(CNN) – Nadie tiene más en juego en el debate presidencial republicano del miércoles por la noche que Jeb Bush.
El exgobernador de Florida, con uno de los nombres más reconocidos en la política y 100 millones de dólares en el banco, se enfrenta a uno de los momentos más cruciales de su carrera política en el debate de CNN que tendrá lugar en la Biblioteca Reagan.
En la impredecible contienda del Partido Republicano para la presidencia, Bush está luchando por recuperar el equilibrio en medio del Huracán Trump. Primero trató de ignorar al belicoso multimillonario antes de cambiar de rumbo y devolver un duro golpe. Él ha dado a conocer detallados planes de reformas fiscales e inmigratorias para mostrar que su propuesta es tangible y no tan solo un estilo. Ha mantenido un ritmo riguroso en la campaña electoral, participando en las reuniones de los lunes con los líderes de tecnología en Seattle antes de dirigirse a Nevada y a Michigan después del debate.
¿La recompensa por todo ese trabajo duro? Un deslizamiento constante hacia la mitad del grupo que les está provocando nervios a los donantes de Bush y una puerta abierta a sus rivales como Ben Carson y el gobernador de Ohio, John Kasich, para rebasarlo en estados clave con votación anticipada.
He aquí un vistazo a algunos de los obstáculos que Bush y otros candidatos presidenciales republicanos enfrentan mientras se acerca la noche del debate.
Bush
El patrimonio inicial del exgobernador de Florida –dinero, conexiones y experiencia política– ha hecho que su trayectoria descendente sea aún más sorprendente mientras lucha por recuperar el control de la narrativa de la campaña.
“Estos debates son momentos que, cada vez más, parecen de vida o muerte para los candidatos que iniciaron como los presuntos favoritos, pero que han caído a cifras de un solo dígito”, dijo el estratega republicano, Steve Schmidt, quien clasificó a Bush, Scott Walker y Marco Rubio en esa categoría. “El primer paso para asegurar la nominación es tomar completamente el control de tu destino dentro del proceso. A estas alturas en 1999, George W. Bush ya lo había logrado. En este momento en el tiempo, Donald Trump ha logrado eso”, dijo Schmidt, un antiguo asesor de Bush padre, quien asesoró a John McCain en el 2008.
“Ninguno de estos candidatos tiene alguna posibilidad de controlar su propio destino por más tiempo… su capacidad para subir de 3-, 4-, 5-, 6% se centra fundamentalmente en que Donald Trump pierda el control”, dijo Schmidt. “Ningún otro candidato, con la posible excepción de Ben Carson, tiene el alcance para vencer a Trump. Solo Trump puede vencer a Trump”.
Bush está haciendo un esfuerzo notable para volver a tomar el control de la narrativa de su campaña. Él dejó a un lado su enfoque con una actitud pasiva frente a Trump y adoptó la confrontación directa. Él está permitiendo que su personalidad se vea más a menudo, por ejemplo, desabotonándose la camisa durante el fin de semana para mostrar una camiseta con el logotipo de la campaña de 1984 de Ronald Reagan y de su padre.
Además, el lunes dio a conocer un video de la campaña en el que habla español… desafiando las declaraciones de Trump respecto a que Bush solo habla inglés en la campaña electoral. El video también incluye una rara aparición de la esposa de Bush, Columba, quien es inmigrante de México.
“He vivido más de la mitad de mi vida aquí”, dice ella en inglés en el video. “Todos tenemos los mismos intereses, los mismos sentimientos”.
Aun así, las medidas no están ayudando mucho a Bush en las encuestas. Una encuesta de la Universidad de Monmouth publicada el lunes descubrió que en New Hampshire, Bush se ha deslizado desde el segundo lugar para llegar en un empate por el quinto lugar con Carly Fiorina con un 7%.
Trump
Al considerar su desafiante actitud frente a las reglas comunes de la gravedad política, se ha hecho difícil predecir el tipo de error que lograría atrofiar el impulso de Trump.
¿Un vago comentario que pudiera ofender a las mujeres? Él fue citado en su artículo de portada de la revista Rolling Stone la semana pasada diciendo: “Mira esa cara”, cuando Fiorina apareció en la televisión. Se enfrentó de manera directa contra la anfitriona de Fox News, Megyn Kelly, durante y después del primer debate organizado por Fox News.
¿Otro giro que podría ofender a los latinos? Trump ha mantenido en pie sus comentarios respecto a que algunos inmigrantes mexicanos son criminales y violadores; además, propuso ponerle fin a la ciudadanía universal por nacimiento y abogó por la construcción de un muro a lo largo de la frontera con México. A pesar de todo eso, su apoyo solo ha crecido, aunque la mayoría de hispanos lo ve de manera negativa.
“Creo que los debates tienden a trabajar a su favor porque en su núcleo, son actuaciones”, dijo el estratega republicano, Kevin Madden, un antiguo asesor de Romney. “Él es una celebridad que hasta hoy ha estado actuando durante la mayor parte de 35 años, así que nada de esto es nuevo para él”.
Trump ha mostrado vulnerabilidades graves cuando se trata de cuestiones basadas en hechos.
Acusó al locutor conservador de radio, Hugh Hewitt, de usar preguntas “gotcha” cuando Hewitt puso a prueba su conocimiento acerca de los líderes de los grupos terroristas como Hamas, Hezbolá, al-Nusra e ISIS. También ha descrito de forma errónea elementos del acuerdo de Irán y ha hecho afirmaciones difíciles de fundamentar respecto a que los cristianos sirios tienen más dificultades para entrar en Estados Unidos que los musulmanes sirios.
“Una de las cosas que será interesante ver es si los moderadores u otras campañas buscarán exponer a Trump como un fraude o una estafa cuando se trate de promover una agenda republicana conservadora”, dijo Madden. “Si es expuesto como alguien sin nada de seriedad en ese tema (política exterior y seguridad nacional), eso podría ayudar a que algunas de las otras campañas comiencen a atraer realmente un contraste favorable sobre un tema que será muy importante en el 2016”.
Walker
La campaña de Walker ha estado en caída libre durante las últimas semanas, especialmente en Iowa, donde fue el líder consistente en las encuestas durante gran parte de esta primavera.
Pero últimamente Walker ha recibido muchísimas malas noticias en Iowa, lo que es vital para los prospectos de su campaña. Walker mantuvo el primer lugar en el grupo en las encuestas a principios de este verano, pero en una encuesta de la Universidad Quinnipiac publicada la semana pasada, Walker había caído desde el primer lugar con el 18% en julio hasta el décimo lugar en septiembre con el 3%.
En la encuesta de CNN/ORC, Walker ha caído del 10% del apoyo a nivel nacional en julio al 8% en agosto y al 5% a principios de este mes. En la encuesta de ABC News/Washington Post del lunes, Walker estaba con el 2% a nivel nacional, por debajo del 13% que tenía en julio.
“Walker necesita que su actuación en el debate revierta la trayectoria de su campaña”, dijo Madden. “Empezó muy rápido, pero el interés inicial en su campaña con tanto entusiasmo e impulso no pudo igualarse una vez que los votantes comenzaron a sintonizarse un poco más”.
Fiorina
El debate le ofrecerá a Fiorina la primera oportunidad para que se ponga en guardia contra Trump.
Otra actuación contundente podría mantener su impulso en crecimiento, pero si es eclipsada, sería difícil verla levantando más vapor para que se mantenga y supere a los competidores cuyo nombre es mucho más reconocido.
Fiorina, antigua jefe de Hewlett-Packard, llegó al escenario principal sobre la fuerza de su actuación en el primer debate, lo que ha elevado las expectativas a su favor para la noche del miércoles. Si trazamos la trayectoria opuesta de Walker, Fiorina ha escalado constantemente en las encuestas desde el primer debate… un aumento que CNN reconoció con una modificación de los criterios de debate que aseguraron su lugar.
Aún así, Fiorina se ha sostenido en el rango de un solo dígito, según la encuesta de CNN/ORC. En la encuesta más reciente de ABC News/Washington Post, ella pasó de contar tan solo con un asterisco en julio hasta el 2% este mes.
Ella encabezó al grupo en la encuesta extraoficial de la Federación Nacional de Mujeres Republicanas realizada durante el fin de semana… logrando casi la mitad de los votos cuando se combinaron las elecciones del primer y segundo lugar. En esa conferencia, ella también obtuvo la atención con un ataque indirecto contra Trump durante un discurso bien recibido, en donde también dirigió un montón de ataques contra la candidata demócrata favorita, Hillary Clinton.
Carson
El estilo sobrio del neurocirujano retirado, Ben Carson, le ha servido bien en los últimos meses, lo que le ha ayudado a crear un público fiel entre los votantes evangélicos y una organización de campaña profesional que ha resultado en grandes multitudes, incluso en estados azules intensos como California.
Pero a excepción de unas pocas líneas memorables en el primer debate, se consideró ampliamente como alguien demasiado tranquilo… y Trump ha atacado su nivel de energía. Carson también ha parecido asustadizo en cuanto a contraatacar a Trump… en un momento poniendo en duda la autenticidad de su fe, para luego retractarse de esa crítica y decir que lo sentía.
Él ha dicho que no quiere entrar en una “lucha de gladiadores” con Trump, pero, al mismo tiempo, el miércoles deberá mostrar que posee el temple que lo motivará a enfrentarse con él.
El riesgo para Carson y para todos los candidatos, por supuesto, es ser agresivos pero no cruzar la línea en la que sus ataques trabajen a favor de Trump.
Rubio
Al considerar su carisma y narrativa convincente en la campaña electoral, muchos donantes y estrategas republicanos todavía ven a Rubio como uno de los contendientes más formidables para la nominación republicana. Al igual que los otros candidatos más destacados, Rubio se ha desvanecido en la sombra de Trump.
Aunque se considera que en el primer enfrentamiento entre los candidatos, su desempeño en el debate fue bueno. Al considerar su juventud, su desafío es demostrar que posee la seriedad para servir como el portaestandarte del partido.