(CNNMoney) – España está tratando desesperadamente de detener el impulso independentista de Cataluña que amenaza con descarrilar su economía y sumergir a Europa en el caos.
Las autoridades catalanas han advertido que podrían declarar la independencia de España en cuestión de días luego de que Madrid interfiriera en el referendo independentista este domingo.
Sin embargo, el Tribunal Constitucional español emitió una decisión de suspender la sesión del pleno del Parlamento catalán de este lunes. La sesión estaba programada para discutir el tema de la independencia.
El alto tribunal advirtió que si se ignorara la suspensión habría “responsabilidades, incluida la penal, en las que pudieran incurrir en caso de no atender este requerimiento”.
Enfrentamientos violentos entre la Policía de España y los votantes han elevado las tensiones después del voto que fue declarado ilegal por Madrid. Los sindicatos alentaron a sus miembros a unirse a las protestas de este martes que atrajeron a unas 700.000 personas.
Los inversionistas están en alerta de riesgo: el índice bursátil de España cayó un 2,7% este miércoles. Los bancos españoles con sede en Barcelona, la capital catalana, redujeron sus negociaciones en un 7%, y los bonos del Gobierno español disminuyeron.
El presidente de Cataluña, Carlos Puigdemont, aumentó más los riesgos luego de que los mercados cerraran, lanzando una fuerte crítica contra el rey de España.
Puidgemont dijo que el monarca español “ignora a millones de catalanes que piensan de una manera distinta”. Él reiteró su oferta de llamar a un mediador internacional.
Mientras los políticos planean sus próximos movimientos, negocios e inversionistas están atrapados en la mitad del asunto. Cataluña es la región económicamente más productiva de España, base de 7.100 compañías extranjeras, entre ellas Volkswagen, Nissan y Cisco.
A continuación tres posibles escenarios en esta crisis:
1. Una salida negociada
Muchos expertos creen que a pesar de las relaciones desmoronadas entre Madrid y Barcelona, ambos lados están en capacidad de negociar una tregua.
“Cataluña no tendría los medios, incluyendo los medios fiscales, para asegurar una independencia total”, dice Holger Schmieding, economista jefe del Berengberg Bank. “En algún momento, Barcelona y Madrid tendrán que hablar”.
Una salida negociada podría dejar a Cataluña con más autonomía y un aumento del control de sus propias finanzas.
Incluso así, la incertidumbre y el malestar público en los próximos días (o meses) podría causar un gran daño a las empresas locales y a la economía.
Las protestas incluyeron el cierre de varias autopistas este martes, causando retrasos de producción en la planta de Volkswagen de la región. Más interrupciones pondrían en peligro la asistencia y la productividad de los trabajadores.
Las inversiones también podrían retrasarse a medida que los ejecutivos consideren las implicaciones de la independencia catalana, dice Stephen Brown, economista de Capital Economics.
Schmieding alertó que un periodo de confusión podría volver lento el crecimiento de la economía de España pasando de un 3,2% actual a un 2,5%.
2. Un camino de colisión
Los efectos colaterales podrían ser mucho peores si ambos lados tienen un acercamiento duro.
Si Cataluña declarara su independencia, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, podría reaccionar imponiendo un gobierno directo sobre Cataluña, que actualmente tiene un grado de autonomía.
Esto podría generar muchas más protestas, enfrentamientos violentos y conflictividad laboral.
Muchas cosas siguen siendo confusas sobre lo que eso podría significar para la vida diaria de los catalanes, pero podría generar una “cantidad muy significativa de alteración”, según Laurence Allan, director de riesgos de IHS Markit.
Las operaciones del gobierno local en Cataluña podrían ralentizarse o detenerse, perjudicando las empresas, agregó Allan.
Esa situación podría también llevar a “boicots contra productos catalanes en otras partes de España”, dice Federico Santi, analista de Europa en Eurasia Group.
3. El peor escenario
Los expertos dicen que el escenario más peligroso para los negocios podría ser una separación no sancionada.
Los negocios de Cataluña podrían enfrentar el prospecto de operar en un Estado nuevo e independiente sin tratados comerciales formales, una situación incluso mucho más seria que el brexit, dice Carsten Hesse, economista europeo del Berenberg Bank.
Cataluña representa casi una quinta parte de la economía de España, y lidera todas las regiones al producir el 25% de las exportaciones del país.
“Podría afectar de una manera muy significativa la economía de España en un momento en el que España se ha recuperado de su crisis económica”, dice Megan Green, economista jefe de Manulife Asset Management.
En este escenario, los inversionistas podrían dejar de comprar deuda catalana y española y los costos de financiación del gobierno aumentarían.
“Esto podría traer de nuevo una crisis a la eurozona en el peor de los casos”, dice Green.
El Gobierno catalán ofreció una imagen más tranquila, diciendo que haría todo lo que fuera posible para ayudar a los negocios regionales.
“Creemos que en cualquiera de los escenarios que puedan abrirse ahora, podemos garantizar la correcta operación de los negocios. Hay muchos mecanismos que pueden garantizar las mismas características y condiciones en las relaciones comerciales [hasta] ahora”, dijo Joan Romero, jefe de la división de Negocios e Inversión de Cataluña.
– Emma Bowden y Claudia Rebaza de CNN contribuyeron con este reporte.