(CNN) – Una de las dos compañeras de casa que sobrevivieron a los apuñalamientos mortales en noviembre de cuatro estudiantes de la Universidad de Idaho dijo a los investigadores que vio a un hombre enmascarado vestido de negro en la casa en la mañana del ataque, según una declaración jurada de causa probable publicada este jueves en el caso de los fiscales contra el sospechoso Bryan Kohberger.
La mujer, identificada en el documento como D.M., dijo que “oyó llorar” en la casa la mañana de los asesinatos y escuchó una voz masculina que decía: “Tranquila, voy a ayudarte”. D.M. dijo que entonces vio una “figura vestida con ropa negra y una máscara que cubría la boca y la nariz de la persona caminando hacia ella”, dice la declaración jurada.
“D.M. describió a la figura como un hombre de 1,77 metros o más, no muy musculoso, pero de constitución atlética y cejas pobladas”, dice la declaración jurada. “El hombre pasó junto a D.M. mientras ella estaba en ‘fase de shock congelada’”.
“El hombre caminó hacia la puerta corredera trasera de cristal. D.M. se encerró en su habitación después de ver al hombre”, dice el documento, añadiendo que la mujer no reconoció al hombre.
La publicación de la declaración jurada –que también dice que un perfil de ADN obtenido de la basura en la casa de Pennsylvania de la familia de Kohberger coincide con el ADN de una funda de cuchillo de cuero encontrado en la escena de los asesinatos– se produjo cuando el sospechoso de 28 años hizo su primera comparecencia ante el tribunal en Idaho, donde se enfrenta a cuatro cargos de asesinato en primer grado y un cargo de robo.
Kohberger sonrió a su abogado de oficio cuando entró en la sala y no pareció establecer contacto visual con nadie más durante todo el procedimiento, incluidas las familias de las víctimas, que lloraban en la primera fila y miraron fijamente al sospechoso durante toda la audiencia.
El juez estimó este jueves tanto la petición de los fiscales de una orden de no contacto durante dos años para los familiares de las víctimas y los compañeros de casa sobrevivientes, así como su petición de que no se concediera la libertad bajo fianza a Kohberger. El sospechoso deberá comparecer de nuevo ante el tribunal el 12 de enero para una audiencia de estatus que precederá a la audiencia preliminar.
Kohberger ingresó en la cárcel del condado de Latah, Idaho, el miércoles por la noche tras ser extraditado desde Pensilvania, su estado natal, donde fue detenido el pasado viernes, casi siete semanas después de que Kaylee Goncalves, de 21 años; Madison Mogen, de 21; Xana Kernodle, de 20; y Ethan Chapin, de 20, fueran encontrados mortalmente apuñalados en una casa fuera del campus de la ciudad universitaria de Moscow, Idaho.
La declaración jurada aborda algunas cuestiones que las autoridades han dejado sin respuesta hasta ahora, a saber, algunos de los pasos utilizados para identificar a Kohberger como sospechoso.
Las autoridades habían estado buscando un Hyundai Elantra blanco visto en la zona de los asesinatos, señala la declaración jurada, y poco después notificaron a las fuerzas del orden de la zona que buscaran dicho vehículo.
Varios días después, los agentes de la cercana Universidad Estatal de Washington, donde el sospechoso era estudiante de doctorado en el programa de justicia penal, identificaron un Elantra blanco y descubrieron posteriormente que estaba registrado a nombre de Kohberger.
Los datos de la licencia de manejo de Kohberger coincidían con la descripción que la mujer sobreviviente vio en la casa en el momento del ataque, según la declaración jurada, en la que se especificaba su altura y peso, 1,82 metros y 84 kilos, y el hecho de que tuviera las cejas pobladas.
Kohberger recibió una nueva matrícula para su Elantra cinco días después de los asesinatos, dice la declaración jurada, citando los registros del Departamento de Licencias del Estado de Washington.
En el momento de su detención la semana pasada, un Elantra blanco fue encontrado en la casa de los padres de Kohberger en Pennsylvania, de acuerdo con el defensor público en jefe del Condado de Monroe, Jason LaBar, quien dijo Kohberger había ido a casa para las festividades.
Además, la basura recuperada de la casa de la familia de Kohberger a finales del mes pasado fue enviada para pruebas de ADN al Laboratorio Estatal de Idaho, dice la declaración jurada. El laboratorio “informó que el perfil de ADN obtenido de la basura” coincidía con la funda de cuero marrón de un cuchillo encontrado “sobre la cama” de una de las víctimas.
Los registros telefónicos también indican que el teléfono de Kohberger estuvo cerca de la residencia de las víctimas al menos 12 veces entre junio de 2022 y la actualidad, dice el documento. “Todas estas ocasiones, excepto una, ocurrieron en las últimas horas de la noche y las primeras horas de la mañana de sus respectivos días”.
Una orden judicial prohíbe a la fiscalía y a la defensa hacer comentarios más allá de hacer referencia a los registros públicos del caso.
– Stephanie Becker, Jason Kravarik, Kevin Flower y Lauren del Valle contribuyeron con este reportaje.