(CNN) — El Hospital Carilion Franklin Memorial en Rocky Mount, Virginia, está lleno: atiende su cuota de casos de covid-19 y problemas más comunes en esta época del año, como los accidentes de barcos. Pero sus profesionales también tratan a pacientes enfermos por algo engañosamente peligroso: el calor extremo.
Las altas temperaturas en el área están alrededor de los 32 grados Celsius esta semana, pero si se tiene en cuenta la humedad, el calor sube hasta los 40 grados Celsius.
“Hemos tenido personas que llegaron aquí hoy después de cortar el césped”, señaló este martes la Dra. Stephanie Lareau, médica de emergencias. “Afortunadamente, las prácticas de deportes todavía no han comenzado, por lo que no hemos recibido mucha población joven. Vemos muchos casos relacionados con el calor extremo cuando comienzan las prácticas de fútbol americano”, añadió.
De todos los desastres naturales, el calor cobra la mayor cantidad de vidas, según revelan estudios. Y a medida que las temperaturas siguen aumentando por la crisis climática, los científicos anticipan que puede afectar a más personas.
Es más, las olas de calor ya ocurren con mayor frecuencia. En la década de 1960, los estadounidenses sufrían unas dos olas de calor al año, mientras que en la década de 2010 la cifra subió a seis por año, según la Agencia de Protección Ambiental de EE.UU.
Las enfermedades relacionadas con el calor son la principal causa de muerte y discapacidad entre los atletas de secundaria en EE.UU., indican los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Pero el calor también puede representar un problema para las actividades cotidianas de cualquier persona como cortar el césped o salir a caminar.
El Servicio Nacional de Meteorología emitió avisos de calor extremo esta semana para una parte del país que va desde la zona alta del Medio Oeste hasta el sureste. Desde Dayton hasta Durham, los profesionales médicos han pedido a los habitantes permanecer en lugares interiores tanto como sea posible. Una recomendación difícil de seguir por el hecho de que medio millón de clientes no tenía electricidad este martes debido a las fuertes tormentas, indicó PowerOutage.US.
El calor ha obligado al cierre de escuelas en Minnesota y Milwaukee, así como a cancelar las carreras de caballos en Kentucky e Indiana. Incluso, UC Davis interrumpió su graduación después de que decenas de asistentes buscaran atención médica debido a la exposición al calor.
¿Qué produce el calor extremo en el cuerpo?
Dos de las condiciones más comunes relacionadas al calor son el golpe de calor y el agotamiento por calor.
Con un golpe de calor, el cuerpo no puede enfriarse por sí mismo. Su temperatura aumenta rápidamente y el mecanismo de enfriamiento natural, el sudor, falla. La temperatura de una persona puede subir a unos peligrosos 41 grados Celsius o más en solo 10 o 15 minutos. Esto puede conducir a la discapacidad o incluso a la muerte.
Una persona que sufre un golpe de calor puede sudar profusamente o no sudar. Puede confundirse o desmayarse, e incluso tener una convulsión.
El agotamiento por calor ocurre cuando el cuerpo pierde demasiada agua o sal a través de la sudoración excesiva. Esa condición puede presentar síntomas como náuseas, mareos, irritabilidad, sed, dolor de cabeza y temperatura corporal elevada.
Para las dos condiciones se necesita ayuda de emergencia rápidamente. Mientras esa asistencia llega, se puede tratar de refrescar a la persona llevándola a la sombra y dándole agua.
Las temperaturas extremadamente altas también pueden ejercer una presión significativa sobre el corazón o dificultar la respiración.
El calor puede vincularse con al menos 17 causas de muerte, la mayoría de ellas relacionadas a problemas cardíacos y respiratorios. Pero, también incluyen suicidio, ahogamiento y homicidio.
Además, algunas investigaciones han demostrado que la exposición al calor extremo puede contribuir a problemas de salud mental, problemas para las mujeres embarazadas y resultados perjudiciales en el parto.
¿Quiénes son los más vulnerables?
Los ancianos, los niños, las personas con enfermedades crónicas y aquellos con problemas de salud mental corren el mayor riesgo de sufrir condiciones relacionadas al calor extremo, además de quienes tomas ciertos medicamentos, señalan los CDC.
Sin embargo, las personas jóvenes y sanas no son inmunes, advirtió el Dr. Aaron Bernstein, director interino del Centro para el Clima, la Salud y el Medio Ambiente Global de la Facultad de Salud Pública T.H. Chan de la Universidad de Harvard.
Bernstein realizó un estudio, publicado en enero, en el que encontró que la exposición al calor en todo el país ha llevado a que aumente la cantidad de niños que terminan en las salas de emergencias por cualquier motivo durante el verano.
Y estos ingresos no solo ocurrieron en los días más calurosos: estuvieron en un rango de días con temperaturas cálidas.
Pero no acaba ahí: un niño que nace ahora en Estados Unidos experimentará 35 veces más eventos de calor potencialmente mortales que alguien que nació en 1961, de acuerdo al estudio de Bernstein. Y eso en el mejor de los casos, si las temperaturas mundiales aumentan solo 1,5 grados centígrados en las próximas dos décadas. “Algo que que no estamos logrando”, apuntó Bernstein, “este es el escenario más conservador proyectado”.
“Es un gran cambio en solo 60 años”, agregó sobre su hallazgo. “Eso, para mí, es un gran problema”.
El calor extremo no mata a tantos niños como a personas mayores. Pero estos “shocks climáticos”, como los llama Bernstein, pueden sumar estrés a la vida de un niño. Y eso tiene un efecto acumulativo, de manera que puede resultar tan dañino como la pobreza o cualquier otro factor estresante, explicó. Esto, a su vez, contribuye a tasas significativamente más altas de problemas de consumo de sustancias y de condiciones de salud como el cáncer y las enfermedades cardiacas, según Bernstein.
“Necesitamos centrarnos en estos shocks climáticos y proteger a los niños, porque pueden representar amenazas para la salud de por vida”, insistió. “Son devastadores para tu potencial de salud de por vida”.
Ahora bien, el problema no es solo la exposición a temperaturas extremas. Tener simplemente temperaturas más altas aumenta la contaminación por partículas y ozono, y contribuye a cientos de miles de muertes adicionales en todos los rangos de edad alrededor del mundo, según un estudio publicado el año pasado.
“Existe una relación lineal directa entre la concentración de ozono en el exterior y la temperatura, por lo que se proyecta que será un problema mayor a medida que nuestro clima se calienta”, sostuvo el Dr. John Balmes, portavoz médico de la Asociación Estadounidense del Pulmón. “Y luego, por supuesto, esos días realmente calurosos y secos en el verano son con frecuencia cuando también tenemos incendios forestales”.
La exposición al humo de los incendios forestales, que en gran parte lo conforman partículas contaminantes, también puede aumentar el riesgo de problemas cardíacos y respiratorios.
¿Qué pueden hacer las autoridades ante los problemas relacionados al calor extremo?
Algunas ciudades de EE.UU. sufren más que otras la peor parte de los problemas relacionados al calor extremo. Phoenix tiene más de 100 días al año con temperaturas de 37,7 grados Celsius, en promedio. Por ejemplo, en 2020 alcanzó un total de 145 días con esas condiciones. La ciudad creó la primera Oficina de Respuesta al Calor y Mitigación que se financia con fondos públicos en el país, para centrarse en los problemas relacionados a las altas temperaturas. La entidad trabaja con todo el gobierno de la ciudad para integrar planes que permitan gestionar los asuntos relacionados al calor desde todos los ángulos.
Esta oficina ha liderado la misión de crear infraestructura de vehículos eléctricos para reducir la dependencia de las emisiones de combustibles fósiles que empeoran el cambio climático. También trabaja con iniciativas enfocadas en personas sin hogar para que tengan acceso a agua y refugio. Además, implementó un sistema de seguimiento para que los pasajeros sepan cuándo llegará un determinado autobús y no siempre deban esperar afuera.
“Hay muchas acciones pequeñas que pueden ayudar con el desafío del calor”, dijo el director del programa, David Hondula. Contar con alguien que se centre en este asunto específico puede llevar a que otros departamentos de la ciudad piensen en cómo aliviar el problema. Es un gran objetivo que, si se hace bien, podría salvar vidas.
“Nos estamos moviendo, a nivel regional, en la dirección equivocada para enfrentar las muertes asociadas con el calor, al tener un aumento de más del 400 % desde 2014. Eso supera con creces cualquier resultado que esperemos en términos de crecimiento de la población, cambio demográfico”, apuntó Hondula.
Miami también sumó la posición de director de calor, aunque a esa oficina no la financia la ciudad. Justo este mes, el consejo de la ciudad de Los Ángeles votó para crear un puesto de director de calor.
¿Cómo puedes protegerte del calor extremo?
Para evitar condiciones relacionadas al calor, hay una serie de medidas puede tomar. Lareau enfatiza en la necesidad de mantenerte hidratado: asegúrate de beber agua antes de notar que tienes sed.
Tome descansos periódicos del calor cuando tengas que estar afuera.
Permítete aclimatarte a las altas temperaturas antes de empezar a correr maratones o a realizar cualquier otro ejercicio extremo al aire libre.
Y usa protector solar: las personas que sufren quemaduras por el sol tienen menos capacidad para regular la temperatura de su cuerpo.
Lareau dijo que es importante vigilar no solo la temperatura sino también el índice de calor, porque tiene en cuenta la humedad. Y eso puede ser más importante para las enfermedades relacionadas con el calor.
También aconseja a las personas que ayudes a vigilar a los que son muy jóvenes o muy mayores, porque no pueden regular bien su temperatura corporal. Cuando planifiques actividades, trata de mantenerlas alejadas del calor y revisa que tus vecinos estén bien.
“Las personas piensan con frecuencia en hacer eso durante las tormentas de nieve, pero el calor puede ser peligroso para los ancianos. Especialmente si no tienen aire acondicionado”, dijo Lareau. “Entonces, si puedes ofrecerte a cortar el césped o hacer sus tareas por ellos si eres más joven y saludable, y puedes soportar el calor un poco mejor, todos se benefician”.