(CNN) – Estados Unidos enviará municiones de racimo a Ucrania como parte de un nuevo paquete de ayuda militar, confirmó este viernes el asesor de seguridad nacional Jake Sullivan, luego de meses de debate dentro del Gobierno de Biden sobre si proporcionar a Kyiv las controvertidas armas que están prohibidas por más de 100 países, incluyendo aliados clave de EE.UU.
“No me voy a parar aquí y decir que es fácil”, dijo Sullivan a los periodistas. “Es una decisión difícil. Es una decisión que aplazamos. Es una decisión que requirió una mirada muy dura al daño potencial a los civiles. Y cuando juntamos todo eso, hubo una recomendación unánime del equipo de seguridad nacional, y el presidente Biden finalmente decidió, en consulta con aliados y socios y en consulta con miembros del Congreso, seguir adelante con esta estrategia”.
El presidente Joe Biden aprobó la transferencia de las municiones esta semana, dijeron funcionarios a CNN. CNN informó por primera vez la semana pasada que el gobierno estaba considerando seriamente la medida, ya que las fuerzas ucranianas están teniendo problemas para lograr importantes avances en su contraofensiva contra Rusia.
Las municiones serán compatibles con los obuses de 155 mm proporcionados por Estados Unidos, una pieza clave de artillería que permitió a Ucrania recuperar territorio durante el último año.
Las municiones de racimo dispersan “bombas” en grandes áreas que pueden no explotar al impactar por lo que representan un riesgo a largo plazo para cualquiera que se encuentre con ellas, similar a las minas terrestres. Más de 100 países, incluidos Reino Unido, Francia y Alemania, prohibieron las municiones de racimo en virtud de la Convención sobre Municiones de Racimo, pero EE.UU. y Ucrania no son signatarios de la prohibición.
El ministro de defensa alemán, Boris Pistorias, dijo este viernes que proporcionar las municiones a Ucrania “no es una opción” para Berlín porque es signataria de la convención. Pero se negó a opinar sobre la decisión de Estados Unidos de hacerlo. “No me corresponde a mí comentar sobre las acciones de aquellos países que no han firmado la convención (como) China, Rusia, Ucrania y EE.UU.”.
Biden anulará las restricciones legales impuestas por el Congreso a la exportación de municiones con una tasa de “falta” superior al uno por ciento: las municiones que Estados Unidos está dispuesto a proporcionar pueden tener una tasa de falla de hasta el 2,35 %, dijo el secretario de prensa del Pentágono, el brigadier general Patrick Ryder.
Una tasa de fallas más alta significa que bombas más pequeñas esparcidas por las municiones de racimo no explotan al impactar, lo que representa un riesgo para los civiles que pueden encontrarlas más adelante. Ryder dijo que los rusos han estado usando municiones de racimo con una tasa de fracaso de hasta el 40%.
Los funcionarios ucranianos han estado presionando a EE.UU. para que proporcione las municiones desde el año pasado, argumentando que esto daría más municiones para los sistemas de artillería y cohetes proporcionados por Occidente, y ayudaría a reducir la superioridad numérica de Rusia en artillería.
Biden se mostró reacio al principio, dijeron los funcionarios a CNN, dada la cantidad de países en todo el mundo que han prohibido las municiones.
Pero las condiciones cambiantes del campo de batalla dentro de Ucrania durante las últimas tres semanas llevaron a los funcionarios estadounidenses a darle una consideración seria y renovada al asunto, y el Pentágono recomendó a Biden que las municiones se proporcionen a Ucrania al menos de forma temporal hasta que las municiones que no sean de racimo puedan ser entregadas, dijeron las autoridades.
No está claro si la gran cantidad de municiones de artillería que los ucranianos han estado gastando día a día sería sostenible sin las municiones de racimo si la contraofensiva se prolonga, dijeron funcionarios y analistas militares. Biden finalmente estuvo de acuerdo con su evaluación.
El embajador de Rusia en Belarús, Boris Gryzlov, dijo que la decisión de Estados Unidos fue “un movimiento desesperado”.
“Como parte de la asistencia continua al régimen de Kyiv, Washington está considerando la posibilidad de enviar municiones de racimo a Ucrania. Se ha hablado de ello desde la primavera”, dijo Gryzlov a la agencia de noticias estatal rusa TASS este viernes.
“Ahora, los ‘halcones’ en Occidente se han dado cuenta de que la tan publicitada contraofensiva de las fuerzas armadas ucranianas no salió según lo planeado, por lo que están tratando a toda costa de darle al menos un poco de impulso. De hecho, es un movimiento desesperado”, dijo Gryzlov.
Radina Gigova de CNN contribuyó con este reportaje.