(CNN Español) – En Brasil, no todo fue una fiesta en el primer día de la copa.

Se registraron varios enfrentamientos entre manifestantes y la policía a tan solo unos 12 kilómetros del estadio de Sao Paulo donde se inauguró la Copa.

Los disturbios comenzaron varias horas antes de que se disputara el encuentro entre Brasil y Croacia.

La policía brasileña intentó controlar a un grupo de manifestantes utilizando gases lacrimógenos.

Al menos una persona fue detenida.

Además, Shasta Darlington y Barbara Arvanitidis de CNN resultaron heridas al ser impactadas por un proyectil de gas lacrimógeno mientras cubrían los hechos.

Estas manifestaciones empezaron hace un año y se han incrementado en los últimos meses.

Una de las razones principales es el descontento de un sector del pueblo brasileño por los más de 11.000 millones de dólares invertidos por el Gobierno en el Mundial.

En ese grupo de manifestantes existe la convicción de que la administración de Dilma Rousseff debería haber utilizado ese dinero para escuelas, hospitales y otros servicios públicos.

La presidenta Rousseff defendió estos gastos el miércoles y aseguró que su gobierno nunca dejó de invertir en salud y en educación.

Hasta ahora, han habido manifestaciones en 18 ciudades brasileñas.

El ambiente en Río de Janeiro fue similar al de Sao Paulo.

La ciudad más importante de este mundial no solo también tuvo manifestaciones, sino que además, sus aeropuertos dejaron de funcionar por el día.

Esto fue a causa de una nueva huelga de trabajadores que llega justo cuando Brasil espera que incremente la entrada de turistas a sus tierras.

Los trabajadores de 3 de los aeropuertos cariocas decidieron irse a un paro de 24 horas a partir de la medianoche del jueves.

Esto incluye a los empleados de recepción, maleteros y personal de limpieza.

Esto afectará al aeropuerto internacional de Río de Janeiro, como también a la terminal para vuelos nacionales Santos Dumont y el aeródromo de Jacarepaguá.

Otras ciudades brasileñas también sintieron las secuelas de este paro ya que Río es un punto importante para vuelos de conexión dentro del país.

Esta huelga fue organizada por el sindicato municipal de trabajadores del sector aéreo de Río.

Dichos trabajadores han reivindicado un aumento salarial de 5,6 % durante varios meses.