(CNN) – Podrían estar muy lejos de la ostentación y el glamour de las Vegas o Macao, pero las residencias de ancianos podrían estar convirtiéndose rápidamente en una nueva frontera para los juegos en Japón.
En un centro de cuidado diario para personas mayores en Yokohama —su nombre acertadamente es en honor a la meca de los juegos en EE.UU. mencionada anteriormente— las personas mayores juegan mahjong y baccarat mientras los repiques y sonidos de las máquinas tragamonedas y pachinko llenan la habitación.
“Creemos que este casino estimula al cerebro y ayuda a prevenir o eliminar el desarrollo de la demencia”, dijo Kaoru Mori, presidente del Servicio de Atención a las Personas Mayores de Japón, el cual opera el centro “Las Vegas”.
No es ningún secreto que a las personas mayores les encanta jugar. Las canas son una escena común en todas partes, desde los casinos de Las Vegas hasta los salones de mahjong de Hong Kong.
Beneficios y riesgos
Algunos investigadores han argumentado que jugar podría ser bueno para prevenir los trastornos cerebrales que son comunes en la edad avanzada. Un estudio realizado por Suwa Tokyo University of Science encontró que los sujetos de edad avanzada demostraban un aumento en la actividad del lóbulo parietal y frontal, y mejoras en el reconocimiento.
Sin embargo, otros advierten que las personas mayores que juegan se encuentran especialmente en riesgo de caer en una adicción.
Según datos de la industria de los juegos en Estados Unidos, casi la mitad de los visitantes adultos a casinos en 2013 tenían 50 años o más. El AARP, un grupo de presión que representa a los jubilados, advirtió que las personas mayores son el segmento de más rápido crecimiento entre los adictos a los juegos en Estados Unidos.
Más o menos el 5% de los japoneses, o 5,36 millones de personas, son adictas a los juegos, según un estudio del gobierno realizado en 2014.
Los residentes del centro Yokohama dicen que jugar ayuda a mantener la agilidad en su cerebro, y les ofrece compañía que de otra forma no tendrían.
“He vivido solo durante décadas; muchos días no pronuncio una palabra. Me siento muy deprimido, pero aquí jugamos y hablamos”, le dijo un cliente a CNN.
Otro dijo “Uso mi cerebro al jugar mahjong y uso mis dedos; creo que esto ayuda a estimular mi mente”.
Prohibido
Debido a las reglas estrictas en contra de hacer apuestas afuera de sitios definidos estrictamente en Japón, en el centro de Yokohama no circula dinero real; en cambio, las personas mayores utilizan billetes falsos y compiten por premios.
Sin embargo, esto no ha impedido que algunas municipalidades prohíban la práctica del todo.
En septiembre, la Asamblea Municipal de Kobe aprobó una ordenanza que prohibía que los centros de cuidado diario ofrecieran juegos que “generan una pasión por los juegos” o usan “dinero falso” como chips de los casinos.
Los expertos advierten que cuando hay dinero real involucrado, los jugadores de edad avanzada pueden ser especialmente vulnerables.
Un estudio de 2005 realizado por la Universidad de Pensilvania encontró que el 70% de las personas mayores que participaron en la encuesta habían jugado el año anterior y una de cada 10 personas mayores de 75 años se encontraba en riesgo de tener problemas financieros debido a los juegos.
Maureen O’Connor, una ex alcaldesa de San Diego, jugó más de mil millones de dólares en el transcurso de 10 años en lo que dijo, era una adicción a los juegos agravada por un tumor cerebral.
O’Connor solo se detuvo después de que la atraparan malversando 2 millones de dólares de una organización benéfica establecida por su fallecido esposo.