(CNN Español) – Los bajos niveles que se han registrado en el embalse Guajataca, en el norte de Puerto Rico, mantienen vigilante a la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados, ante la posibilidad de que tengan que poner en marcha un plan de racionamiento para algunos municipios de la zona noroeste de la isla.
El gobierno informó que Guajataca provee agua a 250.000 personas de los municipios de Moca, Aguadilla, Aguada, Isabela, San Sebastián, Quebradillas y Rincón.
Actualmente, el cuerpo de agua se encuentra en observación, un nivel antes que el de ajustes operacionales, la cual conllevaría a activar un plan de interrupciones temporales. La última vez que Guajataca entró en un plan de racionamiento de agua fue a principios de 2019.
“Estamos trabajando con la disminución de las presiones sin afectar clientes y lo mismo está haciendo la Autoridad de Energía Eléctrica con su división de riego para poder sacarle menos agua al embalse Guajataca y así poder ampliar los días que nos quedarán para llegar a un nivel ya más de seguridad, que es lo que le llamamos nosotros”, dijo el director de la Región Oeste de Autoridad de Acueductos y Alcantarillados de Puerto Rico, Eric Rosa.
Hasta este jueves, los niveles de Guajataca se encontraban en 190,2 metros. De llegar a un nivel de agua de 188 metros, el gobierno estaría considerando activar un plan de racionamiento.
“El año pasado las lluvias fueron un poco escasas, pero este año lo que estamos haciendo y nos preparamos durante el año pasado es tratar de mantener las producciones en un nivel óptimo”, explicó.
El Servicio Nacional de Meteorología de Estados Unidos también sigue el rastro a esta situación, ya que actualmente Puerto Rico se encuentra en una etapa de clima seco.
“La sequía atípica está creando que estos niveles de los ríos se mantengan bastante bajos, ya que no hay lluvia. Y esto se está dando no solamente en el lago Guajataca o río Guajataca, sino se está dando a través de toda la isla”, dice el coordinador de Avisos del Servicio, Ernesto Morales.
El Monitor de Sequía de Estados Unidos ha confirmado que gran parte de la isla está afectada por una sequía atípica. Tanto agencias federales como estatales se mantienen pendientes a cómo esto podría afectar las condiciones del clima en los próximos meses. En junio, el Servicio Nacional de Meteorología confirmó nuevos récords de temperaturas con índices de calor de hasta 46,6 grados Celsius. Además, durante varios meses se emitieron alertas de calor extremo. El 20 de enero se registró un nuevo récord de temperatura en San Juan, con 32,7 grados Celsius.
La agencia federal coincide en que varios fenómenos climáticos ya se están sintiendo en Puerto Rico, lo que ha alterado la cantidad de precipitación en algunas zonas, y que el escenario de falta de agua es un buen ejemplo. A esto se le unen las altas temperaturas ya registradas.
“Sabemos que tuvimos El Niño, y El Niño siempre luego que se desarrolla vemos el período seco asociado a esto. Por lo tanto, esto se está dando, esto se sabía que iba a estar ocurriendo. La buena noticia: ya El Niño no va a estar afectándonos para el verano que viene, por lo tanto vamos a ver que los patrones de lluvia van a estar cambiando”, explicó Morales.
Estos cambios podrían traer la lluvia necesaria para aliviar la condición de falta de agua en Guajataca, pero a la misma vez estarían creando algunas situaciones inesperadas en plena temporada de huracanes en el Caribe. La época ciclónica en la región comienza el 1 de junio y termina el 30 de noviembre.
“La mala noticia es que vamos a estar en la fase neutral moviéndonos hacia La Niña durante justamente el período pico de la temporada, y esta fase es la que más favorece para que tengamos ciclones tropicales”, apunta Morales.
El Niño es un patrón climático natural en el océano Pacífico tropical que trae temperaturas de la superficie del mar más cálidas que el promedio y tiene una gran influencia en el clima en todo el mundo, afectando a miles de millones de personas. La Niña es un fenómeno oceánico-atmosférico natural que se caracteriza por temperaturas superficiales del mar más frías que la media en el centro y el este del océano Pacífico cerca del ecuador y que, en consecuencia, afecta al tiempo en todo el mundo.