seguridad o la estabilidad en la Ribera Occidental”, dijo Miller.
“Específicamente, estas restricciones de visa se aplican contra quienes han utilizado la violencia contra personas o propiedades, o han restringido indebidamente el acceso de los civiles a servicios esenciales y necesidades básicas, incluido el acceso a alimentos, agua, electricidad o suministros médicos (…) Los familiares directos de estas personas también pueden estar sujetos a estas restricciones”, agregó.
El gobierno de Biden ha adoptado una serie de medidas punitivas contra los acusados de perpetrar violencia y violaciones de derechos humanos en la Ribera Occidental. Sin embargo, todavía tienen que tomar una decisión sobre si restringir la ayuda a un batallón de las FDI –Netzah Yehuda– que, según Estados Unidos, había cometido graves violaciones a los derechos humanos antes del inicio de la guerra en Gaza. Una investigación de CNN encontró que los excomandantes de esa unidad fueron ascendidos a puestos superiores en las FDI y que ahora están activos en el entrenamiento de tropas terrestres israelíes, así como en la dirección de operaciones en Gaza.
Azaria fue declarado culpable de homicidio involuntario por matar a tiros a un palestino herido y sentenciado a 18 meses de prisión militar en 2017.
El palestino Abdel Fattah al-Sharif, de 21 años, fue uno de los dos hombres acusados de apuñalar a otro soldado israelí en la ciudad de Hebrón en marzo.
Se presentaron cargos contra Azaria después de que aparecieran imágenes de video que lo mostraban disparando a Sharif en la cabeza mientras yacía en el suelo, herido y ya sometido. Otro sospechoso palestino ya había sido asesinado a tiros.