La presidenta de Perú, Dina Boluarte, dijo el jueves que lamentaba que dos casos “vinculados a su entorno personal” sean los temas que “marquen la agenda de un país”. En un mensaje a la nación y acompañada de su gabinete, la mandataria señaló que estos casos son “utilizados como escenarios políticos donde se pretende la desestabilización del orden democrático y el planteamiento de una nueva vacancia presidencial”.
La mandataria dijo que es respetuosa del sistema judicial, pero que “hace bastante tiempo, sistemáticamente, he sido objeto de un acoso permanente con el único propósito de generar crisis en el Gobierno y, como consecuencia de ello, generar intentos fallidos de vacancia”.
La cirugía
Uno de los temas a lo que Boluarte se refirió fue la cirugía a la que, reconoció el jueves, se sometió en 2023. Sin embargo, negó que se tratara de una intervención estética y dijo que se pretende “criminalizarla” para “desestabilizar” su gestión. “Es penoso advertir como esos escenarios hipotéticos y leyendas mediáticas son acogidas por el Ministerio Público para crear historietas para sus carpetas fiscales generando gastos al estado atentando nuevamente contra la estabilidad jurídica”, dijo Boluarte.
A inicios de diciembre, la Fiscalía de la Nación dio a conocer una investigación preliminar contra la mandataria por los presuntos delitos de “omisión de actos funcionales” o abandono del cargo. la Fiscalía cita como razones el que Boluarte no comunicara al congreso el impedimento temporal para ejercer como consecuencia de la operación.
La presidenta no hizo mención en su mensaje de si comunicó o no al Parlamento sobre su operación. En el Congreso, la parlamentaria Ruth Luque ya había presentado una denuncia constitucional por supuesta infracción a la constitución.
Boluarte aseguró que se trató de una intervención “necesaria e imprescindible para mi salud. La necesitaba por funcionalidad respiratoria” y que no le generó “ningún tipo de incapacidad para ejercer mis funciones como presidenta constitucional de la república porque el acto médico no me lo impidió”.
Boluarte señaló que renunciará a su derecho a la confidencialidad médica para probarlo.
El cofre
El segundo tema al que la presidenta se refirió es “el cofre”, nombre con el que se le conoce al vehículo presidencial. El caso fue denunciado meses atrás por la prensa local, tras lo cual ministerio público abrió otra investigación a la que, dijo la mandataria, aún no ha sido citada para declarar.
El caso se refiere al supuesto uso del vehículo presidencial para la fuga de Vladímir Cerrón, presidente de Perú Libre, partido que llevó a la Presidencia a Pedro Castillo. Boluarte ya no forma parte de la agrupación.
Cerrón enfrenta varios procesos judiciales, entre ellos una condena por colusión dada en octubre de 2023 por el poder judicial. Desde entonces, Cerrón se encuentra en la clandestinidad, aunque no ha dejado de afirmar que es inocente y de opinar sobre diversos temas políticos en redes sociales.
Este viernes la Fiscalía realiza una diligencia sobre el supuesto recorrido del auto presidencial en febrero de 2024 a un condominio en una playa en el sur de Lima. En su momento, la policía buscó allí a Cerrón. En su discurso, la presidenta aceptó haberse trasladado hacia el sur, pero negó que haya sido al condominio en el que se centran las investigaciones.
Boluarte exigió ser citada para dar su versión sobre esta investigación y le dijo a la fiscal de la nación, Delia Espinoza, “llámame y declararé. Siempre lo hice y lo seguiré haciendo públicamente, se lo pido, se lo exijo, en aras del debido proceso y la presunción de inocencia”, señaló, refiriéndose a las veces que acudió a la Fiscalía por otros casos por los que la presidenta es investigado, como el conocido como Rolex. “Yo no oculto a delincuentes ni uso los bienes estatales para encubrir personas buscadas por la justicia”, dijo Boluarte.