Por Piers Edwards
(CNN) — Es posible que sea uno de los rostros más famosos del planeta y que gane más de 46 millones de dólares al año, según la revista France Football, sin embargo, David Beckham reconoce que no lo tiene todo.
En una entrevista con CNN, el mediocampista del Paris-Saint Germain habló de las angustias que padece a diario mientras vive en Francia.
Para el excapitán de la selección inglesa, quien se está preparando para el encuentro de cuartos de final de la Champions League contra el Barcelona, es difícil estar lejos de su esposa Victoria y de sus cuatro hijos, quienes actualmente viven en Londres.
Puede estar viviendo en uno de los hoteles más elegantes de París: ocupa una suite del hotel Le Bristol que cuenta con baños de mármol, uno de los mejores chefs del mundo y cuesta miles de dólares por noche, sin embargo, Beckham dice que paga un precio aún más alto por estar en la capital de Francia.
“Es un sacrificio que tengo que hacer como padre y como esposo… estar lejos de mi familia”, dijo a CNN.
“Es por poco tiempo, pero es difícil estar lejos de los niños todos los días. Sin embargo, ellos lo entienden. Entienden que papá trabaja duro”.
Beckham dice que su hijo mayor, Brooklyn, quien tiene 14 años, también empieza a entender las limitaciones que conlleva el tener como padre a una de las mayores celebridades del mundo.
“El mayor está en una edad en la que quiere hacer cosas e ir a ciertos lugares… y tenemos que detenerlo”, dijo el jugador que fue designado recientemente como embajador del futbol de China.
“Tienes que explicarle que hay cosas que no puede hacer. Sin embargo, para ser honesto, dejamos que nuestros hijos hagan el 99% de las cosas que quieren hacer porque queremos que lleven una vida normal”.
La exestrella del Manchester United y del Real Madrid se unió al equipo francés en enero, aunque el contrato original era solo por cinco meses, el presidente del PSG, Nasser al Khelafi, dijo el lunes al diario francés L’Equipe que le gustaría conservar los servicios de Beckham para la siguiente temporada.
El técnico italiano del equipo, Carlo Ancelotti, también expresó su deseo de retener a Beckham, quien viaja regularmente a su ciudad natal para pasar tiempo con sus hijos, que asisten a la escuela en la capital de Inglaterra.
Esas propuestas podrían dejar a Beckham ante una difícil decisión cuando su contrato venza en mayo; su esposa desea volver a establecerse en Londres después de casi una década de estancias en España y en Estados Unidos —cuando Beckham jugó para el Galaxy de Los Ángeles— y el futbolista dijo que no jugaría para ningún otro equipo inglés excepto el Manchester United, así que por cercanía, París podría ser su mejor opción.
Además, no se puede negar que el ganador de la Champions League de 1999 anhela regresar a los reflectores de la mejor competencia del futbol europeo en el ocaso de su carrera.
“Fue un honor que me pidieran jugar aquí y estaba emocionado por ello. En el equipo tienen grandes planes“, dijo el hombre que se ha presentado en seis ocasiones con el PSG, aunque en dos de ellos fue suplente.
“París es una ciudad asombrosa, una cultura asombrosa. El club no es muy antiguo y el éxito que quieren lograr es posible”.
El PSG se fundó en 1970 y se enfrenta a una de las noches más importantes de su historia ya que jugará el martes como local ante el Barcelona, equipo cuatro veces campeón de la Champions y que ganó su última Champions League en 2011.
En vista de que Lionel Messi insiste en demostrar que es el mejor jugador de la historia y el técnico, Tito Vilanova, ha vuelto tras viajar a Nueva York a recibir un tratamiento contra el cáncer, el derrotar al Barcelona en la Champions League sería uno de los mayores logros para un equipo que nunca se ha coronado como rey de Europa.
“Sin duda son uno de los mejores equipos de la historia”, dijo Beckham, quien jugó para el archirrival del Barça, el Real Madrid, entre 2003 y 2007.
“Tienen algunos de los mejores jugadores tanto individual como colectivamente y creo que eso es lo que los hace el equipo que son. No solo se trata de Messi o de Xavi, sino que tienen una unidad que funciona muy bien, por eso han sido tan exitosos a lo largo de los años. Tienen al mejor jugador del mundo en su equipo (Messi), tienen jugadores comprometidos y eso los vuelve un equipo especial. Es una gran prueba para nosotros, es un partido importante para este club y para esta ciudad”.
Hasta ahora, el trofeo europeo más importante que ha ganado el PSG es la ya extinta Copa Winners, que los parisinos obtuvieron en 1996, sin embargo, los dueños cataríes del equipo —que invirtieron una fuerte suma en la contratación de Zlatan Ibrahimovic, Lucas Moura y Thiago Silva, por mencionar solo a algunos jugadores— esperan que sus enormes inversiones cambien todo eso.
“El ser parte de un equipo que mira hacia el futuro y busca tener un éxito mayor al que han tenido en los últimos años, era algo que quería hacer”, dijo Beckham al referirse a la decisión de unirse al PSG, equipo que tiene solo dos títulos de liga (1986 y 1994).
Además, el hombre que ha jugado tres mundiales con la selección inglesa no ha descartado aumentar la cantidad de 115 partidos jugados con la selección, récord que ningún otro jugador de la historia del equipo campeón del mundial de 1966 puede romper.
“Una de las razones por las que no me he retirado del equipo inglés es que si hay otra oportunidad para volver jugar con ellos, estaré disponible”, dijo.
“Si se presentara la oportunidad de jugar de nuevo para mi país, nunca la rechazaría. Tengo casi 38 años, así que hay pocas probabilidades, pero uno nunca sabe”, dijo sonriendo el hombre que se acerca a la mediana edad pero cuyo sueño de la infancia sigue firme.