(CNN) – La estrella estadounidense Raven Saunders nunca ha sido tímida a la hora de destacar y eso es exactamente lo que hizo en las semifinales de lanzamiento de peso de este jueves en los Juegos Olímpicos de París 2024.
Saunders se clasificó para la final del viernes con un lanzamiento de 18,62 metros, en el cuarto puesto de su grupo de clasificación y en el séptimo en la general.
Pero fue su elección de moda la que causó revuelo.
Saunders se puso una máscara negra y un par de gafas de sol de visera de colores mientras competía, y más tarde dijo que el atuendo trataba de inspirar a las personas a ser ellas mismas.
“Me siento especial intentando que el mundo esté más en sintonía e intentando darnos y aportarnos más en nuestro evento”, declaró Saunders tras llegar a la final.
“Es una forma de hacerme destacar y quiero animar a otras mujeres: están surgiendo muchas atletas más jóvenes que realmente impulsan sus propios estilos”.
“Limita el escaparate que seamos lanzadores de bala, pero tenemos nuestro propio estilo, podemos hacer cosas tan grandes y brillantes como cualquier velocista, cualquier saltador, quien sea. Así que también merecemos ese protagonismo”.
No es la primera vez que Saunders lleva una máscara durante la competición. En los últimos años se ha hecho famosa por sus extravagantes decisiones de vestuario.
De hecho, su Instagram muestra publicaciones de multitud de competiciones luciendo diversas máscaras, desde una que imita la sonrisa del personaje de DC Comics el Joker, hasta otra con la mueca de Hulk –el apodo de Saunders es ‘Hulk’–.
Saunders espera mejorar su medalla de plata conseguida en los Juegos de Tokio hace tres años.
En la ceremonia de entrega de medallas tras ganar la plata en Tokio, Saunders levantó sus manos y las cruzó formando una X mientras junto a sus compañeras posaba para las fotos, y dijo a la NBC en aquel momento que representaba “la intersección donde se encuentran todas las personas oprimidas”.
Tras superar con éxito las semifinales de París, Saunders afirmó que se encontraba en un “gran estado de ánimo” de cara a la final del viernes.
“Con todo lo que he pasado, no tiene sentido para mí no estar en un gran estado de ánimo”, declaró.
“Cuando entré en este equipo, lo hice por las personas que me recordaron quién era cuando estaba deprimida, cuando estaba fuera, después de perder a mi madre, después de una operación de cadera… esto era por ellos. Porque ellos fueron los que, cuando sentí que quería abandonar, fueron los que me animaron a seguir adelante, a seguir empujando e incluso a llegar a este momento”.