El gobierno de Georgia promulgó este viernes una ley de inmigración que endurece el trato hacia los migrantes indocumentados, al permitir que la policía local interrogue a cualquier persona sospechosa de encontrarse en el estado de manera ilegal.
La legislación HB 87 fue firmada por el gobernador republicano Nathan Deal, casi un mes después de que fuera aprobada por el Congreso estatal. La medida entrará en vigor el próximo 1 de julio.
Similar a la polémica SB 1070 de Arizona —promulgada en abril de 2010 pero bloqueada en julio en algunas de sus partes por una jueza federal—, la ley de Georgia también penaliza a quienes alberguen o transporten inmigrantes indocumentados y obliga a los empleadores a constatar el estatus migratorio de sus trabajadores con el sistema E-Verify.
Organizaciones a favor de los migrantes han criticado la norma, a la que consideran discriminatoria. Afirman que al permitir a los agentes policiales interrogar a las personas con base en la “causa probable” de que sean inmigrantes indocumentados, se favorece la creación de perfiles raciales.
El gobierno de México, que ya había manifestado preocupación por la aprobación de la norma, lamentó la promulgación de una ley “que criminaliza la migración y abre espacios para la posible aplicación indebida de la ley por parte de autoridades locales”.
“Su entrada en vigor (…) afecta potencialmente los derechos humanos y civiles de los mexicanos que habitan o visitan esa entidad”, indicó la Cancillería mexicana a través de un comunicado.
Georgia, en el este de Estados Unidos, es la sexta entidad del país con mayor cantidad de inmigrantes indocumentados: 460,000, de acuerdo con cifras del Departamento de Seguridad Interior. El Censo de 2010, además, reveló que 8.8% de su población es de origen hispano.
Las autoridades mexicanas sostienen que los legisladores que apoyaron la ley y el gobernador “ignoraron las numerosas contribuciones de la comunidad inmigrante a la economía y la sociedad de ese estado, así como la importancia que México tiene como tercer mercado para sus exportaciones”.
Anunciaron que, mediante su red consular, ejecutarán una estrategia para proteger a los mexicanos que puedan resultar afectados con la aplicación de la norma.
La promulgación de la ley se produce tres días después de que un juez federal suspendiera temporalmente la nueva legislación migratoria de Utah, con disposiciones parecidas a la de Georgia. El juez Clark Waddopus falló a favor de las organizaciones civiles que la consideran discriminatoria.
Junto con Utah y Georgia, al menos otros siete estados de Estados Unidos promueven legislaciones contra la inmigración ilegal.