El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, firmó este martes un decreto ejecutivo en el que encarga la presidencia del 9 al 12 de enero a Cynthia Gellibert, a quien designó vicepresidenta encargada el fin de semana, en medio de cuestionamientos jurídicos por su nombramiento y un tenso escenario político debido a su confrontación con la vicepresidenta Verónica Abad, quien defiende la legitimidad de su cargo.
En el decreto, Noboa atribuye a una circunstancia de “fuerza mayor” su decisión de encargar la presidencia a Gellibert y desglosa una serie de interpretaciones legales sobre la licencia para hacer campaña electoral, considerando que el mandatario es candidato nuevamente.
Sobre la advertencia del Consejo Nacional Electoral (CNE) que recordó el lunes la prohibición legal para los servidores públicos en funciones de inducir el voto a favor de una determinada opción y el uso de recursos públicos para dichos fines, Noboa indica en el decreto que su intención es separar sus actividades como presidente y como candidato, aunque no solicita licencia formal a la Asamblea Nacional para hacer campaña electoral, pese a que varios sectores políticos y expertos en materia jurídica han insistido en que Noboa debe tomar licencia hasta el 6 de febrero.
“Resulta necesario que, para garantizar los principios de transparencia, equidad y seguridad jurídica, así como cumplir con un uso adecuado de los recursos públicos; de forma voluntaria, se separen y diferencien los periodos en los que el presidente de la República ejerce sus funciones como tal, y los momentos en los que se ausenta temporalmente del cargo para realizar actividades proselitistas”, detalla el decreto presidencial.
Además, señala que este encargo presidencial temporal a Gellibert pretende evitar posibles sanciones electorales.
“Siendo, por tanto, imprevisible e irresistible que el ejercicio de las funciones y atribuciones del presidente de la República, en cualquier evento público, se confunda con un acto proselitista y dé paso a denuncias por una infracción electoral; circunstancia de fuerza mayor que impide ejercer las funciones de presidente de la República”, puntualiza el decreto.
Inmediatamente después de la publicación del decreto, varios juristas cuestionaron el encargo de la presidencia a Gellibert, quien además fue designada vicepresidenta encargada por decreto hasta que Verónica Abad se presente en la Embajada de Ecuador en Turquía, como ordenó Noboa.
“Tenemos presidenta de la República por decreto, no por elecciones. Vivimos tiempos de plastilina jurídica”, precisó el penalista Pablo Encalada.
El constitucionalista Gonzalo Muñoz calificó el encargo de “otra charlotada jurídica”.
“Otro acto inconstitucional pues, no se ha configura ninguna causal de fuerza mayor ni tampoco licencia ante la asamblea al tenor del Art. 146. Llama la atención la fanesca generada en los considerandos. Espantoso”, puntualizó.
Mientras que el constitucionalista André Benavides considera que el presidente Noboa “está mal asesorado”.
“La señora Gellibert está presuntamente usurpando funciones constitucionales que le corresponden a la señora Abad”, advirtió.
Sin embargo, para el constitucionalista Rafael Oyarte, el presidente Noboa no requiere solicitar licencia para hacer campana. Considera que al ser una elección que devino de un adelanto de elecciones para completer el periodo que le faltó al expresidente Guillermo Lasso, Noboa no está obligado a hacerlo pues no se trata de una “reelección para el mismo cargo”.
“Si hay un fallo (de la Corte Constitucional), guste o desagrade, indica que las elecciones que devienen de “muerte cruzada” no son, para todos los efectos, una reelección, es incomprensible los problemas en los que se mete el presidente Noboa: puede hacer campaña sin licencia”, sostiene Oyarte. Sin embargo, el constitucionalista concuerda en que el encargo de la Presidencia en caso de ausencia temporal de Noboa le corresponde a Abad.
La vocal del CNE Elena Nájera, en entrevista con el medio local Teleamazonas, señaló este martes que el encargo a Gellibert no es correcto porque “el poder popular no puede ser reemplazado por un decreto ejecutivo” y enfatizó que todo funcionario que opte por el mismo cargo en una elección debe pedir licencia.
“Está mal. Tenemos una vicepresidenta elegida en las urnas”, precisó.
CNN pidió comentarios al equipo de Abad y está a la espera de una respuesta.
Abad anunció el sábado que pretendía asumir el domingo la Presidencia, día del inicio de la campaña electoral en Ecuador, sin explicar cómo y de qué manera lo haría. Pocas horas después, las Fuerzas Armadas y la Policía emitieron comunicados de respaldo a Noboa, enfatizando no son instituciones deliberantes y que por tanto Abad no podía contar con su apoyo.