(CNN) – Siete miembros del personal estadounidense resultaron heridos el lunes por el impacto de dos cohetes contra la base aérea iraquí de Al Asad, informó el martes un responsable de Defensa.
“Cinco militares y dos contratistas estadounidenses resultaron heridos en el ataque. Cinco de los heridos están siendo atendidos en la base aérea de Al Asad y dos han sido evacuados para recibir más cuidados”, dijo el funcionario. “Los siete heridos se encuentran en situación estable”.
El funcionario dijo que las evaluaciones posteriores al ataque aún están en curso.
El Departamento de Defensa estadounidense culpó a última hora del lunes a las milicias alineadas con Irán del ataque, calificándolo de “peligrosa escalada”.
Una lectura del Pentágono de una llamada entre el secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, y el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, dijo que los dos hombres “coincidieron en que el ataque de hoy de la milicia alineada con Irán contra las fuerzas estadounidenses estacionadas en la base aérea de Al-Asad en el oeste de Iraq marcó una peligrosa escalada y demostró el papel desestabilizador de Irán en la región”.
Austin reiteró a Gallant “el inquebrantable compromiso de Estados Unidos con la seguridad de Israel frente a las amenazas de Irán, el Hezbollah libanés y otros grupos milicianos alineados con Irán”, según la lectura.
Un vehículo que transportaba cohetes fue interceptado por el ejército iraquí el lunes tras el ataque. El ejército iraquí informó en un comunicado de que desde el vehículo se habían lanzado dos cohetes en el distrito de Haditha, y que se estaban preparando ocho más para su lanzamiento.
El comunicado añade que se está persiguiendo a los autores del ataque y que se exigirán responsabilidades a los líderes, comandantes y oficiales responsables de las “violaciones de la seguridad en la zona”.
El ataque se produce en medio de las altísimas tensiones en Medio Oriente, en momentos en que Estados Unidos se ha estado preparando para las represalias iraníes contra Israel por la muerte en un ataque en Teherán del líder político de Hamas, Ismail Haniyeh. Israel no ha hecho comentarios sobre la muerte de Haniyeh. Hezbollah, en Líbano, también ha prometido represalias contra Israel tras la muerte de uno de sus principales comandantes en Beirut.