(CNN Español) – El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que compite para su reelección contra el expresidente Luiz Inácio Lula Da Silva, ha criticado varias veces al presidente de Colombia, Gustavo Petro, para atacar a su oponente a la presidencia e intentar tomar la delantera en una reñida elección que se definirá este 30 de octubre.
En sus más recientes declaraciones contra Petro, Bolsonaro —que participó solo en el debate presidencial este miércoles— dijo que el único interés del presidente de Colombia es legalizar la cocaína.
“Otros países lo quieren, como Colombia”, dijo Bolsonaro refiriéndose al sistema de pagos instantáneo de Brasil, PIX, y agregó: “Pero no sé si ahora con su nuevo presidente (Gustavo Petro) no lo quieran más porque su negocio ahora es liberar (legalizar) la cocaína”, reportó Reuters.
“Él también es amigo de Lula, que puede discutir el asunto conmigo”, dijo Bolsonaro en un debate televisado este domingo, a una semana de la segunda vuelta presidencial.
El presidente de Colombia ha abogado por el cambio de paradigma en la lucha contra las drogas, que dice, fracasó, por lo que pide un nuevo enfoque basado en la salud pública y no en la persecución criminal de los consumidores.
Y fue justamente después del discurso en la Asamblea General de Naciones Unidas, en septiembre, cuando Bolsonaro criticó a Petro, rechazando su propuesta de cambiar el objetivo de la lucha contra las drogas.
“El presidente de Colombia fue a la ONU a defender la liberación (legalización) de la cocaína, y no olviden que ese nuevo presidente de Colombia es un viejo amigo de ese ladrón Luiz Inácio Lula da Silva”, dijo Bolsonaro el pasado mes de septiembre, citado por la agencia Efe.
Bolsonaro y su ataque contra la izquierda
Bolsonaro, un político que fue militar y que se presentó como liberal, católico y conservador de ultra derecha, llegó a la presidencia de Brasil en 2019 luego de más de una década de gobiernos de izquierda, caídos a menos tras una serie de escándalos de corrupción y crisis política que terminó con la destitución de la expresidenta Dilma Rousseff (2011-2016) y un importante numero de líderes políticos en prisión, entre los que se encontraba el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010). Lula fue condenado en 2019 a más de 12 años de prisión, pero tras pagar más de 19 meses, en marzo de 2021 un tribunal de Brasil anuló las condenas por corrupción de Lula, por lo que pudo presentarse a las elecciones presidenciales de 2022.
Desde entonces, Bolsonaro se ha consolidado como el Donald Trump brasileño por su estilo populista y sus mentiras desmedidas, entre otras, del sistema electoral brasileño.
El presidente de Brasil, en una estrategia ampliamente usada para desestimar a su contenedor político, ha cuestionado no solo a Petro, sino también ha criticado a otros gobiernos de izquierda del continente, poniéndolos como ejemplo de “retroceso” y antidemocracia en la región y asociándolos con Lula, en un intento de poner como enemigo público a los gobiernos de izquierda.
“Vean lo que acaba de pasar con la señal de CNN en Nicaragua. Fue cortada por el amigo de Lula”, que “dice que hay que regular a las redes sociales”, dijo Bolsonaro, refiriéndose a la decisión del gobierno de Daniel Ortega de sacar la señal de CNN en Español del aire el pasado 22 de septiembre.
Y sin dejar de lado el tan criticado gobierno de Nicolás Maduro, el político conservador también ha mencionado “la violencia que vive Venezuela”, un país sobre el que ha dicho que fue “llevado al fracaso” por “la izquierda amiga de Lula”.
Además, Bolsonaro ha defendido su agenda conservadora bajo el lema “Dios, Patria y Libertad”, está contra la llamada ‘ideología de género’, contra el aborto, contra la liberación de las drogas y a favor de las armas.
“A través de una fuerte campaña también en las mega iglesias evangélicas que están no solo favoreciendo abiertamente a Bolsonaro sino también diciendo cosas contra Lula, en algunas cosas son verdades, y en otros casos son mentiras”, dijo a CNN Brian Winter, editor en jefe de Americas Quartely.
El estilo político que ha caracterizado a Bolsonaro durante sus últimos años se puede resumir en que ha creado distracciones para evitar enfocarse en las cosas que verdaderamente importan, como las reformas o las privatizaciones, o incluso la gran cantidad de escándalos y polémicas durante su presidencia. “Él crea ese ambiente de circo para desviar la atención”, dijo anteriormente a CNN Lorena Barbería, investigadora y profesora titular del Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad de São Paulo.
Y parte de esas distracciones es crear un enemigo público, que en este caso es la izquierda encarnada en Lula, que le lleva una leve ventaja en las encuestas: según la más reciente medición de Datafolha, el líder de izquierda tiene 49% de intención de voto frente al 45% de Bolsonaro.
Según Federico Finchelstein, experto en populismo y autor del libro “Del fascismo al populismo en la historia”, Bolsonaro comparte estilo con líderes populistas y tiene elementos del fascismo, como otros líderes políticos como Viktor Orban en Hungría, Javier Milei en Argentina y el expresidente Donald Trump, que han construido una retórica llena de mentiras “para demonizar a lo distinto”, en este caso, la izquierda.
Pero Bolsonaro insiste con que es un defensor de la democracia y de la constitución y rechaza los gobiernos de Cuba, Venezuela y Nicaragua y lo que ocurre allí con los derechos y libertades de los opositores y los procesos democráticos, y ya que Colombia tiene su primer gobierno de izquierda de la historia, ha creado un nuevo chivo expiatorio para satanizar a sus contenedores políticos.
Pero la retórica no es la única que definirá un resultado, según el editor en jefe de Americas Quartely, pues dijo que si bien la economía y la religión pueden favorecer a Bolsonaro, “la memoria de la pandemia” puede jugarle en contra.
“Ahí claramente favorecerá a Lula que siempre estuvo a favor de la vacunas y la ciencia en general. Bolsonaro no tuvo esa ventaja, pero tiene varios factores a su favor en este momento. Será una elección difícil y cualquiera podría ya ganar a estas alturas”, dijo Quaterly en CNN.
– Con información de Reuters y Sofía Benavides y Rafael Romo de CNN en Español.