PALM BEACH, FLORIDA - AUGUST 08: Republican presidential candidate former President Donald Trump speaks during a press conference at his Mar-a-Lago estate on August 08, 2024, in Palm Beach, Florida. Polls currently show a close race between Trump and Democratic presidential candidate, U.S. Vice President Kamala Harris. (Photo by Joe Raedle/Getty Images)
Trump gasta millones en anuncios de campaña para vencer a Harris
02:05 - Fuente: CNN

(CNN) – Donald Trump se presentó en la disputada Carolina del Norte para pronunciar un gran discurso sobre economía, y estalló uno de sus desquiciados mítines.

Pero en medio de los insultos, el discurso basura, la rabia y las mentiras, el expresidente dio con lo que llevaba días buscando: una estrategia para enfrentarse a la vicepresidenta Kamala Harris.

El expresidente subió al escenario este miércoles con los comentaristas republicanos suspirando por señales de que se había estabilizado luego de más de tres semanas de furia y desorientación después de que el presidente Joe Biden se retirara de la carrera de 2024.

Cualquiera que esperara un esquivo giro de Trump se habría sentido decepcionado, como casi siempre, mientras tachaba a Harris de “loca” y “no inteligente”, al tiempo que se burlaba de su risa con ataques sexistas y subía la temperatura de su demagogia sobre la inmigración.

La amargura aún incontrolada de Trump por no competir ya con Biden robó los titulares a un discurso que su campaña presentó como un ejercicio de seriedad dedicado a la economía, el tema que más preocupa a los votantes.

Pero sus comentarios, al menos la versión guionizada de los mismos, ofrecieron los primeros indicios de que la campaña de Trump está empezando a asentarse en un plan coherente, aunque extremo y divisivo, para reaccionar ante un nuevo adversario en las elecciones generales. El acto, por tanto, ofreció un anticipo de cómo se desarrollará la carrera hacia la jornada electoral tras la Convención Nacional Demócrata de la próxima semana.

El plan de Trump para frenar a Harris podría acabar perjudicándole a él mismo

El nuevo enfoque, si Trump llega a reunir la disciplina necesaria para aplicarlo de forma concentrada, es profundamente personal y está diseñado para destruir la idea de que Harris, apenas la segunda mujer que encabeza la candidatura presidencial de un partido importante, es competente para ejercer el cargo. Implica culparla del azote de la inflación y los altos precios de los comestibles que persiguieron a la administración de Biden, bajo el nuevo título de “Kamalanomics”.

Como se espera que Harris presente su propio plan económico este viernes, el equipo de Trump también quiere frustrar cualquier esfuerzo de la vicepresidenta por presentar su candidatura como un nuevo comienzo para la política económica. Trump también ha intensificado sus esfuerzos para presentar a Harris como una progresista extrema –una estrategia que a veces ha funcionado para las campañas presidenciales republicanas en el pasado– en un momento en que los medios de comunicación conservadores están haciendo comparaciones entre ella y el senador por Vermont Bernie Sanders.

Trump también está retratando a Harris como una “flip flopper” (alguien que cambia rápidamente de opinión) que se alejó de posiciones pasadas en materia de energía y salud, pero que volvería a lo que él dice es su pasado radical si es elegida. Es un intento de romper la confianza pública en la nueva candidata demócrata y se basa en su cuestionamiento anterior de su identificación como mujer negra, así como de asiática estadounidense. En palabras del candidato republicano a la vicepresidencia, J.D. Vance, Harris es un “camaleón” que cambia de política y de identidad racial para adaptarse a su búsqueda del poder.

CNNE 1725297 - ¿que nos dicen las encuestas sobre el enfrentamiento entre trump y harris?

El expresidente también está redoblando la insistencia en la política del miedo, conjurando lo que dice son catástrofes en el país y en el extranjero que se desencadenarían si Harris fuera presidenta: desde la Tercera Guerra Mundial hasta una Gran Depresión. Mezclando su visión distópica sobre la inmigración y la delincuencia, Trump está aprovechando la inseguridad de los estadounidenses que luchan por permitirse un estilo de vida decente y que pueden estar alarmados por la marcha de enemigos de EE.UU. como China y Rusia.

Pero la cuestión para Trump ante el auge de Harris es cuánto daño se ha hecho ya a sí mismo con sus rabietas y falsas afirmaciones de que la sustitución de Biden en la candidatura demócrata representa algún tipo de golpe. Las nuevas encuestas muestran hasta qué punto Harris ha transformado radicalmente las elecciones. La vicepresidenta ha desatado una explosión de entusiasmo en un partido que estaba desmoralizado hace sólo tres semanas. Y está reparando los agujeros en la coalición demócrata que amenazaban con condenar las esperanzas de un segundo mandato de Biden, especialmente entre las minorías y los votantes jóvenes.

El enfoque de Trump, exhibiendo su temperamento volcánico y su estilo personal despiadado, parece una forma extraña de ganarse a los votantes suburbanos, femeninos y moderados de los estados disputados que se han vuelto aún más críticos para el resultado en noviembre ahora que Harris ha devuelto la carrera a un empate efectivo.

La crudeza de los ataques de Trump puede resultar profundamente ofensiva para algunas votantes femeninas.

Por ejemplo, este miércoles Trump volvió a burlarse de la risa de Harris, y la utilizó para sugerir que no es apta para la presidencia. “¿Qué le ha pasado a su risa? Hace una semana que no oigo esa risa”, dijo. “Por eso la mantienen fuera del escenario”, añadió, calificando su risa como la de “una loca” y “una amenaza para su carrera”.

Y durante la mayor parte del discurso de este miércoles, Trump pareció seguir jugando con los votantes de base que lo adoran en lugar de intentar atraer a un público más centrista. De hecho, incluso se burló de la idea de dar un discurso serio –quizá molesto por los exmandatarios republicanos–, como el expresidente de la Cámara de Representantes Kevin McCarthy y la antigua adversaria de Trump en las primarias, la exgobernadora de Carolina del Sur Nikki Haley, que le suplicaron que se centrara.

“Este es un día un poco diferente, esto no es un mitin”, dijo Trump a su multitud. “Querían hacer un discurso sobre la economía, así que estamos haciendo esto como un discurso intelectual. Todos ustedes son intelectuales hoy”.

Cómo intentará Trump frenar el ímpetu de Harris

Aunque sus frecuentes digresiones desactivaron el impacto de cualquier ataque claro contra Harris, los comentarios de este miércoles de Trump representaron su intento más expansivo hasta ahora para tratar de neutralizar su amenaza. Y es probable que sean rápidamente recogidas por sus impulsores conservadores en los medios de comunicación a medida que se acelera la campaña contra Harris.

- Trump avisó de que pretende rebajar los logros, el intelecto y el carácter de Harris. “No es una persona brillante. No es una persona inteligente. No es muy inteligente, pero es una locura, ¿no? ¿No es una locura? Se le faltó tanto al respeto hace sólo unas semanas, y ahora es como ¡Kamala, Kamala!”, dijo.

- El expresidente también apunta a Harris como una persona de extrema izquierda, de alguna manera ajena a la política de la mayoría de los estadounidenses. “El 6 de noviembre, ella volverá a ser una progresista de San Francisco, destruyendo todo lo que tenga a la vista”, dijo.

- Trump trata de cerrar cualquier intento de Harris de distinguirse de las políticas del Gobierno de Biden. “Kamala ha declarado que atajar la inflación será una prioridad del primer día. Pero el primer día para Kamala fue hace tres años y medio. ¿Por qué no lo hizo?”, dijo. “Por cierto, son un equipo: ella está intentando tirarlo por la borda… no, no, son un equipo”.

- A este esfuerzo se une el intento de culpar directamente a Harris de las dificultades económicas de muchos trabajadores estadounidenses. “¿Alguien aquí se siente más rico bajo Kamala Harris (y) el sucio Joe de lo que era durante el Gobierno Trump? ¿Hay algo menos caro bajo Kamala Harris y el corrupto Joe?”, dijo Trump. Y volviendo a los ataques personales, Trump prometió no “dejar que esta lunática socialista incompetente siga quebrando nuestra economía durante cuatro años más”.

- La campaña argumenta que Harris volverá a sus políticas anteriores después de haber renegado de ellas, por ejemplo, prohibiendo el fracking o buscando un sistema de salud de pagador único. “Por cada posición que la falsa nueva Kamala adopta… la verdadera Kamala decía exactamente lo contrario”, afirmó Trump.

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¿Puede Kamala Harris derrotar a Donald Trump en las elecciones? Un especialista responde
02:18 - Fuente: CNN

- Los republicanos han estado tachando falsamente a Harris de “zar de la frontera” desde que Biden la designó para trabajar en la lucha contra algunas de las condiciones sociales y financieras de los países centroamericanos que son la raíz de la migración. Esta será una pieza central de la nueva apuesta por derribar a la candidata demócrata. “Los migrantes que Harris dejó entrar están violando a nuestras mujeres y lastimando a nuestros niños y ahora Kamala quiere dejarlos saquear el Seguro Social”, afirmó Trump sin fundamento.

El expresidente parecía mucho más interesado en los pasajes del discurso que insultaban a su oponente que en los detalles de su propia política económica. Pero al exponer sus planes de recortes de impuestos, aranceles masivos y recorte de regulaciones, se convirtió en un blanco fácil para la campaña de Harris.

“Trump no tiene plan, ni visión, ni interés significativo en ayudar a construir la clase media”, dijo la campaña en un comunicado. También estableció un contraste de lo que dijo que eran dos agendas económicas “muy diferentes” entre las que los votantes elegirán en noviembre: “Una que construye la clase media, frente a una que ayuda a los multimillonarios y las grandes corporaciones a expensas de las familias trabajadoras”.

Muchos republicanos creen que la consternación de los votantes por los altos precios de los últimos años da a Trump una oportunidad inestimable de recuperar la presidencia. Pero sus payasadas de este miércoles sugieren que es totalmente capaz de desaprovechar la oportunidad.