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Por Holly Yan y Mariano Castillo

(CNN) — Un día después de asegurar a sus anfitriones japoneses que presionaría a China sobre el espacio aéreo en disputa, el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, llegó a la capital Beijing para reunirse con los líderes chinos en medio del clima de tensión.

La visita ocurre dos semanas después de que la autoridades chinas reclamaron una gran franja de espacio aéreo sobre el Mar de China Oriental. Esa declaración causó una guerra de declaraciones entre los gobiernos, así como las disputas sobre los vuelos de aviones militares de EU, China, Japón y Corea del Sur.
“Estados Unidos está profundamente preocupado por el intento de cambiar unilateralmente el statu quo en el Mar de China Oriental”, dijo Biden este martes en una conferencia de prensa junto con el primer ministro japonés, Shinzo Abe.

“Voy a plantear estas preocupaciones  directamente cuando me reúna con los líderes chinos”, el vicepresidente estadounidense al regresar de su viaje.

Biden se reunirá con el vicepresidente chino, Li Yuanchao, y asistirá a una cena ofrecida por el presidente Xi Jinping .

¿Por qué importan los asuntos del espacio aéreo?

La tensión sobre la situación en el Mar de China Oriental ha aumentado los temores de que algún incidente en el aire causes que las cosas se salgan de control. También ha incrementado la preocupación acerca de hasta qué punto China estará dispuesta a perseguir sus intereses en la región de Asia y el Pacífico, y hacer retroceder la influencia de EU.

China está pidiendo a los aviones que entran en su zona de defensa aérea que se identifiquen y presenten planes de vuelo. La portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Jennifer Psaki, reiteró esta semana que Washington no reconoce la zona de defensa aérea, ni la demanda de China para ser notificada de los planes por medio de los aviones de otras naciones para volar en la zona.

Japón ha dicho que sus aerolíneas no cumplirán con las nuevas exigencias de China, pero el gobierno estadounidense ha pedido a las compañías aéreas americanas seguir las instrucciones de Pekín.

La acción china, dijo Biden, plantea la posibilidad de evitar  los “accidentes y errores de cálculo”.

Jethro Mullen y Steve Brusk contribuyeron a este reporte.