(CNN) – El presidente Donald Trump, que se despertó en casa este martes después de pasar un fin de semana en el hospital, no muestra señales de que su grave contagio de coronavirus haya cambiado la percepción que tiene de una enfermedad que ha matado a más de 210.000 estadounidenses.
Tampoco dio muestras de un nuevo entendimiento sobre la presión económica de los estadounidenses. Justamente, en la tarde de este martes anunció que había ordenado a su equipo cesar todas las negociaciones para un nuevo paquete de estímulo. La medida hizo que el mercado de valores cayera en picada. Además desconcertó a los republicanos de alto nivel, que vieron pocas ventajas en descartar públicamente las conversaciones.
La imagen que surgió fue la de un presidente que todavía niega profundamente la salud. Adicionalmente, las realidades económicas de una crisis de meses.
Fue una estrategia política inusual para un candidato que recibe bajas calificaciones en su manejo de la pandemia. Y que ha tenido problemas para demostrar empatía por los millones de estadounidenses afectados.
Podría hablar a la nación
Por el contrario, Trump señaló que estaba ansioso por regresar a la campaña electoral. Esto, a pesar de que el virus está arrasando con su personal. Mientras también medita sobre dar un discurso a la nación, tal vez incluso a finales del día.
“Anticipo que tendrán noticias suyas en algún momento de hoy”, dijo la directora de comunicaciones Alyssa Farah, una de las pocas asistentes que acudió a trabajar presencialmente este martes, a los periodistas en la Casa Blanca.
Trump estaba preparado para grabar un video en la tarde del martes desde su nuevo lugar de trabajo en la Casa Blanca, probablemente la Sala Diplomática, pero no tiene planes de pronunciar un discurso en vivo, dijeron dos funcionarios familiarizados con el plan.
La atmósfera dentro de la Casa Blanca fue descrita por un funcionario como “caótica”, en gran parte porque muchas personas trabajan de forma remota y el presidente toma las decisiones.
En momentos en que el Ala Oeste está en gran parte vacía porque el personal sigue dando positivo, Trump permanece aislado en la residencia de la Casa Blanca. Allí se instalaron oficinas temporales junto a la sala médica del sótano del edificio.
Trump está centrado en la campaña
Tal como hizo dentro del Centro Médico Militar Nacional Walter Reed, Trump se ha centrado decididamente en la campaña presidencial, que culmina en menos de un mes. Recibió malas noticias el martes cuando una encuesta de CNN realizada por SSRS mostró que estaba detrás de su rival Joe Biden por 16 puntos, el margen más amplio de la contienda hasta ahora.
“¡¡¡Pronto volveré a la campaña!!! Las Fake News (noticias falsas) solo muestran las Fake Polls (encuestas falsas)”, escribió Trump después. No quedó claro cómo sería el regreso de Trump a la campaña. Los efectos persistentes del covid-19 pueden dejar a los pacientes exhaustos durante meses y no está claro tampoco cuánto entusiasmo queda por las grandes manifestaciones sin mascarillas después de que Trump y su círculo íntimo contrajeron el virus.
Horas después, el mandatario ordenó a sus negociadores suspender las conversaciones sobre un nuevo paquete de estímulo, que había avanzado lentamente durante las últimas semanas.
Trump ordena suspender negociaciones de paquete de estímulo
“He dado instrucciones a mis representantes para que dejen de negociar hasta luego de las elecciones, cuando, inmediatamente después de que gane, aprobaremos un importante proyecto de ley de estímulo que se centra en los estadounidenses trabajadores y las pequeñas empresas”, escribió Trump.
Trump tuiteó este mensaje poco después de una conferencia telefónica privada con el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, el líder republicano de la Cámara, Kevin McCarthy, y el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, el principal negociador del gobierno.
La decisión de terminar las conversaciones es un gran golpe para los estadounidenses que aún luchan con las consecuencias de una pandemia. También pone en peligro una recuperación económica que durante meses fue impulsada por el estímulo inicial de 2,2 billones de dólares.
Los médicos continuaron monitoreando los signos vitales de Trump este martes y se esperaba que recibiera una dosis intravenosa del antiviral remdesivir en la noche. Sus doctores revelaron durante el fin de semana que los niveles de oxígeno de Trump bajaron de manera preocupante y que había requerido oxígeno suplementario.
El presidente se reunió con un “equipo de médicos” en la residencia en la mañana de este martes después de una “primera noche de descanso en casa”, sostuvo en una declaración su médico, el Dr. Sean Conley. “Los signos vitales y el examen físico permanecen estables, con un nivel de saturación de oxígeno ambulatorio del 95-97%”, explicó.
“En general, continúa extremadamente bien”, agregó Conley. “Proporcionaré actualizaciones a medida que sepamos más”, aseguró.
Martes sin reunión informativa sobre la salud del presidente
A diferencia de los tres días anteriores, no se programaron sesiones informativas de Conley el martes. En repetidas ocasiones el médico se ha negado a responder preguntas sobre cuándo Trump dio negativo por última vez. También sobre cuán alta fue su fiebre o sobre los resultados de su tomografía de pulmón, sobre los que solo dijo que eran “esperados”.
Trump parecía estar respirando con cierta dificultad en la noche del lunes después de que subió los escalones del Pórtico Sur para posar para las cámaras mientras saludaba a su helicóptero Marine One. Un funcionario de la Casa Blanca y una fuente separada cercana a la Casa Blanca dijeron que persisten los preocupaciones sobre la salud, incluso después de que Trump regresó a casa.
“Es posible que aún no esté completamente fuera de peligro”, dijo Conley a los periodistas en Walter Reed el lunes.
Sin embargo, el presidente ha estado activo en Twitter, plataforma en la que declaró que asistirá al debate presidencial de la próxima semana en Miami. Esto a pesar de su pronóstico aún incierto y del potencial de que todavía pueda ser contagioso para entonces.
“¡SINTIÉNDOME GENIAL!”, escribió en otro tuit.
Trump vuelve a comprar al coronavirus con la gripe
Y como hizo al comienzo de la pandemia, Trump comparó el coronavirus con la gripe, minimizó sus riesgos y sugirió que el país tendría que aprender a vivir con ellos.
“Muchas personas cada año, a veces más de 100.000, y a pesar de la vacuna, mueren a causa de la gripe”, escribió, haciendo eco de las afirmaciones que pronunció la primavera pasada y que fueron rechazadas casi de inmediato por expertos en salud, quienes dicen que la influenza estacional es menos mortal que el coronavirus.
“¿Vamos a cerrar nuestro país?” añadió. “No, hemos aprendido a vivir con eso, al igual que estamos aprendiendo a vivir con covid, en la mayoría de las poblaciones ¡¡¡mucho menos letal!!!”, dijo.
Fue un mensaje impactante para un hombre que, 48 horas antes, declaró que ahora “comprendía” el virus después de contraerlo y sufrir algunos de sus síntomas más graves.
El tuit proporcionó una idea de cuál podría ser el mensaje de Trump si decidiera dirigirse a la nación. na idea que se está considerando seriamente, según un funcionario de la Casa Blanca.
“Ciertamente quiere dirigirse a la nación en algún momento. Pero en términos del momento para eso, ciertamente no hay planes a partir de hoy, pero creo que siempre se están moviendo rápido, así que si eso cambia, nos aseguraremos de que lo sepan”, dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, durante una aparición en Fox Business. McEnany llamó a la cadena desde su casa, donde está convaleciente después de su diagnóstico de coronavirus.
Casos positivos en el entorno del presidente
McEnany forma parte de los más de 12 de miembros del círculo de Trump que dieron positivo al coronavirus. Esto incluye a su esposa, asesor principal, gerente de campaña, exconsejero, asistente personal, dos asistentes de prensa, tres senadores republicanos y, durante el fin de semana, un asistente militar con acceso directo al presidente.
El principal general de EE.UU., el general Mark Milley, y varios miembros del Estado Mayor Conjunto también estuvieron en cuarentena después de que un alto funcionario de la Guardia Costera dio positivo por coronavirus, dijeron a CNN varios funcionarios de defensa de Estados Unidos.
Trump no ha ofrecido ninguna indicación de que haya aprendido algo de la experiencia. Cuando regresó a la Casa Blanca el lunes, posó para la sesión fotográfica después de quitarse la máscara.
En un video grabado después, dijo que la enfermedad no era motivo de preocupación.
“No le tengas miedo”, dijo Trump sobre el coronavirus. “Lo vas a superar. Tenemos el mejor equipo médico, tenemos las mejores medicinas”, agregó.
El mensaje fue mal recibido por los expertos médicos e incluso por algunos de los aliados de Trump. Estos se preguntaron por qué seguía minimizando un virus que requirió que lo trasladaran en avión desde la Casa Blanca a un hospital.
“Creo que bajó la guardia, y creo que en su deseo de tratar de demostrar que de alguna manera estamos saliendo de esto y que el peligro no está todavía con nosotros, creo que se apresuró”, dijo el senador John Cornyn, republicano por Texas, a la junta editorial del Houston Chronicle.
Jim Acosta, Barbara Starr, Joe Johns, Betsy Klein, Manu Raju, Peter Morris y Kaitlan Collins, todos de CNN, contribuyeron a este informe.