(CNN Español) – Año tras año, el metro de la Ciudad de México ha recibido menor presupuesto para su operación mientras en los últimos dos años se han registrado diversos incidentes o accidentes, en algunos casos fatales.
Según registros gubernamentales, en este año, el Sistema Colectivo de Transporte, el organismo que opera el metro de la capital mexicana, tiene un presupuesto equivalente a US$ 745 millones, el menor monto desde 2015, de acuerdo con informes del organismo, lo que representa una variación real negativa de 15%, es decir, descontando los efectos de la inflación.
Incluso en 2020, el presupuesto aprobado por el Congreso local fue modificado a la baja por la administración local a un monto de US$ 736 millones (14.878 millones de pesos mexicanos), según el reporte de la Cuenta Pública que elabora el gobierno federal.
Para algunos expertos el menor presupuesto está ligado en parte a que en los dos últimos años, el metro ha registrado un choque de dos trenes en el que murió una persona y 41 resultaron lesionadas, el incendio de una subestación eléctrica en el que una persona falleció, y la caída de un paso elevado por el que pasaba un tren, lo que mató a 25 personas y lesionó a 79.
La tendencia de los datos muestra que el metro “opera en un entorno de escasez”, dijo Carlos Brown Solà, maestro en Economía e integrante de Sur Institute, quien agrega que “un peso no invertido hoy puede representar 1,5 pesos mañana… cualquier retraso que se haga al mantenimiento de infraestructura va a tener consecuencias en el futuro, pero además a un costo más alto”.
Pero después del desastre en la Línea 12, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum dijo que “no ha habido ninguna reducción del presupuesto (del metro) ni subejercicio”.
Caso histórico
Lo que es un hecho, es que en los últimos tres años, el presupuesto del metro ha rondado en los mismos niveles nominales, y si se descuenta la inflación ha caído.
La situación se complicó en 2020, cuando la pandemia de covid-19 frenó la movilidad de la gente. Los ingresos del metro cayeron 32% con respecto a 2019, lo que propició que la federación otorgara recursos adicionales.
El mayor costo del metro es el pago a sus trabajadores, seguido de los servicios generales que incluyen el mantenimiento, según se puede ver en los documentos de Consulta Pública.
Ante las carencias, desde 2013 el metro busca formas para aumentar sus ingresos. Ese año elevó el precio del boleto de US$ 0,14 (3 pesos mexicanos) a US$ 0,24 (5 pesos mexicanos), el aumento de 66% se destinaría a un fondo especial, Fideicomiso Maestro del Metro, pero la autoridad encontró diversas irregularidades en su administración, según revelan los informes de auditorías gubernamentales.
El gobierno de la Ciudad de México tiene la oportunidad de aumentar sus ingresos para el metro al eliminar la condonación de la Tenencia Vehicular para las unidades con un precio menor a US$ 125.714 (250.000 pesos mexicanos) además de que este año otorgó un descuento del 100% en el pago de los derechos lo que puede proporcionar recursos “que vengan del automóvil privado para financiar los sistemas masivos de transporte”, sugirió Brown.