(CNN Español) – Las relaciones entre Argentina y Uruguay vuelven a alcanzar un punto de tensión luego de que el presidente de Uruguay, José Mujica, anunció el incremento en la producción de una planta de celulosa que está al borde del río Uruguay.

En respuesta, el canciller argentino, Héctor Timerman, confirmó que su país acudirá a La Haya para demandar a su vecino por daños al medio ambiente y riesgo a la salud.

Mujica autorizó temporalmente que la planta de UPM (antes Botnia) incremente su producción en cien mil toneladas, un tercio de lo que había solicitado anteriormente la empresa, que anualmente produce un millón de toneladas.

En Gualeguaychú, la ciudad argentina más cercana al río, existe preocupación de que el aumento de producción sobrepase los límites de contaminación permitidos.

El jefe de la diplomacia argentina calificó la determinación del país vecino de apresurada y dijo que viola la soberanía ambiental y los tratados vigentes entre ambas naciones.

En 2010 el tribunal de La Haya sostuvo que no había evidencias de que la planta sobrepasara el límite de contaminación permitido, pero dictaminó que Uruguay debió haber consultado a Argentina antes de construir la fábrica.