(CNN Español) –– El exvicepresidente de Ecuador Jorge Glas fue hospitalizado este lunes en Guayaquil, días después de su arresto en la embajada de Quito en México, informaron autoridades penitenciarias.
Debido a una “posible descompensación por su negativa a consumir los alimentos provistos”, Glas fue trasladado al Hospital Naval de Guayaquil aproximadamente a las 12:45 p.m., informó el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI).
La entidad agregó que el exvicepresidente se encuentra “estable” y que permanecerá “en observación durante las próximas horas, previo retorno al Centro de Privación de Libertad”.
CNN intenta obtener comentarios de los abogados del exvicepresidente.
Glas se encontraba recluido en la cárcel de máxima seguridad de La Roca, en Guayaquil, desde este sábado tras su captura dentro de la embajada de México.
La noticia sobre la hospitalización de Glas se conoció luego de que el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, defendiera este lunes la polémica operación policial del viernes que condujo al arresto de Glas.
Glas, acusado por las autoridades ecuatorianas de malversar fondos gubernamentales destinados a ayudar a la reconstrucción después del devastador terremoto de 2016, buscaba asilo en la embajada cuando se realizó el allanamiento. La defensa del exvicepresidente ha negado las acusaciones en su contra y dice que él es objeto de persecución política.
México rechazó tajantemente la operación policial, al condenarla como una “flagrante violación del derecho internacional” y de su soberanía, por lo que presentó un caso contra Ecuador ante la Corte Internacional de Justicia. También rompió relaciones diplomáticas con Ecuador.
Noboa defiende el operativo
En una carta abierta publicada en X, antes Twitter, el presidente Noboa defendió el lunes el operativo policial en la embajada de México, diciendo que Ecuador no podía correr el “riesgo inminente de fuga (de Glas)”.
“Mi obligación es cumplir con los dictámenes de la justicia y no podíamos permitir que se asile a delincuentes condenados, involucrados en crímenes muy graves”, escribió.
“He tomado decisiones excepcionales para proteger la seguridad nacional, el Estado de Derecho y la dignidad de un pueblo que rechaza cualquier tipo de impunidad para criminales, delincuentes, corruptos o narcoterroristas”, señaló Noboa.
Y agregó que estaría dispuesto a “resolver cualquier diferencia” con México al respecto.
“Al pueblo hermano de México quiero expresarle que siempre estaré dispuesto a resolver cualquier diferencia, pero que la justicia no se negocia, y que nunca protegeremos a delincuentes que han dañado a los mexicanos”, escribió.
México no es el único país de la región que ha criticado las acciones de Ecuador.
Tras el arresto de Glas, una serie de países latinoamericanos ––incluidos los gigantes regionales Brasil y Argentina–– apoyaron a México, mientras que Nicaragua se unió a él para romper relaciones diplomáticas.
Varios señalaron una violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, el tratado internacional que define un marco para las relaciones entre países. Algunos también señalaron una violación del derecho de asilo de Glas.
El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, también expresó alarma por la operación policial.
Las acusaciones contra Glas
El exvicepresidente de Ecuador Jorge Glas fue detenido el viernes 5 de abril en la embajada de México en Quito, donde había acudido en calidad de “huésped” y solicitado asilo en diciembre de 2023, alegando “persecución política” por parte de las autoridades judiciales de su país, según dijo su abogado. La Fiscalía de Ecuador acusa del delito de peculado.
Antes de su detención, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo que su Gobierno buscaría que Glas ingrese a su territorio. “Porque nos lo está pidiendo y nosotros consideramos sagrado el derecho de asilo”, dijo AMLO. Tras el arresto, el mandatario de México rompió relaciones diplomáticas con Ecuador.
Glas, quien sirvió bajo los mandatos de Rafael Correa y Lenín Moreno, fue condenado por los delitos de asociación ilícita (2017) y cohecho agravado (2020) en conexión con la trama Odebrecht, por los que fue sentenciado a seis y ocho años de prisión respectivamente. En noviembre de 2022, Glas salió de prisión después de cuatro años y medio de cárcel tras un recurso de hábeas corpus que presentó su abogado y que le otorgó la libertad provisional por cumplimiento parcial de su condena.
Con información de Ana María Cañizares.