(CNN) — El expresidente de Sudáfrica Nelson Mandela permanece en situación crítica en un hospital de Pretoria, donde está internado desde hace más de dos semanas, mientras que las noticias intentan calmar los nervios de una nación que vigila su estado de salud.
El exmandatario ha estado hospitalizado en Pretoria desde el 8 de junio por una infección pulmonar recurrente. Anteriormente, las autoridades habían descrito su condición como “grave pero estable”. Pero el fin de semana la salud de Mandela empeoró y fue diagnosticado en estado crítico, según la oficina del presidente de Sudáfrica.
Hasta este lunes no había ninguna mejoría.
“El expresidente Mandela permanece en condición crítica”, dijo este lunes el presidente Zuma. “Los médicos hacen todo lo posible para garantizar su bienestar y comodidad”. Rechazó hacer más comentarios.
El expresidente de 94 años se ha vuelto cada vez más frágil en los últimos años y no ha aparecido en público desde que Sudáfrica fue sede de la Copa Mundial de futbol en 2010.
Fuera del hospital, un muro de seguridad se encuentra tapizado de tarjetas de buenos deseos, globos, flores, tarjetas y dibujos, informó la Asociación de Prensa Sudafricana.
Listo para el reino espiritual
Para la familia de Mandela, estos son tiempos muy personales, momentos valiosos mientras el final se acerca.
“Todo lo que hacemos cada día es tomar un momento y rezar al buen Dios”, dijo Makaziwe Mandela a Robyn Curnow de CNN.
“Creo que él está en paz”, dijo Makaziwe, hija de Evelyn, primera esposa de Mandela, y que nació en 1953.
“Todo lo que pido como hija es que la transición sea suave… Él está en paz consigo mismo. Él ha dado tanto al mundo. Creo que él está en paz”.
Dentro y fuera del hospital
El héroe anti-apartheid ha entrado y salido del hospital en los últimos años.
Su historial de problemas pulmonares se remonta a cuando era un preso político en la isla de Robben durante la época del apartheid, y ha luchado contra las infecciones respiratorias.
Considerado como el padre fundador de la democracia en Sudáfrica, Mandela se convirtió en una figura internacional, mientras que soportó 27 años en prisión por luchar contra el apartheid, el sistema de segregación racial del país.
El Congreso Nacional Africano de Sudáfrica señaló “con preocupación” el cambió en el estado de salud de Mandela. “El Congreso Nacional Africano se une a la presidencia en un llamado para solidarizarnos con el presidente Mandela, su familia y su equipo médico en nuestros pensamientos y oraciones durante este difícil momento”, dijo este domingo.
Un premio Nobel
En 1993, Mandela y el entonces presidente de Sudáfrica, F. W. de Klerk ganaron el Premio Nobel de la Paz.
El icónico líder fue elegido como el primer presidente negro del país un año más tarde, sirviendo solamente un término, como lo había prometido.
A pesar de que ha dejado las apariciones públicas, sigue siendo popular y es considerado un héroe de la democracia en la nación. El año pasado, Sudáfrica lanzó una nueva serie de billetes de banco con la imagen de un Mandela sonriente.
El impacto de Mandela se extiende mucho más allá de las fronteras de Sudáfrica. Después de dejar el cargo, medió conflictos en África y el Medio Oriente.
El deterioro de su salud generó expresiones de interés en todo el mundo.
“Hemos visto los últimos informes del gobierno sudafricano que el expresidente Mandela se encuentra en estado crítico”, dijo en un comunicado Caitlin Hayden, una portavoz del Consejo Nacional de Seguridad de EU. “Nuestros pensamientos y oraciones están con él, su familia y el pueblo de Sudáfrica”.
Faith Karimi, Kim Norgaard y Dan Lothian contribuyeron con este reporte.