Nueva York (CNN) – Hay un misterio que empieza a echar raíces en mi vecindario. Es la historia de una persona que desembolsó entre 80 y 100 mil dólares, y puede que incluso más que eso, en un Cybertruck Tesla que está siempre estacionado en la calle, expuesto a los elementos, lejos de una estación de carga, perdiendo valor a cada segundo.
Esa persona —prometo pedirle un comentario si alguna vez nos cruzamos— y miles más en Estados Unidos han optado por invertir su dinero en uno de los productos de consumo más divisivos jamás fabricados. Y como periodista de negocios, no puedo evitar preguntarme qué empuja a la gente a soltar tanto dinero en un coche tan novedoso, de aspecto decididamente extraño y que ha estado plagado de problemas de rendimiento desde el primer día.
Y conducir algo diferente a cualquier otra cosa en la carretera ciertamente dice… algo.
“Es un vehículo que sin duda pretende hacer una declaración”, dijo Jonathan Elfalan, director de pruebas de vehículos de Edmunds. “Casi se puede ser una pseudocelebridad al poseer uno”.
Por supuesto, señala Elfalan, no es uno de los que Edmunds recomienda a la gente que busca, por ejemplo, una camioneta.
Desde que Tesla lanzó el Cybertruck a finales del año pasado, con dos años de retraso y decenas de miles más que el precio de compra prometido originalmente, los propietarios y los críticos profesionales no han tenido reparos en divulgar los defectos del vehículo. Y ni siquiera estoy hablando de su estética futurista de basurero, aunque eso sin duda da a los críticos mucha munición. Me refiero a sus llamadas a revisión crónicas y a las características de diseño que lo convierten en una bestia única con la que encontrarse en la carretera.
He aquí un breve repaso a algunos de los problemas del Cybertruck.
En menos de un año, los vehículos han sido llamados a revisión cuatro veces, dos de las cuales requirieron que fueran llevados a centros de servicio para ser reparados y otras dos fueron simples correcciones de software.
La semana pasada, la revista Car and Driver dijo que el Cybertruck ni siquiera figuraba en su lista de «VE del año» porque el que revisaron se bloqueó en su segundo día de pruebas.
Tesla comercializa el Cybertruck como “a prueba de balas”, pero al menos un propietario descubrió que su vehículo quedó inutilizado durante varias horas después de llevarlo a un autolavado.
Y luego están los videos.
Han circulado múltiples videos virales que muestran a los Cybertruck Tesla empantanándose en todo tipo de situaciones, situaciones de las que quizá una camioneta más típica sería capaz de salir. Pero sea o no culpa de la propia camioneta o de su típico propietario, el ingeniero jefe del Cybertruck de Tesla, Wes Morrill acudió a X para reconocer que “gente real” estaba experimentando problemas, y dijo que estaba considerando añadir un modo de “detección de atascos” al software del vehículo, que “daría a los conductores una sugerencia emergente cuando estuvieran atascados con ideas sobre cómo salir de ello”.
Cuestiones de seguridad sin resolver
Y luego están las especificaciones: el Cybertruck es una caja de acero inoxidable de ángulos agudos y 7.000 libras de peso que puede pasar de 0 a 100 km/h en 2,6 segundos. Como muchas grandes camionetas eléctricas, es el doble del peso de un coche medio en la carretera, y mucho, mucho más rápido. (Como referencia: un Toyota Rav 4 de 2015, como el que yo conduzco, pasa de 0 a 100 km/h en unos 8 segundos).
Y eso plantea un problema de física para cualquiera que pueda tener la desgracia de ser atropellado por un Cybertruck.
“No se me ocurre ningún otro vehículo que parezca tan letal para un peatón como un Cybertruck, sólo por su aspecto y por haber de hecho pasado mi dedo por ese borde”, me dice Elfalan.
Tesla, que rara vez responde las preguntas de los medios de comunicación, no respondió a la solicitud de comentarios de CNN el miércoles. En diciembre, su CEO, Elon Musk, dijo que la empresa estaba “muy segura de que el Cybertruck será mucho más seguro por milla que otros vehículos, tanto para los ocupantes como para los peatones”.
Sin duda, cualquier camioneta pesada y de alto perfil plantea riesgos para peatones y ciclistas, y el Cybertruck ni siquiera es el vehículo más pesado de la carretera. El GMC Hummer EV, por ejemplo, pesa más de 4.000 kg. Las camionetas eléctricas en particular crean un peligro de pesadilla para peatones y ciclistas, dado su peso y potencia.
Pero los bordes afilados y los enormes puntos ciegos del Cybertruck (mitigados por las cámaras) han suscitado preocupación entre los expertos en seguridad desde el principio.
Parte de la razón por la que muchos de los coches nuevos que circulan hoy en día tienen todos un aspecto similar, con bordes redondeados y capós inflados, es porque los fabricantes de automóviles piensan en la seguridad de los peatones, afirma Elfalan.
El diseño del Cybertruck, incluidos sus paneles de acero inoxidable, parece ir en contra de esos avances.
Un conductor publicó un post en un foro de propietarios en mayo, diciendo que sufrió un corte que necesitó puntos de sutura tras golpearse en la pierna con la puerta (“¡Aún me encanta la camioneta!”, escribió).
Los expertos en seguridad también han planteado dudas sobre la aparentemente pequeña “zona de deformación” del vehículo, la sección de un auto diseñada para absorber el impacto de una colisión. En respuesta, Tesla publicó un video en diciembre de una prueba de choque interna, junto con una declaración en X diciendo que “la carrocería inferior delantera del Cybertruck está diseñada para romperse en pequeños pedazos” para ayudar a “reducir el impacto en los ocupantes”.
Pero por ahora, todo lo que tenemos para confiar en las promesas de seguridad es Tesla.
Hasta ahora, ninguna de las dos principales organizaciones que realizan pruebas de seguridad independientes en EE.UU. se ha pronunciado sobre el Cybertruck, y es poco probable que lo hagan a menos que las ventas aumenten significativamente.
No es una sorpresa total. Como explicó recientemente Consumer Reports, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carretera (NHTSA) y el Instituto de Seguros para la Seguridad en Carretera (IIHS), respaldado por la industria, cubren juntos la gran mayoría de los coches nuevos. Pero es poco probable que realicen pruebas de choque en el Cybertruck o en otros vehículos nicho, dados sus limitados recursos.
La NHTSA prueba alrededor del 86% de los vehículos nuevos, “una amplia muestra representativa que ayudará a los consumidores a tomar decisiones de compra sobre los vehículos que mejor se adaptan a sus necesidades”, afirmó en un comunicado. Un portavoz del IIHS dijo que su presupuesto para pruebas de choque es limitado, por lo que se centra en los grandes vendedores.
“Aunque ciertamente ha creado mucha expectativa, es poco probable que invirtiéramos recursos en probarlo a menos que se vendiera en cifras comparables a las de otras pickups grandes populares”, dijo Joe Young, portavoz del IIHS, a Consumer Reports, en una declaración confirmada por CNN.
La diferencia puede ser el punto
Conclusión: Tesla no es un fabricante de automóviles tradicional, y su base de clientes es inusualmente leal.
Elfalan señala que el Cybertruck tiene algunas innovaciones - una dirección fantástica, una cabina espaciosa, una conducción suave - pero el que compró Edmunds sufrió múltiples fallos en el sistema. Eso refleja las raíces de Silicon Valley de Tesla, que se mueve rápido y rompe cosas.
Aunque eso podría llevar al fabricante de coches eléctricos a cometer errores similares a los de los mecánicos caseros tradicionales que trabajan en sus devoradores de gasolina.
“Son una empresa tecnológica que fabrica vehículos, y creo que han hecho muchas cosas innovadoras, pero al moverse rápido… creo que hay descuidos que pueden ocurrir con cosas así, como olvidarse de llenar un coche de refrigerante”.
Y añade: “Pero la base de clientes es tan leal que estas cosas pueden pasar, y sigues amando el vehículo en el que te acabas de gastar US$ 100.000”.