CNNE 1690703 - ¿que estaba en juego en las elecciones de cataluna?
El Partido Socialista de Cataluña gana las elecciones parlamentarias regionales
06:05 - Fuente: CNN

(CNN Español) –Salvador Illa es el líder del Partido Socialista de Cataluña, la fuerza más votada para la Generalitat de Cataluña en las últimas elecciones del pasado 12 de mayo.

Desde este jueves a las 9 a.m., hora local, Illa asiste a la sesión plenaria del Parlamento donde se debate su investidura como líder del Ejecutivo autonómico. El líder socialista llega a este debate con los apoyos necesarios para alcanzar su objetivo, aunque ni le resultó fácil lograrlos, ni está claro que la sesión finalice con normalidad.

El PSC había logrado 42 escaños y le hacía falta sumar otros 26 para investir a su candidato. Solo podían alcanzar su objetivo alcanzando la cifra clave de 68 diputados, equivalentes a la mayoría absoluta en esta cámara legislativa autonómica.

Definidas las necesidades, Illa y su equipo se pusieron manos a la obra para lograr el apoyo de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), que ostenta 20 diputados en el Parlamento catalán, y Comuns Sumar, con otros 6, todas formaciones de izquierda. Pero lograr ese sostén no iba a ser fácil, sobre todo porque ERC -formación de corte independentista- no veía claro el hecho de facilitar la presidencia al líder socialista.

A esas dificultades, se les unió la cuenta atrás para una repetición electoral, ya que el nuevo presidente del parlamento de Cataluña, Josep Rull, convocó a finales de junio un pleno de investidura – a sabiendas fallido por la falta de candidato- con el que activaba el período de dos meses para investir a alguien o bien llamar a los electores de nuevo a las urnas. Ese plazo finaliza el 26 de agosto.

En este contexto, y tras semanas de negociación, el PSC logró a finales de julio los apoyos de ambas formaciones tras cerrar varios acuerdos.

Incluso, cuando ya tuvo garantizados los apoyos necesarios a tiempo, todavía quedan dudas acerca de cómo puede desarrollarse el debate de investidura.

Uno de los elementos que influirá en el desarrollo de ese pleno es el retorno del expresidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, el líder independentista de Junts, que anunció este miércoles que para poder asistir había emprendido el viaje de regreso desde Bélgica, donde ha residido estos últimos siete años.

Illa, que es una figura central de la política catalana y española, propone dejar atrás los años del proceso que cobró relevancia en 2010, cuando el Tribunal Supremo de España anuló o reinterpretó varios artículos del Estatuto de Autonomía de Cataluña de 2006.

El conflicto se agudizó con el referéndum catalán en 2017 —considerado por el TS como una votación ilegal— y la declaración unilateral de independencia en el Parlament, lo que llevó a la destitución del gobierno catalán por parte del Estado español y el encarcelamiento de varios líderes independentistas (para conocer más del llamado Procés, lee este artículo).

Ese contexto se sostuvo en el debate de los principales candidatos de los partidos políticos que se presentaron a las elecciones el pasado 12 de mayo. Con una mirada crítica al proceso, Illa propuso una transformación de Cataluña y sostiene que “pasar página es unir a los catalanes”.

Las encuestas lo señalaban como el candidato “más preparado para resolver las cuestiones relevantes de Cataluña”.

“Un candidato que se ha erigido como un político responsable, muy centrado que no ha querido generar problemas ni controversias y que ha colaborado con su apoyo al votar los presupuestos durante su participación en el parlamento como minoría” dice Marc Guinjoan, analista político y catedrático de la Universidad Pompeu Fabra.

Illa se propone conducir “la tercera gran transformación de Cataluña” y no descartó formar un gobierno de coalición con la Esquerra Republicana, un partido independentista de centroizquierda y con los comunes, una fuerza política también de izquierda representada en estas elecciones por Jessica Albiach, según dijo en una rueda de prensa organizada por la agencia de noticias EFE el 6 de mayo. Aunque valoró también la posibilidad de generar un gobierno “en solitario”.

Anteriormente, en una entrevista radial en referencia a Junts declaró que “habían tenido la posibilidad de colaborar en otras instituciones” y que habría que ver por qué camino optan después de las elecciones.

Con miras a la Generalitat

Los partidos políticos que se presentaron a elecciones son 21 aunque del total de esas candidaturas, el que lideraba la intención de votos después del Partido Socialista es Junts, que llevó como candidato principal al polémico Carles Puigdemont.

Illa destacó: “Yo he fijado algunos criterios de estabilidad, socialdemocracia y el de servicios públicos como primera prioridad. Una posibilidad es esta”, haciendo referencia a la posible coalición con ERC y los comunes. Illa se encargó de dejar claro en su momento que su fuerza política no apoyaría la investidura de Carles Puigdemont en caso de que ese hubiera sido el escenario que se presente después de las elecciones, ya que “sus planteamientos políticos están muy alejados” de los suyos, según declaró en la misma conferencia de prensa.

Una declaración contundente si se tiene en cuenta que el actual presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez del PSOE, trabó acuerdos con Junts y también con ERC para propiciar una ley de amnistía que beneficiaría al líder independentista.

“Sorprende el cambio que ha hecho en su campaña hacia un tono más beligerante que ha centrado su discurso en el eje territorial, en la españolidad, y con una mirada más ‘business friendly’ en un intento, quizás, de obtener el apoyo del votante de centroderecha”, añade el catedrático Guinjoan

Coaliciones en Cataluña 

En las elecciones parlamentarias de 2021, Salvador Illa fue el candidato más votado por los catalanes pero no llegó a presidir la Generalitat, ya que su fuerza política no logró la mayoría de los votos en el Parlamento.

En esa ocasión, las fuerzas independentistas catalanas lograron reunir los votos necesarios después de que el partido de centroizquierda ERC formara una coalición con Junts, el partido independentista de centroderecha. En esa ocasión, la presidencia quedó en manos de Pere Aragonès. Desde ese momento, Salvador Illa se convirtió en la figura representativa de la oposición en el Parlamento de Cataluña.

Sin embargo, las tensiones dentro de la coalición y la posterior salida de Junts hicieron que la presidencia de la Generalitat perdiera el apoyo para la aprobación del presupuesto 2024 y Pere Aragonès se viera en la necesidad de adelantar las elecciones para el 12 de mayo.

Illa celebró la convocatoria a elecciones anunciada por la Generalitat y aseguró que “cuanto antes voten los catalanes, mejor” en una rueda de prensa ofrecida en el Parlamento tras conocerse el adelanto de las elecciones el pasado 13 de marzo. Y recientemente, en conversación con varios medios locales lanzó una crítica clara al decir que los miembros de la coalición “han sido incapaces de formar un gobierno estable”.

Salvador Illa

El camino de Illa 

La llegada de Salvador Illa a su primer puesto ejecutivo fue inesperada. En 1995, Román Planas ganó las elecciones para la alcaldía de La Roca del Vallès, un pequeño municipio de 10.000 habitantes en la provincia de Barcelona y tres meses después falleció, por lo que asumió el puesto su segundo en orden de jerarquía: un joven Salvador Illa de tan solo 29 años.

Desde 1995 estuvo al frente del gobierno del municipio de La Roca del Vallès. Durante su gestión se inauguró un gran centro comercial que hoy es una atracción para muchos turistas que visitan Barcelona. En 2005 pasó a ser director general de Gestión de Infraestructuras del Departamento de Justicia de la Generalitat de Cataluña, ampliando su carrera política al ámbito regional.

Tras un breve paso por la gestión privada, Illa se reincorpora a la administración pública en 2010, cuando fue designado director de Gestión Económica del Ayuntamiento de Barcelona y luego, en 2016, gerente de Empresa, Cultura e Innovación.

Pero su mayor desafío político sobreviene luego, durante la presidencia de Pedro Sánchez cuando fue designado ministro de Sanidad del Gobierno de España, cargo que ocupó desde enero de 2020 hasta enero de 2021.

Su gestión al frente de este Ministerio en el momento de la crisis sanitaria más importante en todo el mundo le dio una visibilidad nacional que hasta el momento no tenía al ser declarado por el Gobierno como una autoridad competente delegada para gestionar la crisis del covid-19. 

Durante su gestión en el Ministerio ha recibido duras críticas por asistir a eventos públicos durante la pandemia donde se encontraba gente sin mascarillas. Además, ha tenido que comparecer frente al Senado y la Comisión nacional del Congreso de España por denuncias de irregularidades en los procesos de contratación en las administraciones públicas para adquirir material sanitario durante la crisis pandémica ocasionada por la covid-19.

En cuanto a las críticas recibidas, Illa reconoció que “la gente tiene razón”, aunque explicó que su participación fue en el marco de un acto institucional en el que se habían tomado todas las medidas sanitarias. En cuanto a las denuncias, en su comparecencia negó que su ministerio haya comprado de manera directa el material sanitario.

A pesar de la terrible crisis sanitaria, Illa en ningún momento abandonó la Secretaría de Organización del Partido Socialista de Cataluña, y de cara a las elecciones de la Generalitat de 2021 cesó en su cargo de ministro para presentarse como candidato al Parlamento de la Generalitat. La decisión causó controversia ya que España se hallaba transitando la tercera ola de covid-19 y en pleno desarrollo de la campaña de vacunación por parte del Ministerio.

Político e intelectual

Hijo de obreros textiles, estudió Filosofía en la Universidad de Barcelona y obtuvo un MBA en la Escuela de gestión y negocios IESE de la Universidad de Navarra. Illa dice que representa a la clase media que logra el ascenso social y su llegada a los ámbitos de poder de la mano de los estudios universitarios.

De su paso por el ministerio de Sanidad, deja testimonio en un libro titulado “El año de la pandemia, una crónica de su gestión en primera persona en la que hace balances de lo que fue quizás el mayor desafío de su carrera política hasta el momento.

El candidato y primer secretario del PSC, Salvador Illa, ha declarado que su partido es amplio y gobernará para”todos los ciudadanos de Cataluña, vengan de donde vengan y piensen cómo piensen”, pero reconoce que tiene un límite ya que no está dentro de sus planes negociar con partidos de extrema derecha y que promuevan discursos de odio, como Vox y Aliança Catalana.

Por su parte, Puigdemont, candidato a presidente por Junts ha descartado que su fuerza comparta gobierno con el PSC. Aragonès, actual presidente de la Generalitat y candidato de ERC solicita que el PSC y Junts aclaren si están “más cerca o más lejos” de lo que para esta fuerza es un tema clave en su agenda política, el avance hacia un referéndum de independencia.

Con información de Pau Mosquera