(CNN) – Las máquinas expendedoras en la Universidad de Pensilvania van más allá de la comida chatarra y están entrando en el mundo de la anticoncepción.
La Universidad de Shippensburg en Pensilvania ofrece la pastilla del día después “Plan B One Step” en el Centro de Salud Etter de la institución, según dijo Peter Gigliotti, Director Ejecutivo de Comunicaciones y Marketing de la Universidad.
De acuerdo a Gigliotti, la universidad comenzó a ofrecer “Plan B” luego de un sondeo en donde el 85% de los estudiantes estaban de acuerdo con la medida.
La máquina dispensadora está en una habitación privada en el Centro de Salud y los estudiantes acceden solamente después de anotarse en el mostrador principal y recibir la autorización para acceder a la zona de tratamiento, dice Gigliotti.
“Plan B” es una medida de contracepción de emergencia que puede ser usada para prevenir un embarazo si es utilizada dentro de las 72 horas de haber tenido relaciones sexuales sin protección, de acuerdo a la Administración de Drogas y Alimentos de los EE.UU. (FDA por su sigla en inglés). Es, también, un medicamento disponible sin prescripción médica para mujeres mayores de 17 años.
“La máquina es usada por una cuestión de privacidad, si es que un estudiante quiere acceder a ella, dijo el VP de asuntos estudiantiles Roger Serr a la afiliada de CNN, WHP.
Según WHP una dosis le cuesta a un estudiante 25 dólares, el mismo importe que paga la universidad por cada pastilla. La universidad vende por año entre 350 a 400 dosis.
“En esta escuela (Shippensburg) uno puede obtener la pastilla del día después de la misma manera que se compra una gaseosa,” dice Jeanne Monahan, directora del Centro por la Dignidad Humana.
Una encuesta realizada por la Asociación Estadounidense de Salud Universitaria (ACHA por su sigla en inglés) encontró que 83% de las escuelas consultadas proveen o venden contracepción de emergencia. Mientras que este sondeo se realizó en 174 instituciones, el Dr. Davis Smith, miembro de
ACHA, cree que la muestra es representativa de las universidades en todo el país.
A pesar de que Smith, un médico de la Universidad Wesleyan, no ha escuchado de otro campus que venda estas pastillas contraconceptivas a través de una máquina expendedora, no ve esto como un problema. “Sabemos que Plan B es seguro y efectivo, así que no es diferente del ibuprofeno u otra medicación que está disponible en una maquina expendedora,” finaliza.
Los posibles efectos secundarios conocidos de la pastilla Plan B incluyen náusea, dolor del bajo abdomen, fatiga, dolor de cabeza y mareos.