(CNN)– Prepárate. El factor repugnante de esto va más allá del nivel de vómito: unos doctores en Napa, California, encontraron una solitaria en el cerebro de un hombre que casi lo mata.
Solo unos pocos días antes, un investigador de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) anunció en el New England Journal of Medicine que otro cáncer de pulmón en un hombre fue causado por el cáncer de su solitaria.
Es correcto. ¿Recuerdas esa solitaria “en movimiento” dentro del cerebro de Luis Ortiz? El quiste fue eliminado con éxito y Ortiz se está recuperando por completo.
Un hombre colombiano no tuvo tanta suerte. Los tumores cancerosos en el pulmón que le ocasionaron la muerte en el 2013 procedían de una solitaria que había estado viviendo en su sistema comprometido por el VIH. Cuando la solitaria desarrolló cáncer, sus células se extendieron dentro del cuerpo del hombre y crecieron allí.
¿Acaso estas son solo dos muy tristes (y asquerosas) coincidencias? En realidad es más aterrador que eso. Hay por lo menos otros cuatro parásitos igualmente inquietantes por los que necesitamos preocuparnos, algunos más comunes de lo que pensamos.
Enfermedad por arañazo de gato, también conocida como Toxoplasmosis, también conocida como T. gondii
La toxoplasmosis infecta a más de un millón de personas cada año en Estados Unidos. Una vez que te contagias, por lo general, la adquieres para toda la vida, de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Esta es causada por un parásito que ingerimos llamado Toxoplasma gondii que viaja a través de las paredes de nuestros intestinos hacia los músculos y los órganos principales, y puede causar fiebre y malestar, enfermedades oculares y, en individuos inmunodeprimidos, puede ser mortal. Una infección durante el embarazo puede causar aborto involuntario y enfermedades graves en los recién nacidos; existen hasta 4.000 casos de transmisiones de madre a hijo cada año.
Debido a que los gatos son un anfitrión común, a menudo se le llama la fiebre por arañazo de gato, pero en realidad te contagias al ingerir el parásito después de limpiar una caja de desechos de gato o al comer algo contaminado con heces de gato, como algún alimento que crece en un jardín de la casa, en donde a tu gato le gusta defecar. También te contagias al comer carne cruda o medio cruda.
Nemátodos, también conocidos como toxocariasis, también conocidos como T. canis y T. cati
No presumas, los que odian a los gatos y a los perros también pueden portar el parásito. Es causado por la forma larvaria de los nemátodos que infectan a los gatos y a los perros, incluso cuando son jóvenes. Los huevos de nemátodos –llamados Toxocara canis en perros y Toxocara cati en gatos– se excretan en las heces, y si tú (o tu hijo) las ingieres accidentalmente, generalmente por comer algo con tierra infectada, los huevos viajarán entonces a los órganos y tejidos, eclosionarán y harán lo suyo. Aunque no es común, es malo: Los CDC dicen que cada año, 70 personas, en su mayoría niños, quedan cegados por la enfermedad.
La tricomoniasis, también conocida como T. vaginalis
Esta enfermedad de transmisión sexual (STD, por sus siglas en inglés) es causada por el parásito Trichomonas vaginalis y los CDC dicen que esta es la enfermedad de transmisión sexual más comúnmente curable allí afuera. Casi 3,7 millones de estadounidenses están infectados, y el 70% no presenta ningún signo o síntoma, por lo que ni siquiera saben que constantemente la están transmitiendo. Esa puede ser una de las razones por las que otro millón de personas se infectan cada año.
Los síntomas, cuando aparecen, incluyen ardor al orinar, enrojecimiento, dolor o picazón en los genitales, o tal vez una secreción. Es tratable con medicamentos antimicrobianos que tu médico te prescriba, pero fácilmente puedes infectarte nuevamente… otra buena razón para practicar el sexo seguro.
Enfermedad de chagas, también conocida como T.cruzi
Esta enfermedad proviene de un insecto llamado triatominos que está infectado con el parásito Trypanosoma cruzi. Se encuentra en México, Centroamérica y Sudamérica, así que afecta sobre todo a aquellos que han visitado esas zonas o han emigrado desde esas regiones.
Los CDC estiman que, en este momento, hay por lo menos 300.000 personas que viven con la enfermedad en Estados Unidos, pero muchos no lo saben. De manera inusual, esta enfermedad conlleva años de infección crónica antes de que los síntomas tales como enfermedades del corazón, insuficiencia cardíaca y problemas gastrointestinales comiencen.
La tenia, también conocida como neurocisticercosis, también conocida como T. solidum
¿Recuerdas ese gusano “en movimiento” dentro del cerebro de Luis Ortiz? Bueno, no es una película de terror (tú sabes, como Alien, en donde esa cosa rompe su estómago). Los quistes larvales como los de Ortiz son causados por la etapa inmadura de una tenia de cerdo llamada Taenia solium. Esta puede infectar todas las partes del cuerpo, pero cuando infecta el cerebro se llama neurocisticercosis.
Lo que es realmente grave: los CDC dicen que cerca de 1.000 personas al año se infectan cuando comen algo que contiene “huevos microscópicos pasados en las heces de una persona que tiene una solitaria intestinal de cerdo”.
Si bien esto es más común en Latinoamérica, la lección aquí es no comer carne de cerdo medio cruda, donde los huevos pueden vivir, y siempre lavarte las manos. La parte realmente aterradora: ¿Acaso esa persona que preparó tu comida hace lo mismo?