(CNN Español) – El 22,3% de los españoles está en riesgo de pobreza, según la encuesta del Instituto Nacional de Estadística sobre Condiciones de Vida.
La cifra está dos décimas por encima de la registrada en 2015, lo que significa que, pese a la mejora en los datos de crecimiento económico del país e ingresos por persona, la tasa de desigualdad no mejora.
La población en riesgo de pobreza es un indicador relativo que mide la desigualdad. No mide la pobreza absoluta, sino cuántas personas tienen ingresos bajos en comparación con el conjunto de la población.
Esta última encuesta fue realizada en 2016 con datos de ingresos de 2015. De ella se desprende que el ingreso medio por persona alcanzó los 10.708 euros, un 2,8% más que la cifra registrada el año anterior. En el caso de los hogares, la cifra de ingreso medio se situó en los 26.730 euros (2,4% más).
Una de las características que mide esta encuesta es la población en riesgo de pobreza según la nacionalidad.
La situación de los hogares
Aunque la encuesta del INE mostró que el 15,3% de los hogares españoles tenía “mucha dificultad” para llegar a fin de mes, esto es 1,6 puntos más que en el año anterior, algunos datos mejoran ligeramente.
El porcentaje de hogares que no tenía capacidad para afrontar gastos imprevistos bajó del 39,4% en 2015 al 38,1% en 2016.
El 39,5% de los hogares no se podía permitir ir de vacaciones fuera de casa al menos una semana al año, 1,1 puntos menos que en 2015.
Por su parte, el 8,4% de los hogares tenía retrasos en los pagos relacionados con la vivienda principal (hipoteca o alquiler, recibos de gas, electricidad, comunidad,…) en los 12 meses anteriores a la encuesta, un punto por debajo del porcentaje registrado el año anterior.
Pobreza infantil
Un nuevo estudio de UNICEF dado a conocer este mes reveló que España tiene una de las tasas más altas de pobreza infantil en la Unión Europea (UE).
A partir de un análisis de la crisis económica mundial que estalló en 2008, el estudio “Hijos de la Austeridad: El Impacto de la Gran Recesión en la pobreza infantil en países ricos” expone que España es el tercer país de toda la UE con una de las más altas tasas tanto de pobreza relativa como de “pobreza anclada”, solo por detrás, en ambos segmentos, de Rumanía y Grecia.
El término de “pobreza anclada”, explicó Unicef, significa que el umbral no se cambia cada año analizado -en función de los mayores o menores ingresos del conjunto de la población-, tal y como se hace cuando se analiza la pobreza relativa. En cambio, se fija la línea de pobreza en un año concreto -en el estudio se fijó en 2008- para estudiar cómo cambia el bienestar de la población respecto a ese umbral de pobreza.
Dicho esto, la “pobreza anclada” registró en España un aumento de 9 puntos porcentuales entre 2008 y 2014, para abarcar a casi el 40% de la población infantil.