(CNN) –– El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dio un discurso a la nación este jueves en el que explicó por qué Ucrania e Israel necesitan la ayuda de su país en medio de las guerras que libran.
Biden relacionó los dos conflictos y dijo que “Hamas y Putin representan amenazas diferentes, pero tienen esto en común: ambos quieren aniquilar por completo a una democracia vecina, aniquilarla por completo”. Luego continuó: “No podemos permitir que la mezquina política partidista se interponga en el camino de nuestras responsabilidades como gran nación. No podemos y no dejaremos que terroristas como Hamas y tiranos como Putin ganen. Me niego a que eso ocurra”.
El mandatario también expuso lo que, según él, está en juego para el pueblo de EE.UU., al afirmar que las guerras son un imperativo de seguridad nacional y un momento crítico para el futuro del liderazgo estadounidense y de las democracias en todo el mundo. “Las alianzas estadounidenses son las que nos mantienen seguros en Estados Unidos. Los valores estadounidenses son los que nos convierten en una nación socia con la que se quiere trabajar”, afirmó. “Poner todo eso en riesgo —alejarnos de Ucrania, dar la espalda a Israel— simplemente no vale la pena”.
En esa línea, abogó por una “solución de dos Estados” como forma de resolver el conflicto entre Israel y los palestinos. “Por difícil que sea, no podemos renunciar a la paz. No podemos renunciar a una solución de dos Estados”, dijo Biden. “Israel y los palestinos merecen por igual vivir en seguridad, dignidad y paz”, completó.
Biden reafirma compromiso con los rehenes estadounidenses
Durante su discurso, Biden afirmó que la guerra en Israel es “un punto de inflexión en la historia”. En ese sentido, renovó su promesa de conseguir que los rehenes estadounidenses regresen a casa.
“Como dije a las familias de los estadounidenses cautivos por Hamas: estamos buscando todas las vías para traer a sus seres queridos a casa”, afirmó. “Como presidente, para mí no hay mayor prioridad que la seguridad de los estadounidenses retenidos como rehenes”.
Sobre la explosión en un hospital de Gaza esta semana, que según una evaluación estadounidense habría dejado entre 100 y 300 muertos, Biden reiteró que Israel “no es responsable”.
“Estoy desconsolado por la trágica pérdida de vidas palestinas, incluida la explosión en el hospital de Gaza, que no fue obra de Israel”, dijo el jueves por la noche desde la Oficina Oval. “Lloramos cada vida inocente perdida. No podemos ignorar la humanidad de palestinos inocentes que solo quieren vivir en paz y tener una oportunidad.”
La solicitud que la Casa Blanca enviará al Congreso para entregar más ayuda a Israel y Ucrania
El discurso desde la Oficina Oval, que se transmitió en horario estelar, ocurre un día antes de que la Casa Blanca solicite más de 100.000 millones de dólares al Congreso para entregar ayuda y recursos a Ucrania, Israel, Taiwán y la frontera de Estados Unidos con México. Biden dijo que presentaría una “solicitud presupuestaria urgente” para financiación suplementaria para Israel y Ucrania, entre otras prioridades de seguridad nacional.
“Mañana (miércoles) enviaré al Congreso una solicitud presupuestaria urgente para financiar las necesidades de seguridad nacional de Estados Unidos: las necesidades de apoyo a nuestros socios críticos, incluidos Israel y Ucrania. Es una inversión inteligente que pagará dividendos para la seguridad estadounidense durante generaciones”, sostuvo.
La Casa Blanca cree que sigue habiendo un amplio apoyo bipartidista en el Congreso para el paquete, dijeron a CNN tres funcionarios de la administración, incluso cuando algunos preocupados por el tema fiscal se resisten a entregar más ayuda y el liderazgo en la Cámara de Representantes todavía está en el limbo. Aun así, persisten dudas reales sobre el camino que seguirá ese paquete en el Congreso, con un vacío de liderazgo en la Cámara y la consternación por los niveles de gasto federal que han puesto en duda la capacidad del gobierno para financiarse más allá de mediados de noviembre.
En agosto, el Gobierno de Biden entregó su última solicitud de financiación suplementaria, que resume peticiones únicas más allá de los programas gubernamentales tradicionales. La propuesta buscaba 24.100 millones de dólares para ayudar a Ucrania hasta el final del año, pero el Congreso no logró aprobarla durante un proceso para dar luz verde a la financiación federal a corto plazo.
¿Que dice la opinión pública sobre el apoyo?
La opinión pública respecto de la ayuda estadounidense está dividida.
En una encuesta reciente de CNN, casi todos los encuestados simpatizaban con el pueblo israelí tras los ataques que lanzó Hamas el 7 de octubre, pero no hubo un consenso claro sobre el nivel adecuado de participación de Estados Unidos. Un tercio (35%) dijo que Estados Unidos está proporcionando la cantidad adecuada de asistencia, y otro 36% no estaba seguro de si el nivel de asistencia estadounidense es apropiado. Estados Unidos ha entregado durante mucho tiempo asistencia de seguridad a Israel, que recibe aproximadamente 4.000 millones de dólares al año en virtud de un memorándum de entendimiento de 10 años. La nueva solicitud proporcionaría miles de millones más.
En contraste, el apoyo para sostener la ayuda a Ucrania ha disminuido significativamente desde la invasión no provocada de Rusia en febrero de 2022. Una encuesta de CNN en agosto encontró que el 55% de los encuestados dijo que el Congreso no debería aprobar más fondos para ayudar a Ucrania. La división partidista también se ha profundizado: casi tres cuartas partes de los republicanos se opusieron a una mayor financiación para Ucrania, mientras que el 62% de los demócratas la apoyaron.
Jake Tapper, Jennifer Hansler, Alex Marquardt y MJ Lee contribuyeron a este reporte