(CNN Español) – Las autoridades de Haití cerraron este lunes las puertas de acceso al mercado binacional terrestre, en la localidad fronteriza de Juana Méndez que colinda con Dajabón en República Dominicana, según un comunicado.
La decisión se tomó a pesar de que el domingo permitieron el ingreso de mercancías dominicanas a su territorio por primera vez desde que el gobierno dominicano abriera parcialmente la frontera.
El 9 de octubre, el Consejo Nacional de Seguridad de la República Dominicana anunció en un comunicado la flexibilización del cierre de la frontera para el intercambio comercial de manera ordenada entre ambos países.
La medida de flexibilización se produjo tras la decisión del cierre fronterizo por parte de República Dominicana en desacuerdo por la construcción que realizan los haitianos del canal en Juana Méndez, que pretende desviar las aguas del río Masacre. El mandatario dominicano, Luis Abinader, dispuso el cierre en la zona fronteriza de Dajabón el 11 de septiembre y, a pocos días, el 15 de septiembre, ordenó el cierre total de la línea limítrofe.
Con la flexibilización, el gobierno dominicano habilitó en cuatro provincias limítrofes corredores comerciales provisionales, con ciertas restricciones: estrictas medidas de control militar y registro biométrico obligatorio, en las provincias de Dajabón, Elías Piña, Independencia y Pedernales para facilitar el comercio de productos esenciales dominicanos como alimentos y medicinas, especialmente para los infantes.
Además, en el comunicado, Santo Domingo anunció la prohibición de la exportación de productos electrónicos, cemento, varillas y otros materiales de construcción para evitar que se construyan estructuras que amenacen los activos medioambientales.
Luego de que se establecieran los corredores comerciales, Haití no ha abierto sus puertas para el paso de los comerciantes a suelo dominicano y dejar que se desarrolle el mercado binacional terrestre que habitualmente se lleva a cabo lunes y viernes, en las provincias fronterizas de Dajabón, Elías Piña, Independencia y Pedernales, del lado dominicano.
Solo permitió este domingo que los comerciantes haitianos cruzaran al lado dominicano a cargar las mercancías que habían comprado y trasladarlas hacia su país.
El cierre fronterizo y la decisión de República Dominicana de suspender la entrega de visados a ciudadanos haitianos generaron molestia en el gobierno haitiano, que señaló que estas medidas afectarían a la población que depende del flujo comercial en esa zona.
El domingo, tras someterse al nuevo protocolo de seguridad biométrico impuesto por el gobierno dominicano, cientos de haitianos entre negociantes y transportistas cruzaron la frontera, desde Juana Méndez (provincia de Haití) hasta Dajabón (provincia de República Dominicana), para cargar las mercancías que ya habían comprado y regresar a su país.
Sin embargo, según lo observó CNN en recorridos, este lunes en Dajabón los comerciantes dominicanos abrieron las puertas de sus negocios, pero se quedaron sin clientela, a la espera de los compradores haitianos, y una acción similar se vivió en el sur del país, en Elías Piña, donde la actividad comercial sigue paralizada, ya que este es uno de los rechazos de los haitianos a las prohibiciones impuestas por dominicana.
Algunos comerciantes de Dajabón advierten que están al borde de la quiebra ya que la mercancía que tenían destinada para la venta, especialmente los alimentos, se les está dañando.
Comerciantes del lado dominicano esperan con ansias que el viernes las autoridades haitianas permitan abrir sus puertas, para la activación del mercado binacional.