(CNN) – ¿Viste los tuits de Nicki Minaj sobre por qué no se vacunará contra el covid-19? Hablemos de ellos.
El lunes, Minaj dijo que su primo en Trinidad, de donde es la superestrella, “no se vacunará porque su amigo se la puso y se volvió impotente. Sus testículos se hincharon”.
No existe un vínculo entre las vacunas contra el covid-19 y la infertilidad, como explicaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, los CDC, en agosto.
Este miedo infundado no es nuevo, dijo a CNN la experta en vacunas y pediatra Dra. Yvonne Maldonado, jefa de la División de Enfermedades Infecciosas Pediátricas de la Facultad de Medicina, de la Universidad de Stanford, a principios de este año.
“Dios mío, la gente ha estado diciendo esto sobre todas las vacunas desde que tengo uso de razón”, dijo Maldonado, quien también preside el Comité de Enfermedades Infecciosas de la Academia Estadounidense de Pediatría. “No hay evidencia de que esta vacuna afecte el desarrollo o la fertilidad”.
Minaj también sugirió que no está vacunada, diciendo que está esperando hasta que sienta que “ha investigado lo suficiente”.
El corresponsal médico jefe de CNN, el Dr. Sanjay Gupta, desacreditó la afirmación de la rapera en “New Day”.
“El Journal of the Medical Association analizó específicamente los problemas de fertilidad y no encontró problemas de fertilidad”, dijo. “Aprecio que quiera hacer la investigación. [La información] Está ahí. Le deseo lo mejor al amigo de su primo, pero eso no está relacionado con la vacuna”.
Los límites de la influencia de las celebridades
Puede ser fácil, de alguna manera, preocuparse, preguntarse: ¿Podrían los tuits de Minaj empeorar un problema grave? Después de todo, en todo el país y en todos los aspectos demográficos, las dudas sobre las vacunas y el rechazo total a las vacunas siguen siendo un problema.
Sin embargo, esa línea de pensamiento se siente un poco precipitada y tal vez incluso malinterpreta la dinámica más amplia de la influencia de las celebridades en la política.
Minaj no es la única celebridad cuyo dominio ha sido objeto de escrutinio, y ciertamente no será la última.
Según Mark Harvey, autor del libro de 2018, “Celebrity Influence: Politics, Persuasion and Issue-Based Advocacy”, generalmente hay dos tipos de poder de las celebridades: “la capacidad de ‘destacar’ los problemas en los medios y de persuadir audiencias”.
Fundamentalmente, las celebridades no son persuasivas todo el tiempo sobre todos los temas. Su influencia se complica por una variedad de factores, como su experiencia, sus afiliaciones con grupos de defensa y su conexión con el tema (piensa en Ellen DeGeneres o Billy Porter sobre los derechos LGBTQ).
Pero Harvey argumenta que lo que estamos viendo con la pandemia de coronavirus, y específicamente con las vacunas covid-19, es completamente diferente.
“La pregunta es ¿qué sucede cuando una celebridad está tratando de persuadir sobre un tema polémico, sobre algo en lo que la gente está tan dividida que no van a cambiar de opinión, sobre cuestiones como el control de armas y el aborto? Creo estamos teniendo un momento como ese”, dijo Harvey a CNN, y agregó que la división cultural es mucho mayor hoy que en la década de 1950, cuando Elvis Presley pudo recibir una vacuna contra la polio en “The Ed Sullivan Show” y convencer a los adolescentes escépticos de que se vacunaran.
“Hoy en día, Nicki Minaj dice algo sobre ciertos temas, y probablemente no va a mover la aguja en absoluto”, dijo Harvey. “Básicamente, la gente de la derecha va a decir: ‘Miren, Nicki Minaj. Ella es genial’. Y la gente de la izquierda puede decir: ‘Ella es una mala influencia’. Y ese es probablemente el final”.
Esto no sugiere que la gente esté equivocada por estar irritada por los tuits de Minaj. Al no apoyar de lleno el tesoro de datos que demuestran la seguridad y eficacia de las vacunas contra el covid-19, la rapera y cantante puede haber ayudado a enturbiar las aguas en un momento en que la claridad es urgente.
La lucha contra el covid-19 en EE.UU.
Los negros y los latinos se han enfermado y han sido hospitalizados desproporcionadamente más por covid-19 en Estados Unidos, y una nueva investigación de la Universidad Johns Hopkins revela que, en la mayoría de los estados, ambos grupos representan una proporción menor de vacunas que de casos.
A medida que el covid-19 se convierte cada vez más en la pandemia de los no vacunados, los líderes comunitarios y los defensores de la salud están pidiendo a los estadounidenses que se vacunen para evitar una mayor devastación en poblaciones ya vulnerables. Lanzaron campañas, planearon y promovieron más clínicas de vacunas e incluso se asociaron con peluquerías y barberías con la esperanza de llegar a más personas que siguen siendo escépticas.
Algunos líderes y médicos dicen que están luchando por disipar los mitos y la desinformación sobre la vacuna que continúa propagándose en la comunidad negra.
La Dra. Jayne Morgan, directora ejecutiva de Covid Task Force en Piedmont Healthcare Corporation, en Atlanta, dijo que Minaj era “científicamente irresponsable” en sus tuits y que sería más productivo para Minaj compartir información de los médicos.
“[Sus comentarios] hacen que nuestro trabajo sea mucho más difícil si tenemos que seguir luchando contra la desinformación”, dijo Morgan a CNN.
Por supuesto, el problema es mucho más grande que Minaj. Joe Rogan, Rob Schneider, Chet Hanks: muchas celebridades han criticado las vacunas contra el covid-19 o se han comprometido con teorías de conspiración descabelladas.
El trabajo continúa.
Nicquel Terry Ellis, de CNN, contribuyó a este informe.