(CNN) – La presión que ejerció el Gobierno de Biden en los días previos a la cumbre de la OTAN culminó meses de diplomacia tras bastidores para conseguir que Turquía aceptara la adhesión de Suecia a la alianza.
Una parte importante de ese esfuerzo diplomático consistió en lograr avances para la posible venta de aviones de combate F-16 a Ankara, una exigencia que, a pesar de las afirmaciones de altos funcionarios estadounidenses, se había vinculado con la cuestión de la membresía de Suecia en la OTAN.
La venta de armas estadounidenses a Turquía todavía no es un acuerdo cerrado, y su principal oponente es el presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, Bob Menéndez, quien le dijo a CNN en la tarde de este martes que “por el momento” continúa estando en contra.
El demócrata de Nueva Jersey estuvo durante mucho tiempo en contra de vender aviones de combate a Ankara, no solo debido a los obstáculos que ponía Turquía a la membresía de Suecia, sino también por sus problemas con los Derechos Humanos y las agresiones regionales, incluida la tensión con Grecia.
Sin embargo, hay indicios de que los esfuerzos por cambiar la posición de Menéndez y abordar sus preocupaciones ya tuvieron algún impacto.
Nueva información aportada por CNN muestra cómo meses de diplomacia constante, ayudados por la estrecha relación de dos excolegas en el Senado, dieron como resultado lo que podría ser uno de los mayores logros de política exterior del Gobierno de Biden.
Ahora todos los ojos están puestos en una reunión que se celebrará este miércoles entre el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y el primer ministro de Grecia, Kyriakos Mitsotakis, para ver si logran calmar las preocupaciones del legislador estadounidense y obtener la aprobación para la venta del F-16.
Antes de la reunión de alto perfil de este miércoles, el Gobierno de Biden espera que Erdogan y Mitsotakis se comprometan a mantener la calma en la región y posiblemente que lleguen a un acuerdo mutuo para respetar el espacio aéreo del otro, después de un año de incursiones turcas sin precedentes en el espacio aéreo griego, dijo a CNN un funcionario estadounidense y un diplomático regional familiarizados con las negociaciones. La esperanza es que la declaración conjunta pueda abordar las preocupaciones de Menéndez.
Más de un año de impulso a Suecia
Después de que Finlandia y Suecia fueran invitadas a unirse a la OTAN, se pusieron en marcha esfuerzos para asegurar su membresía en la alianza defensiva. Turquía puso obstáculos a ambos países, pero finalmente permitió que Helsinki avanzara. Sin embargo, Ankara mantuvo la oposición al ingreso de Suecia, haciendo demandas relacionadas con los grupos terroristas kurdos, como el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), y la venta de armas.
Detrás de escena, la venta de los F-16 también operaba como una demanda implícita de Ankara, y los diplomáticos estadounidenses se pusieron a trabajar en amplios compromisos tanto con sus homólogos como con los legisladores dentro del país.
Esos compromisos se trabajaron durante los varios viajes a la ciudad de Washington del embajador de EE.UU. en Turquía, Jeff Flake.
La experiencia de Flake como exsenador estadounidense de Arizona y su relación personal con Menéndez fueron clave cuando trató de explicar la posición de su excolega a los funcionarios turcos. Trabajó simultáneamente con otro excolega para descifrar cómo el demócrata de Nueva Jersey podría llegar a un “sí” al respecto de la venta del F-16, dijo una fuente a CNN.
Flake, junto con el embajador de Estados Unidos en Grecia, George Tsunis, se reunió con legisladores del Comité de Relaciones Exteriores del Senado y del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes para discutir sobre la posible venta de armas a los dos países, dijo una fuente familiarizada con las conversaciones.
Flake también visitó el Capitolio varias veces en la primavera boreal junto al principal asesor de seguridad nacional de Erdogan, Ibrahim Kalin, con el objetivo de presentarlo a los miembros del Congreso, dijo la fuente. El embajador de EE.UU. quería asegurarse de que Kalin entendiera lo importante que era que Suecia se uniera a la OTAN para una amplia gama de miembros del Congreso, dijo la fuente.
Los funcionarios turcos también recibieron ese mensaje en una carta bipartidista de principios de este año, encabezada por la senadora demócrata Jeanne Shaheen y el senador republicano Thom Tillis, en la que 28 senadores dijeron que no respaldarían la venta de F-16 a Turquía mientras Ankara continúe bloqueando que Suecia se una a la OTAN, dijo la fuente.
Los compromisos del Gobierno de Biden con Hill fueron más allá de la visita de los principales diplomáticos estadounidenses a Grecia y Turquía.
El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, se puso en contacto con miembros del Congreso, incluido Menéndez, sobre lo que se necesitaría para llegar a un “sí” al envío de F-16 a Turquía, dijo un alto funcionario del Departamento de Estado.
“Tuvo conversaciones con miembros del Congreso, incluido el senador Menéndez, sobre este mismo tema en las últimas semanas”, dijo este martes el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Mientras tanto, los funcionarios del gobierno también se comprometieron con sus homólogos extranjeros para tratar de hacer avanzar a Turquía en la candidatura de Suecia a la OTAN, una victoria que se logró este lunes, en la víspera de la cumbre.
Erdogan acordó trasladar el documento de ratificación de Suecia al parlamento turco “lo antes posible”, pero no hay un cronograma claro para que el país se convierta en el próximo miembro de la alianza. Hungría también debe avanzar en la ratificación, lo que se espera que haga ahora que Erdoğan está a bordo del plan.
Mientras que la Casa Blanca permitió que el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, Erdoğan y el primer ministro sueco, Ulf Kristersson, tomaran la iniciativa en el importante anuncio, el asesor de seguridad nacional de EE.UU., Jake Sullivan, insistió en el papel clave del presidente Joe Biden para llegar a ese lugar.
“Cuando comience la Cumbre de la OTAN, nuestra alianza no solo será más grande y más fuerte que nunca, sino que estará más unida, más decidida y más energizada que en cualquier otro momento de la historia moderna. Y eso es en gran parte gracias al liderazgo personal del presidente Biden”, dijo Sullivan a los periodistas en la mañana de este martes.
Biden llamó a Erodgan desde el Air Force One de camino a Londres el domingo para hablar sobre la membresía de Estocolmo en la OTAN y la venta del F-16.
“El presidente Biden dejó en claro constantemente que cree que, para la alianza y para la relación bilateral entre Estados Unidos y Turquía, tiene sentido avanzar con esa venta”, dijo Sullivan a los periodistas poco después de su llamada, y agregó este martes que Biden “tiene la intención de avanzar con esa transferencia tras consultarlo con el Congreso”.
Blinken habló tres veces con el ministro de Relaciones Exteriores de Turquía en los cinco días previos a la cumbre, y Sullivan habló con sus homólogos turco y sueco el lunes.
Blinken y Biden también hablaron por separado con Mitsotakis en las últimas semanas, mientras el gobierno se preparaba para esta semana en la que esperaban realizar un intenso esfuerzo diplomático.
El mismo Biden señaló la semana pasada que un acuerdo de este tipo podría estar llegando a buen puerto, y le dijo a Fareed Zakaria de CNN en una entrevista exclusiva: “Lo que estoy tratando de armar, francamente, es un pequeño consorcio aquí, donde estamos fortaleciendo la OTAN en términos de capacidad militar tanto de Grecia como de Turquía, y permitir que entre Suecia. Pero todavía está en juego. No está logrado”.
Menéndez le dijo a CNN este lunes que quiere ver a Turquía comprometerse con ser “menos hostil con un aliado de la OTAN”, es decir, Grecia, el “compromiso de que continúe la tranquilidad que ha existido durante los últimos meses” y que no habrá “ningún uso de armas estadounidenses contra otro aliado de Estados Unidos en la OTAN”.
Las tensiones entre Atenas y Ankara se han disipado en los últimos meses, debido en parte al catastrófico terremoto de Turquía, en el que Grecia prestó asistencia. Los funcionarios estadounidenses instaron a ambas partes a mantener esa calma, dijo la fuente familiarizada.