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Por Annalyn Kurtz, CNNMoney

(CNNMoney) – Con cinco años en la presidencia, Barack Obama aún tiene pendiente su primer objetivo: asegurar la economía para la clase media.

Seguro, una recuperación ha estado en curso durante la mayor parte de su presidencia, pero es aún lenta e irregular. Y a pesar que el enfoque de Obama esté en la clase media, la mejora hasta el momento ha beneficiado grandemente a las corporaciones y a los extremadamente ricos.

Ya sea que culpes a Obama o a un Congreso disfuncional, de cualquier forma la recuperación es difícilmente una historia de éxito para la clase media.

1. Los trabajadores están llevando a casa la parte más pequeña del ingreso registrado de los Estados Unidos: alrededor de 15.8 billones de dólares al año, Estados Unidos produce más en producción económica anual que nunca antes, pero no es el trabajador el que se beneficia. En lugar de eso, las ganancias corporativas ahora explican la porción más grande de ese pastel de la historia, mientras que la porción para los trabajadores ha ido disminuyendo de forma constante.

2. La desigualdad se ha ampliado: la recuperación ha sido buena para las familias que ganan más de 394.000 dólares por año, pero el otro 99% de los estadounidenses apenas la sintieron. El 1% de las familias estadounidenses más ricas se apropió del 95% del ingreso obtenido durante el período de recuperación que cubre del 2009 al 2012, según los economistas al frente de las investigaciones sobre la desigualdad de ingresos, Thomas Piketty y Emmanuel Saez.

Mientras tanto, el ingreso de la familia estadounidense media apenas se ha modificado en los últimos años.

3. El mercado laboral todavía enfrenta un enorme agujero: del pico del mercado laboral a inicios del 2008 a su mínimo en el 2010, la economía de Estados Unidos perdió 8.7 millones de empleos – de los cuales aproximadamente la mitad fueron de la construcción y la industria manufacturera.

Hasta el día de hoy, Estados Unidos aún no ha recuperado todos esos puestos de trabajo. La economía requiere de aproximadamente 1.2 millones de empleos para recuperar el nivel del 2008 y una vez se agregue el crecimiento poblacional a la mezcla, el agujero se ve más como un abismo.

Para llenar ese abismo, la economía aún necesita aproximadamente 7.9 millones de empleos para recuperar las condiciones pre recesión cuando el desempleo estaba por debajo del 5%, de acuerdo a Heidi Shierholz, economista del liberal Instituto de Política Económica. Aún con un alto nivel de contratación, tomaría por lo menos cinco años llegar a eso.

Parte del problema surge de los trabajadores que dejan la fuerza laboral. Si estos “trabajadores que faltan” buscaran trabajo, Shierholz estima que actualmente el desempleo estaría cerca del 10%, en lugar del actual 6.7%.

4. El índice de pobreza sigue siendo alto: aproximadamente 46.5 millones de estadounidenses viven en la pobreza: eso equivale al 15% de toda la población de Estados Unidos. El índice de pobreza apenas se modificó durante la presidencia de Obama, marcando la primera vez que se ha mantenido en 15% o más por tres años consecutivos desde 1965.

5. Un número récord de estadounidenses están recibiendo los cupones de alimentos: durante la recesión, surgieron los rollos de cupones de alimentos, y para 2013, 48 millones de estadounidenses recibían este beneficio – el número más alto desde que inició el programa en 1969.

El beneficiario promedio recibe 133 dólares mensuales del programa, pero algunos de esos beneficios están ahora en el bloque de recortes del Congreso.

6. El restablecimiento de la industria manufacturera fue un espejismo: en su discurso del Estado de la Unión del 2012, el presidente elogió a las industrias de manufactura que estaban trayendo empleos de vuelta a los Estados Unidos. Específicamente, destacó a la fábrica de candados Master Lock por restituir 100 empleos en su planta de Milwaukee.

Sin embargo, esto es lo que olvidó mencionar: aún después de traer unos cuantos empleos de vuelta a Estados Unidos, los fabricantes como Master Lock están funcionando con una fuerza laboral estadounidense que es una pequeña parte del tamaño que tuvo dos décadas atrás.

Con la automatización jugando un papel más importante, y con muchos empleos que se mantienen en mercados extranjeros más baratos (como China y México en el caso de Master Lock), la historia del restablecimiento de la industria manufacturera es “abrumadoramente imaginaria”, dijo Alan Tonelson, investigador del Consejo estadounidense de negocios e industria.

En general, la industria manufacturera ha agregado solo 568.000 puestos de trabajo desde el 2010, solo un cuarto de aquellos que fueron recortados en los dos años anteriores.

7. El comercio mundial no está ayudando mucho: ¿recuerdas cuando el presidente reveló una meta ambiciosa para duplicar las exportaciones de los Estados Unidos durante un período de cinco años, que inicia en el 2010?   Faltando un año, él está lejos de llegar allí.

Las exportaciones de Estados Unidos al resto del mundo sumaron 1.1 billones de dólares en el año 2009, ajustada por la inflación, y alcanzaron 1.4 billones de dólares en el año 2012. Necesitarían tener un año notable, creciendo otro 57% para alcanzar el objetivo de Obama para finales del 2014.

“Desde cualquier punto de vista razonable, este objetivo ha fracasado miserablemente”, dijo Tonelson.

Además, más exportaciones significan poco para el crecimiento económico a menos que crezcan más rápido que las importaciones. Después que Obama firmara un acuerdo de libre comercio con Corea del Sur en el año 2011, las exportaciones crecieron, pero las importaciones desde el país – como teléfonos móviles, coches y repuestos de automóvil – crecieron incluso más rápidamente.

“El presidente habla sobre el comercio y las exportaciones crecientes, pero ignora las importaciones. Es como reportar el resultado de un partido de fútbol americano dando las anotaciones de un solo equipo. No sabes quién ganó”, dijo Lawrence Mishel, presidente del Instituto de Política Económica.

El Instituto de Política Económica estima que el acuerdo resultó en la pérdida de 40.000 empleos estadounidenses, en contraposición a los 70.000 que la administración de Obama dijo que crearía.

Por supuesto, no es que el presidente no haya tenido algunos éxitos.

“Él atravesó la peor recesión en 70 años”, dijo Mishel. “La economía estaba decreciendo a un ritmo verdaderamente rápido durante los seis meses previos a que él asumiera el cargo, y seis meses después, la economía estaba creciendo otra vez. Por lo tanto, se le podría conceder algún mérito por eso”.

Obama llama al 2014 el “año de la acción”. Esperemos que cumpla.