Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI, en una fotografía de mayo de 2024. Crédito: Jason Redmond/AFP/Getty Images.

(CNN) – El CEO de OpenAI Sam Altman y su esposo se convirtieron en los multimillonarios más recientes en firmar con Giving Pledge, una organización benéfica que alienta a los ultrarricos a donar su riqueza a causas filantrópicas.

En su carta publicada este martes, Altman y su esposo, Oliver Mulherin, atribuyeron “el trabajo duro, la brillantez, la generosidad y la dedicación para mejorar el mundo de muchas personas que construyeron el andamiaje de la sociedad que nos permitió llegar hasta aquí”.

“No hay nada que podamos hacer excepto sentir una inmensa gratitud y comprometernos a retribuir y hacer lo que podamos para construir el andamiaje un poco más alto”, añadió la pareja.

Bloomberg informó que Altman vale al menos US$ 2.000 millones, y gran parte de su riqueza proviene de inversiones iniciales, incluida una inversión considerable en Reddit. Él no tiene participación financiera en OpenAI, la empresa de tecnología que está a la vanguardia de la inteligencia artificial.

The Giving Pledge fue iniciado en 2010 por los multimillonarios Warren Buffett y el exmatrimonio Bill y Melinda French Gates para lograr que los más ricos del mundo se comprometieran a donar al menos la mitad de sus fortunas a organizaciones benéficas y causas filantrópicas, ya sea durante sus vidas o en sus testamentos.

El compromiso no es un contrato legalmente vinculante, sino más bien un compromiso moral. La intención de la campaña es “inspirar conversaciones, debates y acciones, no solo sobre cuánto (dar) sino también con qué propósitos y con qué fin”, según el sitio web.

Actualmente hay más de 245 parejas e individuos de 30 países que se inscribieron.

Este martes temprano, French Gates, una de las filántropas más ricas y prominentes del mundo, anunció que donaría US$ 1.000 millones hasta 2026 para promover los derechos de las mujeres en todo el mundo a través de su organización, Pivotal Ventures.

Ella recientemente renunció a la Fundación Bill y Melinda Gates a principios de este mes luego de su divorcio de Bill. Como parte de su acuerdo de divorcio, recibió US$ 12.500 millones de la Fundación Gates por su trabajo tras su dimisión.