Por Tom Sweetman, CNN
(CNN) — Su designación en el Bayern Múnich fue considerada como una especie de golpe de Estado, pero menos de un año después de su llegada al país bávaro, las primeras grietas aparecieron en la relación entre Pep Guardiola y el club alemán.
Ampliamente considerado como el mejor entrenador del mundo, Guardiola se unió al Bayern el año pasado armado con una filosofía futbolística que le trajo dominación mundial durante su época en el Barcelona.
El español rápidamente guió al Bayern a victorias en el Mundial de clubes y la Supercopa de la UEFA, antes de asegurar el título de la Bundesliga alemana con una velocidad récord.
Pero después de salir de la Liga de Campeones en la etapa de semifinales contra el Real Madrid esta semana en forma humillante, el estilo de fútbol del español basado en la posesión estuvo bajo críticas.
“Si no ganamos, eso no me ayuda cuando el director ejecutivo del Bayern Múnich, Karl-Heinz Rummenigge, y el director deportivo Matthias Sammer me respaldan”, dijo Guardiola a los reporteros.
“Si perdemos estoy en riesgo para el club. Es un gran club y siempre tienes que ganar. Si esto no ocurre, el club puede decidir algo más”.
Quizá más preocupante para Guardiola, es que el presidente honorario Franz Beckenbauer expresó abiertamente su exasperación después de la salida del Bayern en la Liga de Campeones.
“El Bayern no está bien”, dijo Beckenbauer, quien entrenó y jugó en el Bayern, al diario español Marca.
“Esto es algo que supimos durante semanas. La decepción es enorme”.
Pero Guardiola está convencido de que no alterará su enfoque, al insistir que se reduce a que el Bayern decida si quieren que continúe como entrenador.
“El club debe decidir si el entrenador es el hombre correcto para su equipo”, dijo el español de 43 años.
La derrota 4-0 del Bayern en casa por parte del Real generó preguntas sobre que el equipo de Guardiola es demasiado predecible tácticamente hablando.
“Soy una persona fuerte. Hay muchas críticas pero esa es la naturaleza de la bestia. Las críticas son normales”, dijo Guardiola.
“No puedo entrenar a los jugadores con las ideas de otros entrenadores. Incluso después de la derrota [contra el Madrid], tengo confianza en mis propias ideas.
“La próxima temporada, jugaremos al 100% con mis ideas. No puedo entrenar a este club o a sus jugadores sin creer en mis ideas”.
Guardiola dice que ya planea una vida en Múnich la próxima temporada, cuando espera repetir su éxito en el frente local, mientras avanza en Europa.
A pesar del revés en Europa, Guardiola podría ganar un cuarto trofeo esta temporada cuando el Bayern juegue contra el Borussia Dortmund en la final de la Copa Alemana el 17 de mayo.