(CNN) – Las gasolineras de muchas zonas de Florida se están quedando sin gasolina mientras los residentes se preparan para el huracán Milton.
La demanda de gasolina aumentó debido a que algunos residentes en la trayectoria de Milton tratan de cargar combustible antes de evacuar. Otros que planean quedarse intentan llenar los tanques de gasolina para poder alimentar sus generadores en caso de que se queden sin electricidad durante largo tiempo.
El servicio de seguimiento de precios de la gasolina GasBuddy informó que hasta el martes por la mañana, el 14,5% de las gasolineras de todo el estado se encontraban sin combustible, un incremento drástico desde solo el 3% del lunes. Con alrededor de 7.500 estaciones en el estado, esa estimación significa que hay alrededor de 1.500 actualmente sin gasolina. Esto se compara con aproximadamente el 17,4% de las estaciones de servicio en todo el estado sin combustible a las 2 p.m. (hora de Miami) de este martes.
La situación era mucho peor en las áreas que enfrentan órdenes de evacuación obligatoria. En Fort Myers, en la costa del Golfo del estado, el 70% de las estaciones estaban sin gasolina el lunes por la noche.
“Es un testimonio de lo rápido que se está moviendo la tormenta y de lo intensa que es”, dijo Patrick De Haan, analista de energía de GasBuddy. “Es un cambio radical”.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, intentó frenar las compras de pánico y los conductores que llenan los tanques, lo que puede empeorar la escasez. DeSantis, en una conferencia de prensa el martes por la mañana, aseguró a los residentes que el estado trabaja para llevar suministros de emergencia de gasolina a las estaciones que se han quedado sin combustible.
Dijo que las reservas del estado incluyen 110.000 galones de gasolina y 268.000 galones de combustible diésel. Y dijo que, si bien esas reservas están disminuyendo debido a la distribución que ya se ha realizado, hay 1,2 millones de galones de ambos combustibles actualmente en camino al estado. DeSantis indicó que 27 camiones de combustible fueron escoltados por la Patrulla de Carreteras de Florida para entregar combustible a las estaciones en el área de impacto anticipado de la tormenta.
“Hemos enviado combustible durante las últimas 24 horas porque las gasolineras se han quedado sin combustible”, dijo en una conferencia de prensa el martes por la mañana. “No hay escasez de combustible. El combustible sigue llegando al estado de Florida. Pero las colas en las gasolineras han sido largas y las gasolineras se están quedando sin combustible más rápido de lo que lo harían de otra manera”.
Los problemas podrían persistir después de que pase Milton
Una vez que pase la tormenta, los problemas para llevar gasolina al estado podrían persistir si hay daños en el puerto de Tampa por el huracán, dijeron los expertos del mercado de la gasolina. Esto se debe a que ese puerto es un punto de entrada clave para gran parte de la gasolina que llega al estado, a través de camiones cisterna o barcazas.
Desde allí, se distribuye al resto del estado por camiones cisterna y por un oleoducto que conduce al área de Orlando. Pero no hay oleoductos que traigan gasolina desde las refinerías de la Costa del Golfo o los estados del norte, ya que el combustible se distribuye por gran parte del resto del país.
“El puerto de Tampa es fundamental para el suministro de gran parte del estado”, dijo Tom Kloza, jefe global de análisis de energía de OPIS, que rastrea los precios de la gasolina para AAA. “Es una de las piezas más cruciales de la infraestructura de combustible del país. Me resultaría difícil encontrar un mercado que dependa más del suministro por vía marítima y que sea más susceptible a huracanes y marejadas ciclónicas”.
El puerto ha estado cerrado debido a la tormenta, aunque DeSantis dijo que actualmente tiene combustible en sus terminales de gasolina y continúa operando antes de la tormenta. Podría llevar un tiempo volver a abrirse a los petroleros y barcazas una vez que pase la tormenta, dijo Andy Lipow, analista de petróleo de Lipow Oil Associates.
“No volverán hasta que haya pasado la tormenta y la Guardia Costera verifique si hay escombros hundidos en el canal y vuelva a colocar las boyas de navegación”, explicó.
Y el verdadero temor es que el huracán y la marejada ciclónica puedan causar daños significativos al puerto.
“Estamos asumiendo, no significa que vaya a suceder, pero estamos asumiendo que habrá daños significativos en el Puerto de Tampa, por lo que estamos operando como si fuera a haber una interrupción significativa en su capacidad para recibir combustible”, dijo DeSantis. Indicó que los funcionarios estatales trabajan para hacer otros arreglos para llevar combustible al estado.