Por Catherine E. Shoichet
(CNN) — Unos días después que el papa Francisco criticó el capitalismo, los legisladores argentinos están considerando una nueva manera de honrarlo: poner su cara en una moneda.
La propuesta de crear una moneda conmemorativa en homenaje al primer Papa originario de América Latina podría debatirse este jueves en la Cámara baja de Argentina, dijo el diputado Óscar Cachi Martínez en una publicación en su página oficial de Facebook.
Martínez propuso la medida en abril y obtuvo la aprobación de los comités del Congreso a principios de este mes.
El objetivo de las monedas, de acuerdo con el texto de la iniciativa, es “conmemorar un acontecimiento de dimensiones mundiales, sirvan en nuestro presente y a las futuras generaciones para recordar el Fausto hecho de la historia de la humanidad, en el que el principal actor es argentino”.
Debajo de la cara del Papa, en la moneda se lee: “Homenaje de los Pueblos de Argentina al papa Francisco”.
Fieles católicos en América Latina celebraron la elección del papa Francisco a principios de este año. A pesar de que cerca de 480 millones de los 1.200 millones de católicos del mundo viven en la región, desde hace siglos el principal puesto de la Iglesia había estado en manos de europeos.
Eso cambió con el anuncio de que el entonces cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio, quien se desempeñó como arzobispo de Buenos Aires, se convertiría en el nuevo pontífice.
Muchos argentinos sintieron alegría. Pero la noticia fue recibida con una respuesta más tibia por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien envió una carta con una seca felicitación que no mencionó que Francisco fue el primer Papa de Argentina y el Hemisferio Occidental.
Varios años antes, el gobierno de Fernández había tenido desencuentros con Bergoglio en una guerra de declaraciones por una notoria ley de matrimonio entre personas del mismo sexo respaldada desde la presidencia argentina.
Pero desde que fue elegido en marzo, Francisco ha sido noticia por denunciar las injusticias del capitalismo moderno, abrazando a los pobres y a las personas con discapacidad y ha tratado el tema de la homosexualidad.
Al mismo tiempo, el pontífice de 77 años, ha tratado de despertar un espíritu de alegría y compasión en la Iglesia, reprendiendo a los católicos “amargados” que persiguen a los pecadores.
Martínez dice que no hay duda de que el Papa está dejando su marca.
“A este argentino que por ser buen pastor de su rebaño, especialmente de aquellos que más necesitan, todos le debemos un homenaje, un gran homenaje”, escribió Martínez.
“Creemos que la forma de ser, el carisma y la humildad del papa Francisco han logrado revivir la simpatía mundial por la Iglesia Católica”, dijo.
Daniel Burke colaboró en este reporte