En la vigilia de la toma de posesión de Trump como presidente de Estados Unidos, el papa Francisco estuvo en el programa de la televisión italiana “Che tempo che fa”. Participó en directo respondiendo las preguntas desde el Vaticano, donde el hilo conductor fue la autobiografía del pontífice “Esperanza” que se acaba de publicar.
Durante la entrevista le preguntaron qué piensa sobre el plan de Trump para controlar la migración ilegal. Francisco respondió que es “una desgracia hacer pagar la cuenta a los desgraciados que no tienen nada. Así no. Así no se resuelven las cosas”.
Instantes antes, el pontífice había insistido en la opción de acoger a los migrantes, especialmente en aquellos países cuya media de edad es alta. Citó el caso de España e Italia, y dijo “si no nacen niños hay que dejar entrar a los migrantes”.
En la entrevista también se habló de otros temas como el papel de la mujer en la Iglesia. Francisco recordó que durante su pontificado ha colocado a más mujeres en puestos de responsabilidad; por ejemplo, en el departamento encargado de proponer nuevos obispos al papa. “Las mujeres saben gestionar las cosas mejor que nosotros”, señaló, poniendo de ejemplo a Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, quien, recordó, tiene siete hijos.
También hablaron del Jubileo, el evento espiritual que espera traer a Roma a millones de peregrinos para conseguir el perdón absoluto de los pecados. En ese sentido, el papa insistió en que “Dios perdona siempre” y lanzó una reflexión sobre qué pecados son más graves que otros. Como ejemplo dijo que es peor abandonar a los propios padres —cuando son ancianos— que los pecados “de la carne”.