(CNN) – Rusia puede verse obligada a utilizar un arma nuclear si la contraofensiva de Ucrania tiene éxito, dijo este domingo el alto funcionario ruso Dmitry Medvedev en la última de una serie de amenazas nucleares hechas durante la invasión de Moscú por el aliado clave del presidente Vladimir Putin.
“Imagínense que la ofensiva… junto con la OTAN, tuviera éxito y acabara con parte de nuestro territorio. Entonces tendríamos que usar armas nucleares en virtud de lo estipulado en el Decreto Presidencial ruso”, dijo Medvedev, vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, en un post de Telegram.
“Sencillamente, no habría otra solución”, añadió el expresidente de Rusia. “Nuestros enemigos deberían rezar a nuestros combatientes para que no permitan que el mundo arda en llamas nucleares”.
Medvedev, que fue presidente de Rusia de 2008 a 2012, ha mantenido un tono belicoso durante toda la invasión de Ucrania por parte de Moscú, planteando repetidamente el espectro de un conflicto nuclear.
El pasado mes de abril, advirtió de la expansión nuclear rusa si Suecia y Finlandia se unían a la OTAN. Helsinki se unió a la alianza de defensa a finales de ese mes, mientras que el camino de Estocolmo hacia la OTAN se despejó a principios de este mes después de que Turquía retirara sus objeciones.
En septiembre, Medvedev afirmó que las armas nucleares estratégicas podrían utilizarse para defender territorios incorporados a Rusia desde Ucrania.
Y en enero, mientras los Estados miembros de la OTAN debatían nuevos envíos de armas a Ucrania, Medvedev afirmó que la derrota de Rusia en la guerra podría desembocar en un conflicto nuclear.
“La derrota de una potencia nuclear en una guerra convencional puede provocar el estallido de una guerra nuclear”, escribió Medvedev en Telegram en enero. “Las potencias nucleares no pierden los grandes conflictos de los que depende su destino”.
“Esto debería ser obvio para cualquiera. Incluso para un político occidental que haya conservado al menos algún rastro de inteligencia”, añadió.
Las declaraciones de Medvedev de este domingo vuelven a plantear la posibilidad de que Rusia pueda perder la guerra tras casi 18 meses de desgaste, una rara admisión por parte de un alto cargo ruso.
También se produjeron horas después de que el Ministerio de Defensa ruso acusara a Kyiv de atacar Moscú con aviones no tripulados. Tres drones fueron interceptados este domingo, pero un complejo comercial en el oeste de la capital rusa fue alcanzado, según el Ministerio.
Retórica nuclear
Estados Unidos ha advertido anteriormente a Rusia contra el uso de armas nucleares en Ucrania, tanto a través de comunicaciones privadas directas, como de canales públicos, incluso en la Asamblea General de la ONU del año pasado.
El mes pasado, Putin dijo que Rusia había trasladado un primer lote de armas nucleares tácticas a Belarús, afirmando que se habían colocado allí por “disuasión”.
En su intervención en el Foro Económico Internacional de San Petersburgo, Putin dijo que el resto de las armas nucleares tácticas que Rusia pretende trasladar a Belarús se transferirían “a finales de verano o a finales de año”.
La Agencia de Inteligencia de Defensa de EE.UU. (DIA, por sus siglas en inglés) dijo que no tenía “ninguna razón para dudar” de la afirmación de Putin de que había armas nucleares en Belarús.
Pero el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller, declaró entonces que Estados Unidos “no ha visto ninguna razón para ajustar nuestra propia postura nuclear ni ningún indicio de que Rusia se esté preparando para utilizar un arma nuclear”.
El presidente de Belarús, Alexander Lukashenko, afirmó el mes pasado que, ante una agresión, no mostraría “ninguna vacilación” en utilizar las armas nucleares tácticas rusas estacionadas en suelo bielorruso.
Pero los altos funcionarios de la DIA dijeron que no creen que Lukashenko tuviera ningún control sobre el arsenal. Lo más probable es que esté totalmente controlado por Rusia, dijeron los funcionarios.
Rusia tiene unas 4.477 cabezas nucleares desplegadas y en reserva, incluidas unas 1.900 armas nucleares tácticas, según la Federación de Científicos Estadounidenses.