(CNN) - La presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner fue dada de alta hoy, tras someterse a una cirugía donde la fue extirpada la glándula tiroides y,  según sus médicos, la mandataria no tenía cáncer como se dijo días atrás.

Según el parte médico, un nuevo estudio modificó el diagnóstico inicial del padecimiento de Fernández de Kirchner y asegura que no se trataba de células cancerígenas sino de “adenomas foliculares”.

La mandataria regresó a la quinta de Olivos, -casa presidencial- donde continuará su recuperación tras la cirugía de tiroides practicada en el Hospital Austral.

La Unidad Médica presidencial emitió un comunicado en el que manifiesta su “satisfacción” por los resultados del estudio definitivo, encabezado por el doctor Pedro Saco, jefe del departamento de cirugía del Hospital Austral, donde “se constató la presencia de nódulos de ambos lados de la glándula tiroides” de la presidenta Cristina Fernández, pero “se descartó la presencia de células cancerígenas modificando el diagnóstico inicial de la punción”.

El favorable diagnóstico llevó al equipo médico a considerar que “el tratamiento quirúrgico realizado es suficiente” y “no es necesaria la administración de yodo radioactivo”.

Como parte del comunicado, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y su familia agradecieron “a todas las personas, ciudadanas/os, militantes, personalidades nacionales e internacionales por las muestras de afecto y la preocupación por su salud”.