(CNN) – La asistente de la Casa Blanca Kelly Sadler tuvo una respuesta bastante inusual ante la oposición que ha manifestado el senador John McCain sobre la persona escogida por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para dirigir la CIA. En la mañana de este jueves, Sadler dijo que el legislador “se está muriendo de todos modos”, según le señaló a CNN un funcionario de la Casa Blanca.
La fuente aclaró que Sadler, quien está a cargo de las comunicaciones de los asesores, lo dijo en tono de broma, “pero no tuvo éxito”. El año pasado, McCain anunció que fue diagnosticado con cáncer cerebral.
Este miércoles, el senador emitió un comunicado pidiendo a sus compañeros del Congreso que se opusieran al nombramiento de Gina Haspel, quien fue propuesta por Trump para ser directora de la CIA. Los vínculos de Haspel con el uso de métodos de interrogación ampliamente considerados de tortura han despertado fuertes críticas.
Cuando se le preguntó por el comentario de Sadler, un funcionario de la Casa Blanca dijo: “Respetamos el servicio del senador McCain para nuestra nación, y él y su familia están en nuestras oraciones durante este momento difícil”.
Sadler llamó este jueves a la hija del senador, Meghan McCain, para disculparse por el comentario, según le indicó a CNN una fuente cercana a la situación, aunque no está claro cuál fue la respuesta que recibió.
El diario The Hill reportó inicialmente el comentario de Sadler.
McCain se refirió a Haspel como una “patriota” en su declaración de este miércoles, pero también mencionó su historial y el testimonio que dio ante la Comisión de Inteligencia del Senado para implorarles a sus compañeros que rechacen la nominación.
“El papel de la señora Haspel en la supervisión del uso de la tortura por parte de los estadounidenses es inquietante”, señaló la declaración de McCain. “Su negativa a reconocer la inmoralidad de la tortura la descalifica. Creo que el Senado debe ejercer su tarea de consejo y consentimiento y rechazar esta nominación”, completó.
Por su parte, Haspel dijo en un comunicado en la noche de este jueves que tiene el “mayor respeto” por McCain. “Siento un gran respeto por el senador McCain y aprecio el cuidado con el que se ha acercado a este proceso de nominación”, indicó.
El senador republicano por Carolina del Sur Lindsey Graham, un amigo cercano de John McCain, señaló frente al comentario de la asistente de la Casa Blanca: “Señorita Sadler, le recuerdo que John McCain tiene muchos amigos en el Senado de Estados Unidos en ambos lados del pasillo. Nadie se está riendo en el Senado”.
Las palabras de Sadler sobre McCain hicieron eco de la observación que pronunció Trump al comienzo de su campaña presidencial, cuando se burló del tiempo que pasó McCain como prisionero de guerra: “Me gustan las personas que no fueron capturadas”, dijo.
La división entre los dos surgió nuevamente el verano pasado, cuando McCain viajó a Washington mientras el Senado consideraba la derogación del Obamacare y ofreció su voto para ayudar a hundir el esfuerzo.
Sophie Tatum, Kevin Liptak, Jim Sciutto, Katilan Collins y Dana Bash contribuyeron a este informe.