Por James O’Toole, CNNMoney
(CNNMoney) — Prepárate para los drones (aviones no tripulados) de Google.
La empresa de tecnología anunció este lunes que adquirió Titan Aerospace, un emprendimiento fundado en 2012 que fabrica drones de gran altitud e impulsados con energía solar.
La compra es parte del nuevo impulso en Silicon Valley para encontrar formas de ofrecer servicio de internet a áreas marginadas, particularmente en el mundo en desarrollo.
“Titan Aerospace y Google comparten un optimismo profundo sobre el potencial de la tecnología para mejorar el mundo”, dijo Google. “Todavía está en sus primera etapa, pero los satélites atmosféricos podrían ayudar a llevar acceso de internet a millones de personas, y ayudar a resolver otros problemas, incluido el socorro en desastres y daño ambiental como deforestación”.
El equipo Titan operará separadamente de Google, pero colaborará con divisiones incluidas Google Maps y Project Loon, que trabaja en ofrecer servicio de internet desde globos de gran altitud.
Los términos del contrato no fueron revelados.
Titan promociona una variedad de aplicaciones para sus drones, incluidos proporcionar datos, monitoreo de cultivos, y ayuda de búsqueda y rescate. Los vehículos pueden permanecer en el aire hasta durante cinco años sin tener que aterrizar o volver a cargar combustible, lo que los hace una posibilidad intrigante para emitir servicio de internet.
Titan mostró sus drones en vuelos de prueba, aunque todavía no están comercialmente disponibles.
La compra marca la reserva más reciente en la guerra fría tecnológica entre Google y Facebook.
Facebook también analizó comprar Titan en algún punto, según varios reportes. La empresa contrató recientemente a varios miembros clave del personal del fabricante británico de drones, Ascenta, para unirse a su “Laboratorio de Conectividad”, que experimenta con ofrecer internet por medio de tecnología experimental, incluidos drones, satélites y láseres.
Facebook y Google han hecho varias apuestas recientes en las tecnologías emergentes, apuntando a permanecer ágiles una vez que sus negocios actuales se rompan.
Facebook impactó a principios de este año con su compra de 19,000 millones de dólares del servicio de mensajería móvil WhatsApp, y compró a la empresa de realidad virtual Oculus VR el mes pasado por 2,000 millones de dólares.
En cambio Google invirtió miles de millones de dólares en automóviles que se conducen solos, gadgets portátiles, robots militares y; más recientemente a través de su compra de Nest, dispositivos conectados para el hogar como detectores de humo y termostatos.