(CNN) – “No te das cuenta realmente de cuánto tiempo son cuatro minutos hasta que se trata de tu cuerpo desnudo”.
La periodista deportiva Erin Andrews, conmovida, hizo esta declaración la semana pasada mientras testificaba en su demanda civil por 75 millones de dólares por un video que fue publicado en línea, en el que ella aparece desnuda. El jurado empieza a deliberar el lunes.
El video que es el objeto central del juicio fue tomado en un Nasville Marriott en 2008 por su acosador, Michael Barret. Andrews descubrió su existencia en línea en 2009 y se molestó mucho por eso.
“Ahora está en Internet… y va a estar en el Internet hasta que muera”, dijo Andrews en su testimonio.
Desde el inicio del juicio el 23 de febrero, el video ha sido constantemente uno de los videos más buscados en Google y aún es posible encontrarlo en varios sitios porno.
Sin embargo, ¿por qué sigue estando disponible en línea… siete años después de que Andrews lo descubriera?
Google no respondió a las solicitudes en busca de comentarios, pero ha tomado medidas para eliminar los videos no consensuados a partir de sus resultados de búsqueda y de YouTube.
En junio de 2015, Google anunció una nueva política que le permitía a las víctimas de la explotación cibernética solicitar la eliminación de imágenes y videos que han sido publicados sin su consentimiento.
Sin embargo, esta no es una solución perfecta.
Carrie Goldberg, una abogada de privacidad en Internet y el consentimiento sexual, dijo que es casi imposible eliminar todo rastro de un video una vez que se ha publicado en Internet.
“Incluso si pudieras eliminarlo desde cada sitio, cualquier persona que ha visto o a descargado una copia en su computadora puede volverlo a publicar en cualquier momento”, dijo Goldberg. “Es como borrar algo repetidamente y que vuelva a aparecer, pero es incluso más canceroso que eso”.
Goldberg, quien también trabaja con Cyber Civil Rights Initiative, dijo que “con una persona de alto perfil, los efectos se amplifican”.
Ha habido más de 300 millones de búsquedas para el video y ha sido visto más o menos 17 millones de veces.
Andrews y sus abogados han hecho énfasis en esto en su demanda en contra de Barrett y la compañía que tiene en propiedad y maneja el Nashville Marriott.
La abogada Elisa D’Amico cofundó el Cyber Civil Rights Legal Project como una iniciativa gratuita a través de su firma, K&L; Gates.
Ella dijo que obtener los derechos de autor para los videos y fotos que han sido publicados en línea sin consentimiento puede ayudar a las víctimas a eliminarlos.
“Los sitios son bastante receptivos, y de hecho, muchos sitios de ‘pornografía por venganza’ en realidad sí responden a las solicitudes de eliminar el material”, dijo D’Amico.
Andrews dijo en una entrevista con GMA en 2010 que ella obtuvo los derechos de autor para el video. Sin embargo, incluso con eso, sus abogados y los agentes judiciales nunca podrán eliminarlo por completo.
D’Amico dijo que muchas veces, las personas que publican fotos o videos de desnudos de otras personas van a prisión por crímenes relacionados, como el acoso cibernético o el acoso sexual.
Esto aplica en el caso de Andrews. Barret fue sentenciado a 2 años y medio en prisión por acoso interestatal, no por publicar los videos en Internet.
Barrett pudo filmar a Andrews mientras estaba desnuda al manipular la mirilla en la puerta de su habitación del hotel.
En su demanda civil, Andrews afirma que la compañía que tiene en propiedad y maneja el Nashville Marriott fueron negligentes.
De acuerdo con los abogados de Andrews, el personal del hotel le informó a Barrett en qué habitación estaba ella hospedada, así que él pidió que lo pusieran en la habitación contigua.
Las compañías hoteleras dijeron durante el juicio que el video era completamente culpa de Barrett y que él asumía toda la responsabilidad por haber obtenido el nombre de Andrews.