(CNN) –– La familiar sensación otoñal podría tardar mucho en materializarse, ya que el calor de un verano abrasante en Estados Unidos muestra señales de que podría trasladarse a la nueva temporada.
Pero aunque el sabor a calabaza ya está invadiendo el país, la familiar sensación otoñal puede tardar mucho más en materializarse, ya que la calidez de un verano intensamente caluroso en Estados Unidos muestra señales de que podría trasladarse a la nueva temporada, una tendencia más frecuente a medida que el mundo se calienta por la contaminación por combustibles fósiles.
“Cada vez más, la temporada de otoño se considera una extensión del verano”, dijo Jennifer Marlon, científica climática de la Escuela de Medio Ambiente de Yale. “Está calentándose rápidamente”.
Los calentamientos intensos, frecuentes y duraderos probablemente harán que este verano sea el más caluroso registrado en casi 100 ciudades del oeste, sur y este, incluidas Las Vegas, Phoenix y Washington.
Algunos lugares tuvieron una breve muestra del clima otoñal en las últimas semanas, aunque luego las temperaturas abrasadoras de este verano resurgieron con venganza.
Tomemos como ejemplo Filadelfia. La semana pasada, las temperaturas, que rondaron los 20 °C, hicieron que durante algunos días pareciera que estábamos a finales de septiembre. Pero el índice de calor (la combinación de calor y humedad que se percibe en el cuerpo) alcanzará superará los 38 ºC este miércoles.
Decenas de millones de personas estaban bajo alerta de calor para este miércoles con temperaturas potencialmente récord posibles en el este y máximas generalizadas de entre 32 y 38 ºC grados en gran parte del país.
Esta montaña rusa de temperaturas podría ser el tema de la temporada. A pesar de los continuos destellos de frío, parece que el calor se mantendrá durante el otoño en gran parte de EE.UU.
Las temperaturas de otoño podrían no bajar mucho
Técnicamente, el otoño comienza en septiembre, pero las temperaturas más bajas y constantes asociadas con él se extenderán por todo el país hacia la segunda mitad del mes. El problema es que, según los últimos pronósticos, el calor veraniego no va a desaparecer como si nada.
El pronóstico de calor más inusual durante el mes se extiende desde el centro y sur de las Montañas Rocosas hacia el sureste, a través del sur y luego hacia el norte hasta toda la Costa Este.
La zona norte del país tiene la mayor probabilidad de permanecer más cerca de la normalidad, según el Centro de Predicción Climática (CPC).
Las temperaturas superiores a la media se mantendrán durante octubre y noviembre, según el CPC.
El otoño en su totalidad no se parecerá exactamente al verano, incluso con temperaturas medias elevadas. Las temperaturas máximas promedio bajan entre 11 y 13 °C desde mediados de julio hasta mediados de octubre en gran parte de EE.UU.
En Denver, por ejemplo, la temperatura cae desde una máxima normal cercana a los 32 ºC en julio a una temperatura máxima de alrededor de 15 ºC en octubre.
Los huracanes podrían bajar el termómetro
La Costa Este podría obtener un cierto alivio del calor anormal este otoño por la activa temporada de huracanes.
A pesar de algunos períodos de calma, se prevé que la temporada de huracanes en el Atlántico se reanudará pronto. Se pronostica que La Niña se forme durante el otoño y podría intensificar la actividad tropical en el Atlántico. El patrón climático natural caracterizado por temperaturas oceánicas más frías que el promedio en el Océano Pacífico tropical ejerce su mayor influencia en el clima de Estados Unidos en invierno, pero podrían aparecer señales de esto más adelante este otoño.
Los meteorólogos monitorean problemas tropicales que podrían llegar a finales de mes; el pico climatológico de la temporada de huracanes está a menos de dos semanas de distancia; y la parte más activa de la temporada continuará hasta mediados de octubre.
Cualquier tormenta que pase cerca de las costas estadounidenses hasta el final de la temporada de huracanes también podría descargar lluvia y “provocar períodos de temperaturas más frías de lo normal para estas áreas en otoño”, dijo el CPC.
El pronóstico de huracán activo también significa que la Costa Este podría terminar el otoño más húmedo de lo normal.
El otro extremo podría darse en grandes sectores del oeste y centro de Estados Unidos, donde se prevén precipitaciones inferiores a las normales. La falta de las lluvias necesarias podría empeorar las condiciones de sequía en zonas que ya han pasado el verano secándose.