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(CNN) – James “Jimmie” Horak Jr. y su alumno fueron los últimos en saltar del avión que volaba sobre el sur de Mississippi. Una cámara capturó el momento en el que el veterano instructor abrió su paracaídas, transformando una rápida caída libre en un descenso suave y lento.

Pero algo trágico ocurrió en los segundos finales del descenso. Horak, de 56 años, y su alumno nunca aterrizaron en el aeropuerto en el que debían hacerlo.

El cuerpo de Horak fue hallado lleno de lodo en un área pantanosa a aproximadamente 1,5 kilómetros del aeropuerto de Lumberton, según informó Danny Rigel, alguacil del condado de Lamar.

El alumno, un hombre de 26 años cuyo nombre no fue divulgado, estaba en condición crítica con huesos rotos y heridas en la cabeza.

Se desconoce qué falló durante la caída. Pero, según la evidencia, Horak cortó el paracaídas principal y desplegó el auxiliar, dijo Leanne Igo, dueña de Gold Coast Skydivers.

“Solo sabemos que el principal fue cortado y que se utilizó el de reserva”, agregó Igo. “Todo lo demás es pura especulación”.

Rigel aseguró que el resto de los paracaidistas notó que existió algún problema en el equipamiento, posiblemente vinculado a las cuerdas.

Cuando el resto de los estudiantes aterrizó en el aeropuerto y descubrió que la pareja no había llegado, comenzó una búsqueda que pronto incluyó a 30 paracaidistas a pie, un avión, un helicóptero y autoridades locales, explicó Igo.

El hijo de un hacendado local eventualmente halló a Horak y al estudiante, que rápidamente fue llevado en helicóptero a un hospital cercano, dijo Rigel.

La Administración Federal de Aviación inspeccionará el paracaídas para determinar las posibles causas del accidente, informó una portavoz del organismo.

Un entusiasta del paracaidismo desde los años 70, Horak sirvió en las Fuerzas Especiales del Ejército, era piloto y también trabajó en la Administración de Veteranos, indicó Igo.

“Muy profesional, de un tono suave, de buen corazón, muy trabajador, una persona genuina y muy experimentada”, dijo la mujer sobre Horak. “Tenía una bella esposa y tres hijos y todos lo apreciaban mucho. Amaba lo que hacía”, añadió.