(CNN) – Se espera que la jueza designada a la Corte Suprema, Ketanji Brown Jackson, sea confirmada esta semana, luego de enfrentar una votación el lunes en un panel del Senado para avanzar en su confirmación.
Se espera que la Comisión Judicial del Senado vote sobre las líneas del partido, 11-11, salvo circunstancias imprevistas, pero hay formas en las que el panel o los demócratas del Senado en el poder aún pueden someter su nombramiento a un voto de confirmación en los días por venir. Si se confirma, Jackson será la primera mujer negra en ser jueza de la Corte Suprema.
Los líderes republicanos y demócratas del Senado están de acuerdo en que Jackson es una candidata bien calificada. Jackson, de 51 años, forma parte de la corte federal de apelaciones de Washington y había sido considerado la principal candidata para la vacante desde que el juez Stephen Breyer anunció su retiro. Jackson trabajó anteriormente como secretaria de Breyer, fue defensora pública federal, abogada en la práctica privada, jueza de un tribunal de distrito federal y miembro de la Comisión de Sentencias de EE.UU.
“Claridad e imparcialidad, así es la jueza Jackson”, dijo la semana pasada el senador demócrata de Illinois, iDick Durbin, presidente de la Comisión Judicial. “Ella deja de lado sus puntos de vista personales, evalúa los hechos, escucha los argumentos, luego interpreta y aplica la ley, teniendo en cuenta los límites de la autoridad judicial”.
“Ella es la mejor y merece nuestro apoyo”, agregó.
Republicanos no apoyarían a Jackson
La gran mayoría de los republicanos del Senado se opondrán a Jackson. Hasta ahora, la senadora de Maine, Susan Collins, es la única republicana que ha dicho que apoyaría a Jackson.
La senadora de Carolina del Sur, Lindsey Graham, quien apoyó a Jackson hace un año en su trabajo actual, dijo la semana pasada que se opondría a ella, citando su sentencia por casos de pornografía infantil y representación de detenidos en la Bahía de Guantánamo.
Graham, miembro de la Comisión Judicial, dijo que aunque Jackson exhibe un “carácter excepcionalmente bueno”, fue demasiado indulgente al sentenciar esos casos y tuvo un “fervor activista” al llamar al expresidente George W. Bush y al exsecretario de Defensa Donald Rumsfeld criminales de guerra en escritos legales mientras defendía a un detenido.
“Mi decisión se basa en su historial de activismo judicial, metodología de sentencia defectuosa con respecto a casos de pornografía infantil y la creencia de que la jueza Jackson no se dejará disuadir por el significado simple de la ley cuando se trata de causas liberales”, dijo Graham.
Una revisión en profundidad de CNN de los casos de pornografía infantil mostró que Jackson había seguido en su mayoría prácticas judiciales comunes de sentencia. Se ha convertido en una norma entre los jueces dictar sentencias por debajo de las pautas en casos que no involucran la producción de pornografía en sí. En cuanto a su defensa de los detenidos de Guantánamo, Jackson argumentó que habían sido torturados y sometidos a otros tratos inhumanos, pero no usó explícitamente la frase “criminal de guerra”. Los cuatro clientes detenidos de Jackson no fueron condenados y finalmente fueron liberados de Guantánamo.
Durbin refutó a Graham en ambos temas en el pleno del Senado, la semana pasada, llamando a Jackson “en la corriente principal de sentencias” de casos de pornografía infantil y diciendo que los republicanos también votaron por los jueces del presidente Donald Trump que “hacen exactamente lo mismo que ella”. Dijo que era una “gran exageración e injusto a primera vista” decir que Jackson había llamado a los funcionarios de la administración Bush “criminales de guerra”.
División en el Senado
Es raro que la Comisión Judicial del Senado empate en una postulación a la Corte Suprema. Pero las batallas por la designación se han vuelto cada vez más polémicas, y el Senado actual está dividido 50-50, por lo que hay un número par de demócratas y republicanos en el panel, en lugar de que el partido mayoritario tenga más escaños.
Durante las últimas cinco décadas, el panel llegó a un punto muerto una vez: sobre Clarence Thomas, quien enfrentaba acusaciones de acoso sexual. Trece jueces: William Rehnquist, John Paul Stevens, Sandra Day O’Connor, Antonin Scalia, Anthony Kennedy, David Souter, Ruth Bader Ginsburg, Stephen Breyer, John Roberts, Samuel Alito, Sonia Sotomayor, Elena Kagan, Neil Gorsuch y Brett Kavanaugh, pasaron la aprobación de la Comisión.
En 1987, los demócratas que controlaban la Comisión votaron a favor de recomendar desfavorablemente al candidato del presidente Ronald Reagan, Robert Bork, por motivos ideológicos. Y en 2020, los demócratas boicotearon una votación de la Comisión sobre Amy Coney Barrett, argumentando que la Cámara no debería considerar el nombramiento vitalicio del presidente Donald Trump en la Corte mientras el país votaba en las elecciones presidenciales.
En la era Trump, los republicanos del Senado fortalecieron el control de los conservadores en la corte de 5-4 a 6-3, luego de retrasar al candidato del presidente Barack Obama, Merrick Garland, durante otro año electoral, 2016, y luego confirmar a Gorsuch, en 2017. y Coney Barrett, en 2020, para reemplazar a la difunta Ginsburg. La confirmación de Jackson probablemente reemplazaría a un liberal, Breyer, con otro.
“Creo que todo indica que la jueza Jackson va a ser un activista liberal desde el estrado”, dijo el líder del Partido Republicano en el Senado, Mitch McConnell, en Fox, la semana pasada. “Pero la buena noticia para la gente como yo es que la Corte sigue 6-3”.
“Hicimos cambios masivos en los últimos cuatro años que creo que pusieron a la Corte en una posición muy sólida con una gran cantidad de jueces que creen en la noción pintoresca de que tal vez un juez debería seguir la ley”, agregó.
– Tierney Sneed y Daniel Dale, de CNN, contribuyeron a este informe.